Cambiemos es un movimiento educativo, participativo y dinámico que permite desarrollar e implementar los cambios necesarios para el crecimiento y desarrollo de la nueva humanidad y la construcción del nuevo mundo. Cambiemos es el espacio de encuentro para el intercambio de ideas, la promoción de enseñanzas y el crecimiento participativo, para la creación y desarrollo de la nueva humanidad

Lo que vamos a hacer es bellísimo… Bienvenidos todos al lanzamiento del primer capítulo del programa de TV digital Cambiemos. Es un inmenso honor y privilegio contar con cada uno de vosotros. Qué lujazo de grupo. Además, quiero agradecerle especialmente a Pilar Mateo, Mario Alonso Puig y Juan Carlos del Olmo. ¡Qué gigantes! ¡Qué privilegio!

Espero que el aplauso haya servido para mover y subir la energía, que es uno de los objetivos del programa, más aún cuando toda creación empieza desde una fuerte vibración de energía positiva. Y, efectivamente, hoy estamos creando también el movimiento social Cambiemos, cuya finalidad es la gestación y desarrollo de una nueva humanidad que sea capaz de construir ese nuevo y mejor mundo.

En cuanto a esa nueva humanidad, me atrevería a afirmar que todos los aquí presentes y la mayoría de los que nos estáis viendo sentimos que el proceso de formación ya ha empezado y que vamos a vivir una profunda y necesaria transformación.

Tiempos muy emocionantes. Es una gran ola. Un extraordinario movimiento de interconexión del consciente y del subconsciente de muchísimas personas en todo el mundo. La humanidad está en un nuevo despertar y está evolucionando aceleradamente para poder acceder a otro plano de entendimiento y a otra dimensión vibratoria.

CAMBIEMOS ES LA GESTACIÓN Y DESARROLLO DE UNA NUEVA HUMANIDAD CAPAZ DE CONSTRUIR ESE NUEVO Y MEJOR MUNDO

Pero esa nueva humanidad solo la podremos construir si todos juntos aprendemos a superar nuestras propias limitaciones –prejuicios, creencias y paradigmas– y nos convencemos de que el cambio que necesitamos empieza por nosotros mismos, en nuestra capacidad para evolucionar y reinventarnos, con el objetivo de dejar atrás una manera caduca de vivir, y cambiar algunos aspectos claves que no funcionan, como la desigualdad, la conflictividad, las divisiones, los extremos y la emergencia climática, por mencionar algunos.

Con la pandemia global que estamos viviendo por primera vez en la historia, el planeta entero siente y vibra de la misma manera. Independientemente de nuestra raza, ubicación geográfica o clase social, todos los ciudadanos estamos vibrando y sintiendo lo mismo.

Debería ser el punto de inflexión para acelerar el desarrollo de esa nueva humanidad cuya principal característica tiene que ser una profunda conexión con la fuente primaria –que en mi caso es Dios– para poder acceder a otras características adicionales importantes como una conciencia aguda y elevada, un ego sano, solidario, de generación de amor y una mejor conexión con los demás seres vivos y con la naturaleza.

Queremos desarrollar en Cambiemos estas materias como una herramienta de intercambio de ideas, de promoción de enseñanzas y de crecimiento participativo. La idea es que lo hagamos juntos. La finalidad última del movimiento Cambiemos es que todos arribemos al mismo destino: un mejor o nuevo mundo, más humano, justo y regenerativo.

Yo quisiera cerrar con lo que siento. Un profundo sentimiento de agradecimiento con todos los aquí presentes y los no presentes que han hecho posible el lanzamiento de Cambiemos, desde donde queremos servir y ayudar a las personas a formar parte de esa nueva humanidad que va a construir el mejor o nuevo mundo.

