En la víspera de Navidad, en Francia los chalecos amarillos han seguido manifestando. Ya suman diez los fallecidos como resultado de las protestas anti gubernamentales.
El fin de semana los manifestantes ocasionaron interrupciones consecutivas del tránsito automotor en las calles y avenidas de París y de las ciudades del sur del país.
En el fragor de las protestas, el viernes murió un hombre de 36 años de edad en una rotonda bloqueada por grupos de protestantes. Un conductor infortunado impactó su vehículo contra un camión de transporte de mercancías. El suceso ocurrió cerca de Perpiñán, en la capital del departamento de los Pirineos, según reportó una fuente policial a la agencia de noticias Reuters.
La mayoría de las diez muertes hasta ahora reportadas han sido consecuencia de accidentes de tránsito. Con persistencia los manifestantes han bloqueado las rotondas. Y ocasionado estragos en los peajes de las autopistas locales, extra urbanas e internacionales.
Liberan y juzgarán a un líder que manifestó armado
Uno de los líderes de los chalecos amarillos que fue detenido en París por portar un arma de fuego ilegal, fue liberado este lunes.
Eric Drouet fue detenido durante una de las manifestaciones. Portaba un arma de fuego de uso ilegal. Será juzgado por varias acusaciones.
Drouet compareció este domingo ante un juez que lo liberó, pero lo citó para ser juzgado por una corte correccional.
Manifestaciones en Versalles
Recientemente Versalles ha sido escenario de repetidas y prolongas manifestaciones. Aunque se estima que con el pasar de los días, la participación se disminuye.
Según reportes de prensa de los canales de noticias BFM y CNews, esta vez poca gente manifestó en la ciudad. Los medios de comunicación informaron que fueron muchas menos las personas que accionaron sus protestas.
Los chalecos amarillos: una afronta a Macron
Las manifestaciones de los chalecos amarillos ha sido uno de las más relevantes que registra la historia francesa reciente.
Antes, entre mayo y junio de 1968, se escenificó una serie de protestas en cadena, principalmente en la capital París. Entonces grupos estudiantiles izquierdistas contrariados por lo calificaron como una “sociedad de consumo”, sumaron respaldos de agrupaciones obreras industriales. Entre ellas, las de sindicatos liderados por el Partido Comunista Francés.
Ahora, este nuevo movimiento de protestas que emergió en la capital francesa entre octubre y noviembre de 2018, hace reclamos por el alza de precios de los combustibles, la pérdida del poder adquisitivo de la población y la inflación, estimada en 1,8%. Rápidamente el movimiento se convirtió en una amplia movilización contra las políticas económicas del recién electo presidente Emmanuel Macron.
Medios de comunicación locales e internacionales observan que la movilización de los chalecos amarillos poco a poco va perdiendo adeptos. Y que sus seguidores salen a protestar sin organización, conducción política ni respaldo de portavoces oficiales.
La corriente de los «chalecos amarillos» comenzó a mediados de noviembre con protestas en intersecciones viales y rotondas. Todos en contra de los aumentos de impuestos a los combustibles. Rápidamente se convirtió en una amplia movilización contra las políticas económicas del presidente francés.
La mayoría de los diez fallecimientos han sido consecuencia de accidentes de tránsito de vehículos.
Para más información: Cambio16
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