El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) canceló discretamente la serie de obras de arte NFT (tokens no fungibles) que colocó a la venta como forma de recaudación de fondos para su trabajo de conservación ambiental. La decisión se tomó luego de las críticas que la iniciativa levantó por los impactos ambientales de esta tecnología. La iniciativa duró menos de 48 horas.
WWF anunció la venta de 13 NFT en representación de los animales más amenazados del mundo. Para esta venta utilizarían una cadena de bloques «ecológica». Un portavoz de WWF dijo a The Independent que esta iniciativa se planificó con el objetivo de probar una nueva fuente de recaudación de fondos.
Los fondos recaudados ayudarían a financiar el trabajo de WWF para detener la crisis climática y de la naturaleza. Así como a proteger la «vida silvestre preciada» como rinocerontes, leopardos y gorilas y sus hábitats.
A través de Twitter los detractores de la iniciativa protestaron por las altas emisiones asociadas con la generación de NFT. WWF enfrentó acusaciones de dañar el medio ambiente que dice proteger, así como de lavado verde para Ethereum y Bitcoin.
En miles de respuestas y retuits los críticos calificaron a WWF de «totalmente irresponsable», «loco» y dijeron que «ya no se puede tomar en serio». Además varios patrocinadores amenazaron con cancelar sus donaciones.
En el comunicado donde se anunció el retiro de la iniciativa la organización señaló: “Reconocemos que los NFT son un tema muy debatido y todos tenemos mucho que aprender sobre este nuevo mercado, por lo que ahora evaluaremos completamente el impacto de esta prueba y reflexionaremos sobre cómo podemos seguir innovando mejor para involucrar a nuestros seguidores «.
El criptomundo rechazó el retiro de los NFT de WWF
Durante el tiempo que duró el evento WWF-UK vendió 174 “tokens por la naturaleza” por un total de $46.600 a 324 compradores. La venta más grande fue una representación digital de un orangután Tapanuli, que se vendió por casi $2,700.
Era de esperar que luego de la buena recepción una cancelación de la iniciativa disgustara al mundo de las criptomonedas. La noticia llegó el viernes por la noche y luego los compradores no supieron nada sobre las implicaciones durante el fin de semana. Los afectados describieron la situación como «un desastre», «una experiencia horrible» y el «peor proyecto de NFT».
Uno de los compradores dijo que era “increíble que una de las organizaciones benéficas de conservación líderes en el mundo nos haya reforzado”. En el mundo de las criptomonedas, «reforzar» significa abandonar un proyecto después de que la gente lo haya aceptado.
Muchos de los compradores exigieron reembolso. “La organización benéfica decidió descontinuar los NFT debido a preocupaciones ambientales. ¿Por qué deberían quedarse con el dinero sucio de todos modos?”, dijo Fyse.
Unos de los diseñadores de NFT involucrados en el proyecto escribió en Twitter; «Todavía estoy impresionado en cómo logran cabrear a los ambientalistas y entusiastas de NFT al mismo tiempo».
Los asiduos al mundo de la criptografía creen que WWF cedió con demasiada rapidez a radicales ambientalistas que no entendieron el potencial de los NFT para percibir dinero y generar conciencia sobre la crisis medioambiental y de la naturaleza.
Uno de los usuarios expresó: “¡Este proyecto podría haber recaudado una gran cantidad de fondos para WWF! La cultura de cancelación de la vergüenza se ha salido con la suya… el impacto de una menor financiación será mayor que un poco de poder. ¡Bien hecho, idiotas, espero que pongan sus manos en sus bolsillos y compensen la pérdida por cancelar este proyecto!”, expresó.
¿BlockChain ecológico?
El descontento de los ambientalistas radica fundamentalmente en la tecnología blockchain que utilizan los NFT. Para acuñar las fichas de su propuesta WWF-UK utilizó una cadena de bloques de nueva generación Polygon.
El sitio climatechangenews.com explicó que Polygon es una cadena de bloques que utiliza una prueba de seguridad conocida como prueba de participación que consume mucha menos energía que las cadenas de Ethereum o Bitcoin.
Sin embargo, Polygon depende de Ethereum para funcionar. La huella de carbono de Ethereum es del tamaño de Suecia. El sitio especializado en criptomonedas es.ambcrypto.com señaló que algunos especialistas sienten que Polygon está lejos de ser la mejor cadena de bloques para un proyecto como el de WWF. No obstante hay quienes sostienen que los grupos ambientalistas y los NFT nunca deben mezclarse.