Uno de los primeros mensajes que os quiero dejar, ya que el programa va de intercambio de ideas, es que la mejor forma de recibir lo que deseamos, aparte de trabajar para ello, es viviendo en un estado constante de agradecimiento. El agradecimiento como energía ayuda tremendamente a desbloquear los canales para la obtención de nuestros sueños. Así sea por estar vivos, que ya es mucho en estos días. Pero de seguro tenemos muchos más motivos para estar agradecidos…

MARIO ALONSO PUIG: Dejarse sorprender por la vida

Médico y coach de desarrollo personal. Especialista en gestión del estrés y autoayuda

JORGE NERI: Voy a darle la palabra a Mario Alonso Puig, un gigante en el desarrollo humano. No concibo a una persona más apropiada y justa para que nos hable de cómo deben ser las características generales del programa para desarrollar una nueva humanidad.

Cuando uno se pregunta qué mundo nos vamos a encontrar, me parece que es hacer poca justicia al poder creativo del ser humano. Creo que la pregunta es ¿qué mundo estamos dispuestos a crear? Pues bien, esa creación solo puede salir de la unión. Esta pregunta sigue siendo la gran incógnita de la humanidad desde hace 2.500 años, cuando se formuló en el oráculo de Delfos: Conócete a ti mismo.

La primera llamada es para reconectar, que significa volver a conectar con nosotros mismos. No desde el juicio, sino desde el interés verdadero para entender nuestro auténtico linaje. Somos hijos de las estrellas y el día que lo entendamos seremos mucho más felices. En el momento en que empezamos a reconectar, reconectamos con los demás porque al final somos uno.

Es decir, una persona puede tener una forma diferente de pensar en política, puede tener una religión o no tenerla, una cultura o no… No pueden ser estos motivos u otros muchos la razón de que los seres humanos generemos estos muros, estas barreras gélidas que hacen que nos enjuiciemos y que nos ataquemos.

Llega un momento en que te das cuenta de que no estás tú aquí y la naturaleza ahí. Se pierden las barreras y, de alguna manera, te sientes parte de la naturaleza. Es una experiencia muy profunda, sumamente bonita. Y eso te lleva a respetar, precisamente porque uno no respeta lo que utiliza, sino lo que admira.

Con la naturaleza no se trata de utilizarla, sino de admirarla y la naturaleza es buena con el ser humano cuando se siente respetada. Todo lo que implique estar juntos, todo lo que implique unir aquello que, por ciertas razones en algún momento, no sabemos por qué, se separó. Es algo que nos alumbra la posibilidad de un mundo en el que habrá más salud –no hay que olvidar que muchas enfermedades son causadas por disfuncionalidades emocionales– y más prosperidad.

Un mundo en el que tengamos conexiones mucho más profundas, porque una cosa es el intercambio de información y otra la conexión. Este mundo tiene mucha información, pero adolece de una conexión profunda y el ser humano tiene anhelo de conectar a ese nivel hondo. Según algunos estudios, la sensación que tienen muchas personas, a pesar del desarrollo tecnológico y científico, no es de que estén mejor que antes, no da la sensación de que estos criterios hayan contribuido a mejorar, que el clima interior sea un clima en general soleado.

Da la sensación, y no hablo de este momento coyuntural de la pandemia, de que hay algo muy revuelto en nuestro interior. Y luego la experiencia de la felicidad, que es algo muy distinto del bienestar subjetivo, que es el goce de los sentidos. La felicidad es el gozo del corazón. Algo que emerge de la unión. Yo puedo tener bienestar subjetivo pensando solo en mí, pero la felicidad no es algo que pueda yo tener, está en la dimensión del ser. Es algo que emerge, y emerge cuando yo trasciendo el ego y me encuentro con la otra persona y emerge algo que es nuevo: la felicidad.

La felicidad es paz interior inamovible, la ecuanimidad de la que hablaban los griegos clásicos; es alegría, el gozo del corazón, sabiduría, compasión, unidad. A medida que desarrollamos esa mirada profunda, la verdad que contemplamos es una verdad más amplia y en ella cabemos todos. Creo que eso es a lo que podemos tender.

No es un sueño utópico, no es una cosa de locos, sino una realidad, pero una realidad que está en otro paradigma, otra forma de ver. Tenemos que abrirnos humildemente para trascender el mundo de juicios que nos tiene tan atrapados y recuperar esa capacidad de asombro propia del niño. Dejarse sorprender por la vida. Cuando te dejas sorprender, la vida te transmite un mensaje. A la vida solo le interesa que tú avances en tu camino a la plenitud. Aquello que sea avanzar juntos por el bien de todos me parece que es precioso. Aquí no se trata de ir en contra de nadie, sino a favor de algo.

PILAR MATEO: Piensa como una montaña

Científica y emprendedora. Especialista internacional en el control de vectores que transmiten enfermedades endémicas

Lo primero es que hay que cambiar los arquetipos. Hasta ahora, el papel de la mujer ha sido de sumisión y esto hay que cambiarlo, sobre todo a través de la educación, y además creérselo. No es lo mismo, por ejemplo, que yo cuente mi historia en el mundo indígena a que la cuente aquí. Evidentemente, he tenido educación, me he formado, he estudiado, soy doctora en Químicas, soy inventora y, además, he tenido la oportunidad de viajar. Pero luego te encuentras con un mundo en el que no existe ninguna posibilidad. Todo lo que ha ocurrido con el coronavirus evidencia que el mundo es global y que los problemas son globales.

También el mundo de la mujer tiene que ser global. Estos arquetipos se tienen que cambiar desde el mundo en el que estamos viviendo. No podemos pensar en un mundo igualitario desde aquí frente a lo que están viviendo millones de mujeres en el mundo sin ninguna posibilidad de salir adelante, simplemente porque no han tenido la opción ni siquiera de formarse. La educación es fundamental.

La mujer tiene una forma más empática de ver las cosas que tiene que ver con el acercamiento de los sentimientos. Muchas de las mujeres que hemos sido inventoras hemos actuado siempre desde el conocimiento de la realidad: hay un problema y, por lo tanto, es preciso buscar una solución.

Yo desarrollé una tecnología, ciertamente sofisticada, que se llama de microencapsulación polimérica, donde era capaz de liberar poco a poco los biocidas, productos para combatir insectos que nos molestaban en el primer mundo. Entonces vinieron a buscarme para hablarme de una enfermedad que es el mal de Chagas. Me dijeron que posiblemente mi tecnología podría servir para combatir la enfermedad que transmite el chipo.

Entonces, pensé: “Esto lo soluciono en un mes”. Lo que no me dijeron es que desde el aeropuerto hasta la zona adonde iba a residir en el Chaco boliviano –unos 200 kilómetros– no había carreteras, ni un chiringuito ni cuartos de baño… No había absolutamente nada. Tardé en llegar unas 19 horas. Cuando por fin llegué, sobre las tres de la madrugada, me dijeron que a las cinco de la mañana había que levantarse porque había que ir a la primera comunidad que estaba a 20 kilómetros. En la selva. Allí me encontré con la situación de una mujer, con dos o tres niños –había tenido más, pero habían fallecido de muerte súbita– y lo peor es que no había paredes, solo palos. ¡Yo había inventado una pintura y no tenía paredes para pintar!

Esa empatía y capacidad de acercamiento que tenemos las mujeres para ver la situación de otras mujeres me sirvió para afrontar esta realidad. Empecé a ver que había que hacer viviendas y me planteé qué habría hecho si hubiese sido química en la prehistoria. Encontré una planta que tenía mucha resina, la corté en pedacitos y la mezclé con heces de burro y de vaca, lo mezclaba todo con barro y elaboraba un adobe compacto para luego pintar. Y empecé también a hablar con las mujeres y a darme cuenta de que no sabían hacer nada, no habían tenido ninguna posibilidad.

Regresé en 2006. Estuve casi siete años viviendo en el Chaco con los indígenas guaraníes y creé el Movimiento de Mujeres Indígenas. Al final, creo que es muy importante que no podemos pensar en un mundo maravilloso, espectacular para las mujeres, sabiendo que hay mucha diferencia y que hay que aportar el conocimiento.

Desde mi perspectiva, parecía fácil hacer la primera manifestación de mujeres. Para mí era algo sencillo, pero allí nunca lo habían visto. Por lo tanto, entiendo que es muy importante que esto que ha pasado ahora con el coronavirus y que ha puesto en evidencia que las enfermedades son globales, que los problemas son globales, también lo tenemos que ver con el tema de las mujeres.

Hay que cambiar los arquetipos y empezar a ver a la mujer de igual a igual y poner el conocimiento en acción. El movimiento Cambiemos es muy importante. Cada uno de nosotros tenemos que cambiar para que las cosas funcionen. Las personas jugamos dos roles: uno que es individual y otro que es el colectivo. Precisamente, en esta pandemia hemos visto lo importante que es el rol colectivo. En cuanto al movimiento Cambiemos, me gustaría que fuésemos una sociedad que fuéramos montañas, como decía el filósofo noruego Arne Naess (fundador de la ecología profunda: “Piensa como una montaña”).

Su pensamiento enlaza con la historia del guarda forestal de Estados Unidos –Aldo Leopold, uno de los pensadores conservacionistas más influyentes– que era un cazador y se fue tras un lobo y lo cazó. Cuando estuvo cerca y le vio los ojos dijo: tú eres de la naturaleza. No hay que ver el mundo de una forma individual, sino ser montañas, trabajar para el colectivo. Lo que estamos viviendo ahora demuestra que el colectivo es muy importante. Así, Cambiemos tiene que ser una montaña de conocimiento, de ilusiones y de pasión.

JUAN CARLOS DEL OLMO: La naturaleza te devuelve el golpe

Secretario General de WWF España

El trípode formado por la ciencia, los medios de comunicación y las organizaciones sociales constituye la base sobre la que se está articulando gran parte del cambio que se está produciendo en el mundo. La humanidad tiene que reconocer el momento en el que estamos y tiene muchos desafíos.

A nosotros nos preocupa especialmente el desafío medioambiental, la destrucción de la naturaleza y de la biodiversidad, un proceso en el que el cambio climático es solo una cara de la misma moneda. Y esto se está produciendo a una velocidad muy acelerada. Todos los indicadores nos dicen que vamos en la dirección equivocada, que tenemos que cambiar.

El reto es grande. Si miramos lo que está pasando con el clima, tan solo hace unos días la Agencia Española de Meteorología señalaba que España está en la sartén, en el epicentro del cambio climático. Apuntaba que se está calentando más rápido que otros países y que todo esto tendrá una implicación muy grande en la economía y en la salud de las personas, entre otros ámbitos.

Cuando empezó la Revolución industrial en la atmósfera había 240 partes por millón de CO₂. Ahora hay 420 partes por millón. Hace 3 millones de años que no había esa concentración de CO₂. Si analizamos lo que está pasando con la biodiversidad, el ritmo de extinción es entre 100 y 1.000 veces más rápido. Vivimos la sexta extinción. En cierto modo, nos estamos quedando solos en el planeta. No únicamente los grandes mamíferos, sino también los insectos.

EL PLANETA ESTÁ CREANDO SU SISTEMA INMUNITARIO, EL SER HUMANO ORGANIZADO

Hoy viajas por Europa en coche y no encuentras insectos en el parabrisas. Se está produciendo una hecatombe de los insectos, es decir, de la biodiversidad de base. No hay que olvidar que son los que polinizan el 80% de nuestros cultivos. Si nos referimos a los océanos, el nivel de acidificación que tenemos no es el de hace 300 millones de años. Vamos en una dirección equivocada. Tenemos que cambiar.

Si algo nos ha enseñado la crisis del coronavirus es que todo está interrelacionado en la naturaleza, que nosotros somos parte de la naturaleza, que el 70% de las enfermedades en este momento son zoonóticas, provienen de animales y, generalmente, de la alteración de la naturaleza. Con todo esto tendremos que convivir en el futuro. También hemos aprendido que la naturaleza te devuelve el golpe; que cuando se alteran los ecosistemas, los bosques, se trafica con especies… la naturaleza te acaba devolviendo el golpe.

