Universal Hydrogen ve en el hidrógeno un pasaporte futurista para la aviación comercial: menos contaminante y cónsono con las rutas verdes que también incluyen el tráfico aéreo. La compañía anunció que comenzará a probar sus celdas de combustible en un jet de 40 asientos en 2022, en Moses Lake, Washington.
Esta empresa emergente lanzó su propuesta medioambiental con una marcada orientación de negocio rentable. De hecho, las pruebas se agilizarán luego de obtener nuevos fondos de inversores como Tencent y GE Aviation, que se unen a otras firmas igualmente cautivadas por la idea.
La compañía, con sede en Los Ángeles, ha atraído 62 millones de dólares en nuevas inversiones, además de los 22 millones de dólares que recaudó en abril. Su valoración aumentó de 55 millones de dólares a 262 millones de dólares. Otros inversores incluyen las ramas de riesgo de Toyota, JetBlue y Fortescue.
Universal Hydrogen ha firmado acuerdos con al menos cinco aerolíneas regionales para comprar kits de conversión y reemplazar los motores actuales de los aviones. Provistos de una celda de combustible de hidrógeno y un motor eléctrico. Después de las pruebas, los aviones deberían estar operativos para 2025. Luego espera vender celdas de combustible de hidrógeno por suscripción.
«Es el modelo de café Nespresso», dijo Paul Eremenko, su director ejecutivo. «Vendemos la cafetera lo más barato posible y luego monetizamos el suministro de cápsulas durante la vida útil de ese producto».
Añadió que una vez que las aerolíneas regionales prueben la tecnología, intentaría convencer a Boeing y Airbus de que rediseñen sus aviones de pasillo único, una categoría que representa el 60% de las emisiones de la aviación mundial, para que sean propulsados por hidrógeno.
La startup fue fundada en 2020 por veteranos de la aviación ecológica, incluidos Paul Eremenko, John-Paul Clarke, Jon Gordon y Jason Chua.
Universal Hydrogen incluirá hidrógeno en aviones
Universal Hydrogen observa que la presión para frenar las emisiones de carbono favorecía al hidrógeno. “Existe la voluntad y la necesidad de comenzar a hablar del tema”, dijo Eremenko, exjefe de tecnología de Airbus. “Ya no se puede decir que en 2030 haré un híbrido y luego en 2050 haré algo más drástico. Si esperamos tanto tiempo, puede que sea demasiado tarde. Tenemos que movernos de una manera más agresiva”.
En su opinión, la falta de infraestructura y la falta de urgencia han obstaculizado el cambio. «Queremos volar lo antes posible con el avión más grande posible», adicionó el ejecutivo de Universal Hydrogen.
«Realmente necesitas la solución en la década de 2030, porque hay una larga cola para que la flota sea reemplazada. De modo que ese avión (de próxima generación) tiene que ser de hidrógeno si el sector de la aviación tiene algún interés en cumplir los objetivos del Acuerdo de París», añadió.
Airbus ya ha expresado sus planes de desarrollar aviones de hidrógeno líquido para 2035, pero Boeing no está convencido. Su director, David Calhoun, descartó la idea como una solución a mediano plazo.
Boeing, que realizó el primer vuelo con tripulación del mundo usando celdas de combustible en un avión de dos asientos en 2008, describió el hidrógeno como un «potencial». Pero confió que había demasiados requisitos regulatorios y faltaba la infraestructura global necesaria para escalar.
Características de uso y equipamiento
El hidrógeno verde para el vuelo se suministrará utilizando las cápsulas de combustible modulares de Universal Hydrogen. Este mecanismo permite su entrega directamente a la aeronave utilizando la red de carga existente y el equipo de manipulación de cargas del aeropuerto, sin necesidad de nueva infraestructura.
La tecnología patentada de cápsula modular es significativamente más liviana que el estado actual de la técnica en almacenamiento de hidrógeno. Está diseñada a partir de los principios para la certificación de seguridad de transporte aéreo y terrestre.
La compañía anticipa la entrada en servicio comercial en 2025 con un kit de conversión de modernización certificado para los aviones regionales existentes ATR 72 y De Havilland Canada Dash-8. Y una oferta de servicios de combustible de hidrógeno ecológico. Juntos, proporcionarán a los operadores regionales una economía unitaria que sea equivalente o mejor que la de las variantes convencionales de la aeronave impulsadas por combustible para aviones.
Universal Hydrogen ha asegurado una importante cartera de pedidos comerciales, que incluye LOI previamente anunciadas de Icelandair, Air Nostrum, Ravn Alaska y ASL Aviation Holdings.
La empresa espera contar con otro gran centro aeronáutico mundial como Toulouse, en Francia, además de su primera base en Los Ángeles.
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