Las fuentes más naturales y saludables de obtener vitaminas y minerales son los mercados, dicen algunos expertos. Las verduras, frutas y hortalizas poseen en abundancia todo el abecedario de vitaminas que requiere el organismo. Aunque deben complementarse con proteínas. Entonces, de ser así, ¿por qué tomar multivitamínicos a diario como lo hace uno de cada tres estadounidenses?
La verdad sobre este hábito popular puede ser difícil de digerir, dice Pieter Cohen. “La mayoría de las personas estarían mejor bebiendo un vaso lleno de agua y saltándose la vitamina”, afirma el profesor asociado de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard. E internista en Cambridge Health Alliance, afiliada a Harvard. Además de ahorrar dinero, señala, tendrás la satisfacción de no sucumbir a esquemas engañosos de marketing.
Esto se debe a que para el adulto estadounidense promedio, un multivitamínico diario no brinda ningún beneficio de salud significativo. Tal como lo señaló recientemente el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE UU (USPSTF). Su revisión, que analizó 84 estudios en los que participaron casi 700.000 personas, encontró poca o ninguna evidencia de que tomar suplementos de vitaminas y minerales ayude a prevenir enfermedades. Como el cáncer, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, y tampoco ayuda a prevenir una muerte prematura.
“Tenemos buena evidencia de que para la gran mayoría de las personas, tomar multivitaminas no lo ayudará”, sostiene Cohen.
Sin embargo, hay algunas excepciones. Las dietas altamente restrictivas y las condiciones gastrointestinales. O ciertas cirugías para bajar de peso que causan una mala absorción de nutrientes, son ejemplos de razones por las que se podría recomendar un multivitamínico o vitaminas varias. Puede ser necesario un suplemento diario de vitamina D cuando una persona recibe una exposición solar insuficiente. También de hierro si tiene un recuento bajo de glóbulos rojos (anemia).
Alta ingesta de multivitamínicos en EE UU
Un multivitamínico es un suplemento dietético que aporta vitaminas, minerales y otros elementos nutricionales. Generalmente se disponen en forma de cápsulas, pastillas, polvos o líquidos.
¿Por qué es difícil dejar el hábito de un multivitamínico diario en EE UU o en cualquier parte? Las encuestas sugieren que las personas toman vitaminas para mantenerse saludables, sentirse con más energía o ganar tranquilidad, según un editorial que acompañó la revisión del USPSTF. Estas creencias se derivan de una narrativa poderosa acerca de que las vitaminas son saludables y naturales que se remonta a casi un siglo.
“Este argumento sostenido atrae a muchos grupos de nuestra población. Incluidas las personas vegetarianas progresistas y también a los conservadores que desconfían de la ciencia. Y piensan que los médicos no traman nada bueno”, señala el experto en investigación y regulación de suplementos dietéticos a The Harvard Gazette.
Las vitaminas son muy baratas de fabricar, por lo que las empresas pueden invertir mucho dinero en publicidad, advierte Cohen. Pero debido a que la FDA regula los suplementos dietéticos como alimentos y no como medicamentos recetados o de venta libre, la agencia solo supervisa las afirmaciones sobre el tratamiento de enfermedades.
La FDA regula tanto los productos de suplementos dietéticos terminados como los ingredientes dietéticos. También regula los suplementos dietéticos bajo un conjunto diferente de regulaciones que las que cubren los alimentos y productos farmacéuticos «convencionales». Bajo la Ley de Educación y Salud de Suplementos Dietéticos de 1994.
Al extremo: enfermedades y dolencias por excesos de vitaminas
El envejecimiento de la población es otra de las principales causas para consumir este tipo de suplementos. Una de las razones por las que en EE UU domina este mercado de multivitamínicos es por la longevidad de sus habitantes. En ese país 35 millones de personas (representa el 12,4% de la población) tienen más de 65 años. Y 9,3 millones de personas (3,3%) más de 80. Es decir, un alto porcentaje de la población está envejecida, según datos facilitados por el Banco Mundial.
Al margen, un hecho que preocupa a los médicos, es la autoadministración de esas vitaminas. Cada vez más personas consumen estos suplementos sin recomendación de un médico o nutricionista. Entonces se incurre en la hipersuplementación. Un problema actual de la sociedad que desea estar saludable y pueden conseguir lo contrario.
Existen complicaciones asociadas al exceso de vitaminas y minerales.
Por ejemplo, el consumo excesivo de calcio puede causar estreñimiento, interferir en la absorción de hierro y zinc y aumentar el riesgo de cálculos renales. También el consumo excesivo de hierro puede causar malestar gastrointestinal, reducir la absorción de zinc e incluso en casos más extremos fallo multiorgánico, estado de coma, convulsiones y muerte.
En el caso del ácido fólico puede encubrir el déficit de B12 y podría aumentar el riesgo de cáncer colorrectal. Mientras que el consumo excesivo de vitamina D puede generar toxicidad, confusión y problemas en el ritmo cardíaco, entre otros problemas generados por excesos de vitaminas.
Otro problema que puede ser importante es el consumo de edulcorantes y colorantes asociados a suplementos. Especialmente en el caso de suspensiones o efervescentes. Suelen contener edulcorantes y hay gente sensible a ellos que desarrolla dolor abdominal, estreñimiento y diarrea.