Para afrontar un desafío así no estamos preparados como especie: no tenemos los mecanismos ni la gobernanza, actuamos de una forma descoordinada, con egoísmo y con división. Por delante tenemos amenazas y desafíos como los que estamos desgranando que son de una envergadura mayor que la pandemia.

Esta pandemia también nos ha enseñado que hay una oportunidad de reinventarse. Desde Cambio16 se ha venido apoyando lo que en Europa se conoce como green recovery, una alianza de empresas, de gobiernos, de ciudadanos que propone ir en otra dirección. Utilizar la red de construcción no para reconstruir, sino para transformar. Y que ese cambio nos lleve hacia las energías renovables, hacia una alimentación más sana, hacia muchas cosas que ya están ocurriendo.

Evidentemente, tenemos que lograr que cambien los gobiernos y esto sucede cuando la sociedad ejerce presión, presión constructiva, y continua, constante. Tenemos que lograr que las empresas cambien. Tiene un papel fundamental en esta transformación. Y tienen que cambiar su modelo empresarial hacia uno sostenible. No pueden seguir siendo herramientas enclavadas en un mercado.

Y luego estamos los individuos. Tenemos que cambiar de muchas maneras. Incluido nuestros valores. No podemos seguir pensando que lo que nos hará feliz es consumir más y tener más, cuando el problema del cambio climático es el exceso de consumo.

La parte positiva de lo que está ocurriendo, y no lo digo por poner paños calientes a la situación –en ese sentido el movimiento social Cambiemos puede contribuir– es que en todo el mundo hay gente organizada. El propio planeta está creando su sistema inmunitario, el propio ser humano organizado en colectivos que trabajan en la dirección correcta y que empiezan a interconectarse. Todo ese movimiento es la gran esperanza y Cambiemos es una herramienta más que tiene mucho que sumar en ese camino.

El poder de construir el futuro

Compromiso individual y colectivo para asumir los grandes retos que afronta la humanidad y empezar a transformar el mundo.

El cambio tiene que empezar por cada uno

MARIO ALONSO PUIG

No se trata solo de querer, sino de querer hacer. Hay mucha gente que quiere, pero no quiere hacer. Ese querer hacer es un querer enfocado en la acción y esto es lo que marca la diferencia. Creo que vivimos un momento en el que nos tenemos que enfocar no en evitar lo que no queremos, sino en buscar lo que queremos, que es una energía radicalmente distinta. Saber que la imaginación que el ser humano posee tiene la capacidad real de crear y que la separación entre el mundo interior y el mundo exterior es una pura ficción.

Lo que pasa dentro de mí inevitablemente tiene un impacto fuera. Por eso, el cambio tiene que empezar por cada uno. Ver menos el fallo de los demás y enfocarse a las cosas que tiene cada uno que mejorar, pero hacerlo sin juicios, sin vergüenza, sino sencillamente con la curiosidad de aquella persona que quiere conocerse, comprenderse y superarse.

Conocimiento y unidad de acción

PILAR MATEO

Lo que es más importante es empezar a ver el mundo de una forma global. El gran problema es que esto es un maratón individual, de cada persona. Durante muchos años ha habido un maratón de los hombres en el mundo del capitalismo para ver quién tenía más dinero y había una enorme competencia.

El mundo está cambiando, pero se observa una gran descoordinación. Se ve, por ejemplo, en el ámbito de la zoonosis y de los virus. Los virus estaban llamando a la puerta y los han dejado entrar por falta de conocimiento. Cada uno hemos ido por nuestro lado. Por ello, es importante cambiar las cosas con conocimiento y estando juntos. También observamos que los organismos internacionales están descoordinados. ¿Para qué sirve Naciones Unidas sin siguen las guerras? ¿De qué sirve acabar con la malaria en África si hay un problema agrícola que no se ha solucionado? La pandemia nos ha abierto los ojos para ver lo que está pasando en otras partes. Hay que buscar soluciones y ponernos a trabajar todos juntos para establecer condiciones globales que cumplamos todos.

