La Unión Europea tiene una nueva herramienta para proteger los derechos humanos. Ahora cuenta con un poderoso régimen global de sanciones de derechos humanos. Una respuesta a las graves violaciones y abusos que están ocurriendo en muchas partes del mundo.
Son delitos que, con demasiada frecuencia, no tienen consecuencias para los perpetradores. El Consejo de Asuntos Exteriores ha adoptado el nuevo régimen global de sanciones en materia de derechos humanos que que permitirá aumentar la defensa.
El alto representante Josep Borrell fue enfático sobre el objetivo de este nuevo régimen. Esperan ganar más flexibilidad para perseguir a los violadores y abusadores de los derechos humanos, sin importar dónde se encuentren. Será una herramienta con la que esperan proceder con más rapidez y eficiencia.
El nuevo régimen de sanciones globales
El régimen es el primer resultado concreto del Plan de acción de la UE sobre derechos humanos y democracia adoptado hace menos de un mes. Le permitirá a la UE enfocarse en las violaciones y abusos graves en todo el mundo. Independientemente de dónde ocurran.
El régimen cubre genocidio, crímenes contra la humanidad, tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, esclavitud; ejecuciones y asesinatos extrajudiciales, sumarios o arbitrarios. Las sanciones consisten en prohibición de viajar a las personas incluidas en la lista, congelación de activos para personas o entidades que cotizan en bolsa, prohibición de poner fondos o recursos económicos a disposición de las personas y entidades
Se apuntará a las personas y entidades responsables o involucradas en violaciones o abusos graves de derechos humanos en todo el mundo. También puede señalar a las personas y entedidas asociadas con los perpetradores, a actores estatales o no estatales, independientemente de si cometen violaciones y abusos en su propio estado o más allá de las fronteras.
Acciones en defensa de los derechos humanos
La Unión Europea dispone de un conjunto de herramientas para abordar las violaciones y abusos de los derechos humanos. Esto incluye el diálogo político, asociaciones multilaterales, pero también sanciones.
Actualmente, la UE ha incluido más de 200 personas y entidades por violaciones o abusos de derechos humanos en sus regímenes de sanciones geográficas existentes. Algo que ahora se podrá aplicar con la nueva herramienta global de sanciones.
La Ley Magnitsky
La nueva norma de la UE está basada en la Ley Magnitsky de Estados Unidos. Llamada así en homenaje a un abogado ruso encarcelado, torturado y asesinado en 2009 por investigar una trama de corrupción rusa.
El activista estadounidense Bill Browder habla del paso histórico para Europa, pero critica que la «unanimidad» ralentiza la implantación de nuevas leyes. Señala además que es un problema que no incluya la cleptocracia y solo se limite al abuso de los derechos humanos. Tomando en cuenta que la cleptocracia y el abuso van de la mano. Pero celebra lo logrado y espera que esta ley europea se actualice para incluir la corrupción.
Relaciones inestables
Stef Blok, ministro de Exteriores de Países Bajos y promotor de este mecanismo, no teme que su uso traiga dolores de cabeza en las relaciones con los países de origen de los destinatarios de las sanciones. «Si aplicas sanciones a alguien, es porque algo terrible ha ocurrido», puntualizó. Afirma que es normal que la gente involucrada reaccione de forma negativa, sin embargo, al tomar distancia de las sanciones se acepta que los derechos humanos sean violados, algo que no tolerará la UE.
Algunos nombres que podrían estar a la cabeza de esa lista son los funcionarios saudíes involucrados en el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en 2018. O los birmanos acusados de la persecución de la minoría rohinyá, que están en listas del Reino Unido y Estados Unidos, como algunos oficiales de China acusados de perseguir a musulmanes uigures.
Blok apunta que, desafortunadamente, la violencia contra los periodistas es uno de los asuntos que deberá ser una razón para aplicar sanciones. Sobre todo porque en el contexto de la pandemia de la COVID-19, varios regímenes autocráticos han visto motivos para usar la presión o la violencia contra los periodistas que cubren acontecimientos negativos.
La situación de los derechos humanos en el mundo
Aunque el 10 de diciembre de 1948 se proclamó en París la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en más de 100 Estados y territorios de todo el mundo siguen violando la prohibición de la tortura. Niegan la libertad de expresión y religión, o la igualdad de derechos para hombres y mujeres, de acuerdo con Human Rights Watch.
El panorama mundial es bastante sombrío, en términos generales, pues siempre hay países que van en la dirección equivocada. Cada semana, la organización internacional advierte sobre la situación de quienes viven en zonas de guerra como Yemen, Siria y Libia. Todavía más de medio millón de perseguidos de la ernia rohinyá sobreviven en el campo de refugiados más grande del mundo, en Bangladesh, sin saber lo que les deparará el futuro.
En Egipto, Hong Kong o Irán, las fuerzas de seguridad siguen optando por reprimir a manifestantes. Y no solo es en Estados con conflictos o bajo gobernantes autocráticos donde están ocurriendo estas violaciones de derechos humanos.
Lea también: