La figura del pintor neerlandés Vincent van Gogh fue protagonista del Festival de Cine de Venecia, con el estreno de la película “At Eternity’s Gate».
Con su barba rojiza, sombrero de paja y una expresión triste y lúgubre, el actor estadounidense Willem Dafoe se parece misteriosamente a un autorretrato de van Gogh, a quien interpreta en un biopic.
«At Eternity’s Gate» comienza en la década de 1880 con un van Gogh pobre viviendo en París, donde sus pinturas en el mejor de los casos se ignoran. También ridiculizan al artista por incompetente.
El film lo lleva al sur de Francia, entrando y saliendo de asilos mentales, y culmina con su fallecimiento un par de años después a sus 37.
En «At Eternity’s Gate» su muerte llega con una bala en el estómago, pero no producto del suicidio con el que los historiadores especulan como causa de su muerte.
La iniciativa fue dirigida por Julian Schnabel, realizador de «The Diving Bell and the Butterfly», el mismo pintor que recreó algunas de las pinturas de van Gogh para la cinta.
Schnabel ayudó a Dafoe a aprender cómo manejar un pincel.
«Hay mucha pintura en la película. Tenía que saber cómo pintar«, dijo Dafoe a Reuters.
Agregó que «Julian es un gran artista y es un gran maestro, y tenerlo ahí enseñándome como ver de una manera nueva fue emocionante”.
#BiennaleCinema2018 #Venezia75 #AtEternitysGate #WillemDafoe: “#VincentVanGogh was terrifically lucid. I think he was beyond dualistic thinking. What was difficult for him was to reconcile with his visions and to communicate these moments to other people” pic.twitter.com/lRZNZhUTol
— La Biennale di Venezia (@la_Biennale) September 3, 2018
El valor de sufrir
Dafoe interpreta a van Gogh como un hombre profundamente solitario que haya consuelo en la naturaleza y en su trabajo.
«Pinto para dejar de pensar», dice en un momento de la película que el lunes se presentó en el Festival de Cine de Venecia.
A pesar de que sufre desmayos y ataques de ira, su van Gogh no se ve como una persona loca, pero sí como alguien que sufre un tormento mental.
«Él vió el valor (de sufrir)», dijo Dafoe.
«Pensaba que la enfermedad nos puede curar. Él lo apreció, pero eso es muy diferente a la idea de la gente que piensa simplemente que fue un ‘genio loco'», agregó el actor.
Venerado ahora como uno de los más grandes pintores de la historia, van Gogh murió antes de que su arte se reconociera.
#BiennaleCinema2018 #JulianSchnabel’s #VanGogh #WillemDafoe and the cast of #AtEternitysGate on the red carpet of #Venezia75 pic.twitter.com/3s5d6HNgfb
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Por el León de Oro del Festival de Cine de Venecia
Vincent van Gogh es considerado uno de los principales exponentes del movimiento postimpresionista y en su carrera pintó unos 900 cuadros y realizó más de 1.600 dibujos.
«Quizá Dios me dio el don de pintar para gente que todavía no está aquí», dice en otra parte de la película.
En otro momento, durante un diálogo con un sacerdote en un hospital psiquiátrico, dice: «Jesús también fue completamente desconocido durante su vida (…) Jesús no fue descubierto hasta 30 o 40 años después de su muerte».
Preguntado sobre si Van Gogh se veía a sí mismo como una figura parecida a Jesucristo, Dafoe, que interpretó el papel principal en la película de Martin Scorcese «La última tentación de Cristo», respondió:
«En sus cartas él escribió mucho sobre Cristo como para no haberse identificado en algo (…) Tenía una forma de mirar que era muy personal, muy limpia, muy conectada con cosas eternas y quería compartirlas».
Esta película biográfica compite por el León de Oro, el principal premio que se concede en Venecia.
El Festival de Cine de Venecia es el más importante de Europa y culmina en la ciudad italiana el 8 de septiembre.
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