Todos tenemos un papel

JUAN CARLOS DEL OLMO

La ciencia es clara. Tenemos el conocimiento, tenemos la tecnología y sabemos lo que hay que hacer y todos tenemos un papel: lo tenemos como consumidores, como ciudadanos y lo tenemos incluso como votantes a la hora de elegir a los que se comprometan más con esta causa. Hay que animar a todo el mundo a unirse, a trabajar juntos, a crear alianzas entre diferentes sectores para compartir y sumar, que es muy importante en este momento.

La conquista de un sueño

NACHO DEAN

Naturalista. Explorador y divulgador

Es un privilegio poder participar en este movimiento tan necesario que es la unión de personas, de grupos y de colectivos para sumar fuerzas y apostar por un nuevo mundo y una nueva realidad. Yo soy naturalista, explorador profesional y divulgador.

Tomé la decisión en 2013 de lanzarme a la conquista de un sueño –creo que es un milagro estar vivos– y este sueño fue dar la vuelta al mundo caminando. Más allá del sueño personal, como amante de la naturaleza y el medio ambiente, sentí la necesidad de dedicar esta expedición a documentar el cambio climático y lanzar un mensaje de conservación de la naturaleza del planeta, que al fin y al cabo es la casa donde vivimos todos.

Tres años más tarde, en 2016, había dado la vuelta al mundo caminado, pero tenía una deuda pendiente con el mar, con los océanos. Así que me embarqué en una nueva expedición que me llevó a unir nadando los cinco continentes para lanzar un mensaje de conservación de los océanos. Lo que más me costó fue dar ese primer paso: tomar la decisión, pero el día que lo das tienes la sensación de que hay como un master plan (plan maestro), que todo está esperándote desde siempre.

Hay una palabra, un concepto que me gusta mucho que es el de sincronía, que es cuando tus sentimientos, tus ideas y tus actos se alinean. En ese sentido, soy una persona que se considera afortunada de haber descubierto para qué está en el mundo y ese propósito de conservación del planeta, la pasión por la exploración. Todos somos exploradores, como los niños, tenemos en nuestro ADN ese gen de aventurero, de explorador. Es interesante mantener esa capacidad de sorprenderte en la vida. A veces estamos limitados por nuestras creencias, pero hay que ser cautos porque esas creencias nos pueden limitar. La realidad puede ser de muchas maneras diferentes.

Esa es la esencia que se respira en el movimiento Cambiemos y algo que he aprendido a lo largo de mis expediciones: tenemos el poder de crear la realidad, de construir el futuro, de escribir la historia, de escribir las páginas en blanco que tenemos por delante en el libro de nuestra vida y que no hay frontera más infranqueable que la que nos impide creer en algo. Aquí estamos unidos todos por la firme convicción y la creencia de que un nuevo mundo, una nueva sociedad, una nueva realidad no solo es posible, sino que es necesaria. Hay que sumar fuerzas por esta nueva realidad.

Orientar el cambio

GUSTAVO BERTOLOTTO

Formación en PNL y coaching a través del Instituto Potencial Humano

Cambiar, cambiamos todos los días, en cada instante, en cada momento estamos cambiando. La cuestión es orientar adecuadamente el cambio. Y para eso sí se necesita un cambio de creencias, un cambio de valores porque si seguimos manteniendo los valores y creencias que hemos venido arrastrando vamos directos al precipicio. La clave es ser capaz de cambiar esas creencias y valores desde las cuales actuamos y desde las que podemos actuar tanto personalmente como grupalmente.

En estos momentos que hemos vivido, creo que por primera vez en la historia, una manera de conectarnos todos los seres humanos en la Tierra, y sabemos la importancia de esa conexión, creo que el movimiento Cambiemos es esencial para ayudarnos en la transformación necesaria e imprescindible. Es preciso apoyar con todas nuestras fuerzas todo este cambio posible.

