Por Cambio16
04/05/2018
El gobierno chileno quiere adquirir volúmenes de gas natural provenientes del rico yacimiento argentino Vaca Muerta. El interés, no solo de Chile, formó parte de las conversaciones que sostuvieron los presidentes, Sebastián Piñera de Chile y Mauricio Macri de Argentina, tras revisar las relaciones bilaterales.
Chile estaría dispuesta a comprar gas en verano. Justo cuando merma la demanda del consumo interno de Argentina, dijo Susana Jiménez, ministra de Energía del gobierno chileno.
Recién la semana pasada los mandatarios Piñera y Macri, firmaron un protocolo para potenciar el intercambio de gas. Chile y Argentina han comerciado gas la obligación de restituir el recurso. Pero esto ya no será necesario, reseñó el periódico chileno Pulso.
La lectura del acuerdo que se hizo en la industria energética nacional fue una sola: esto viabiliza que Chile compre gas de Vaca Muerta, abriendo una inesperada puerta para el futuro.
Los presidentes acordaron que Argentina y Chile establecerán en los próximos meses las normativas internas que se requieran para “permitir las operaciones de comercialización, exportación, importación y transporte de energía eléctrica y gas natural”.
Ganar ganar es el plan de los Gobiernos australes con Vaca Muerta
“Para que la Argentina pueda desarrollar la producción de sus yacimientos de gas natural como Vaca Muerta, en los volúmenes necesarios para satisfacer su consumo interno, durante los períodos del año de mayor consumo, requiere de nuevas demandas de gas natural que puedan absorber esos mismos volúmenes en los períodos del año de menor consumo interno”, declaró la funcionaria chilena, la cual asu vez propuso a Chile para comprar el fluido en los meses de excedente.
La ministra remarcó que los requerimientos chilenos podrían ser atendidos particularmente desde las dos cuencas argentinas con mayor proyección. Las indicadas son la Neuquina y Austral, pues se conectan con las regiones chilenas del Biobío y la zona Austral.
“Con este protocolo aparece una nueva alternativa de suministro de gas natural para Chile. La materialización sería posible optimizando los 7 gasoductos entre ambos países. Incluso para Argentina es una opción, porque la demanda apalancaría el desarrollo de sus yacimientos de gas natural”, añadió Jiménez.
No obstante, observa que las operaciones dependerán de su factibilidad económica, de la volumetría de la producción de gas en la Argentina y de la capacidad de satisfacer su demanda interna.
Para Jiménez, a diferencia de la década pasada, hoy Chile se encuentra en una situación de gran seguridad energética. Chile ha desarrollado energías renovables que “le aseguran energía para su demanda interna”.
De acuerdo con cifras de Energía Abierta, el gas natural representa el 19,95% de la capacidad instalada en Chile. Una cifra bastante menor a la capacidad instalada en renovables que asciende 45,47%. Mientras que apenas supera a aquella proveniente exclusivamente de energías renovables no convencionales, que a febrero alcanzaban el 18,15% de la capacidad instalada del país, aseguraron desde el Ministerio de Energía.