Cambiar desde dentro y cambiar juntos

TECHU ARRANZ

Socia directora del Instituto Potencial Humano. Formación en PNL, coaching y liderazgo femenino

Necesitamos estos grupos que, como el movimiento Cambiemos, nos recuerdan lo esencial cada día y que instauren en nosotros esa llama viva que nos haga cambiar en cada momento. Yo estoy completamente comprometida en cambiar yo porque si no cambio yo, no tengo la fuerza para pedir a otros cambiar. Esto es una cuestión tan urgente que todo lo que podamos cambiar en cada instante va a marcar el rumbo del resto de nuestras vidas. Ojalá todos nos pongamos manos a la obra y corazón a la obra para cambiar desde dentro y cambiar juntos.

Convivir íntimamente con la tecnología

ANDRÉS VALLÉS

Director de Innovación y Estrategia en Inspiralia

Me gustaría hacer una reflexión sobre el papel de la tecnología en esta nueva humanidad. Convivimos con la tecnología desde el origen de la humanidad: la rueda, la brújula, la im-prenta, la máquina de vapor, la computadora, internet…

La reflexión para la nueva humanidad es que conviviremos en una relación más íntima con la tecnología. Hablamos de inteligencia artificial, realidad aumentada, robótica, automatización. Veremos también nuevos procesos de generación energética, producción de nuevos alimentos como las algas, mayor eficiencia en los terrenos hábiles para cultivar (cada vez hay menos terreno disponible para el cultivo) y por supuesto veremos muchas innovaciones en el área de la salud, sobre todo en la detección precoz de enfermedades como el cáncer (ya con una biopsia líquida se puede saber si de aquí a diez años vamos a tener un cáncer de colon o no) y tenderemos asimismo hacia una medicina personalizada.

Además, se están haciendo ya investigaciones con nanorobots en seres vivos, en ratones, para combatir la diabetes tipo uno. En definitiva, vamos a convivir de cerca, muy íntimamente, con la tecnología en esa nueva humanidad. Dependerá de nosotros la dirección que queramos darle a esa tecnología para mejorar nuestra relación con el entorno y con nosotros mismos.

Cuida tu cuerpo y tu planeta

THERESA ZABELL

Doble campeona olímpica en vela. Creadora de la Fundación Ecomar

Aprendí muy pronto en la vida que los sueños hay que perseguirlos porque se pueden conseguir. Con 11 años soñé con ir a los Juegos Olímpicos, en una época en la que las mujeres no participaban en la competición, y logré mi meta por partida doble. Me considero una persona muy afortunada. Como mi deporte es la vela y estaba todo el día en el mar, cuando me retiré me planteé que tenía que hacer algo para devolverle a la sociedad lo mucho que había recibido de ella. Entonces creé la Fundación Ecomar y llevamos ya 22 años trabajando por un planeta mejor.

Nuestro lema es cuida de los dos únicos sitios de donde no te podrás mudar jamás, tu cuerpo y tu planeta. Al final, no nos va a servir de nada salvar el planeta si no nos salvamos nosotros y tampoco servirá de nada salvarnos nosotros si no salvamos el planeta. Trabajamos sobre todo con niños porque si quieres cambiar la forma de pensar y de actuar de una sociedad es importante recurrir a las personas que tienen una edad receptiva.

Trabajamos normalmente –cuando no hay situaciones como la actual pandemia– con unos 15.000 niños cada año organizando actividades, lo más prácticas y divertidas posible para que ellos entiendan la importancia de cuidar nuestro planeta y nuestros mares, de tener unos mares y unas playas limpias. Fundamentalmente nos centramos en enseñarles cómo hacerlo porque muchas veces nos hemos encontrado, con adultos también, que todos queremos ir en una dirección, pero no sabemos exactamente dónde está el camino que nos lleva. Procuramos concienciar, educar y enseñar en valores de solidaridad –un niño solidario será un adulto solidario–, en la vida sana y también en el deporte que, teniendo en cuenta mi background, no podía faltar. Intentamos que todos cambiemos a mejor: ¡caminemos juntos en este cambio!

Una gran oportunidad para el cambio

ROCÍO PRIMO DE RIVERA

Escritora y periodista

Es un auténtico lujo poder participar en la fundación del movimiento social Cambiemos, con gente de tan distinta procedencia compartiendo el mismo espíritu y trabajando por el mismo objetivo. Siempre he escuchado a mi padre decir que el ministerio más importante es el de Agricultura. España es campo. Tenemos la suerte de tener un país riquísimo. Ahora que se habla tanto de la España vaciada, creo que el movimiento Cambiemos es una oportunidad maravillosa para poder actuar, de la mano de la tecnología, por supuesto. Asimismo, con la pandemia, mucha gente no ha tenido la suerte de tener una casa con ventanas durante el confinamiento y esto ha impulsado una fuerte migración hacia los pueblos, hacia el campo.

También creo que es importante darle valor al español, a la lengua española pues se trata de la segunda lengua más hablada del mundo, que nos hace sentirnos a todos hermanos. Todos nos tenemos que reinventar, siempre en positivo y en consonancia con la naturaleza. El movimiento social Cambiemos nos brinda esta gran oportunidad.

En armonía con la tierra

CARLOS MORO

Viticultor y bodeguero

Es importante cambiar. Creo que estamos en completa y constante evolución y cambio. Lo importante es hacia dónde cambiamos. Los valores que se han reflejado aquí, en el movimiento Cambiemos, son muy positivos para cambiar hacia ellos. Yo vengo de la tierra y esto no es una figura retórica, vengo ahora mismo, desde el pueblo donde trabajamos. Estoy inmerso en el mundo del campo, de la agricultura, un ámbito donde existe la posibilidad de hacer cosas: generar trabajo, crear empleo, con un respeto máximo a la naturaleza, incluso utilizándola y aprovechando todo lo que nos ofrece.

Mi mundo es el de la viticultura, la enología, el vino, el aceite de oliva, pero también todo lo demás que hay alrededor de ello para producir, pero hacerlo de una forma sostenible. Nosotros impulsamos el primer proyecto integrado de desarrollo sostenible de una bodega en el mundo, es decir, que producimos más energía que la que se consume y reciclamos todo en distintos elementos de economías circulares.

En un libro reciente, publicado por Planeta, hablaba de lo que es la economía esférica, un concepto muy amplio que abarca desde los aspectos meramente conceptuales del hombre en la tierra, en armonía con la tierra. Y la tierra es el agua, es el aire, la naturaleza, el paisaje. Todo esto no es solo posible sino, además, mucho más satisfactorio. La economía esférica nos lleva a recordar lo que es la Tierra: en su conjunto es una esfera perfecta de equilibrio que hay que en su conjunto es una esfera perfecta de equilibrio que hay que cuidar para no romper ese equilibrio y paras aprovechar ese con cepto esférico en el desarrollo de la persona y de las personas, de la humanidad y de la igualdad, en todos los sentidos.

El concepto se basa en un conjunto de economías circulares ensambladas a través de una diversificación y desarrollo y, en su tercer eje, de forma sostenible y eficiente. Así debe ser la humanidad dentro de ese concepto esférico de la economía y de la tierra.

Cambio para progresar

CARLOS ESCARIO

Coaching. Emprendedor. Ejecutivo en Organizaciones Globales. Consultor de alta dirección. Fundador de Tacha Beauty

En el ámbito de la empresa, la pandemia ha evidenciado un dato curioso: hacia 1900, las empresas duraban 75 años; en el año 2000 eran 15 años, en el año 2015 eran siete y ahora, con la pandemia, hemos visto a abuelos de más de 80 años comprar por Amazon, pagar por PayPal, tener FaceTime con los bisnietos, es decir, se ha acelerado la velocidad de cambio y esto ha afectado a los negocios. Por ello, debemos incidir en que este cambio se traduzca en progreso para nosotros y nuestras organizaciones.

Cambiemos todos juntos

NATALIA DE LA VEGA

Fundadora y CEO de Tacha Beauty

El movimiento Cambiemos va a facilitar que cambiemos todos. Si algo hace bien el ser humano es la comunicación. Ahora, todos nosotros, los que impulsamos este movimiento, tenemos la obligación de salir ahí fuera y hablar de esto, hacer que cambiemos todos juntos.

Estos y otros contenidos están en la edición 2270 de Cambio16

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