Por: Cambio 16
31/01/2017
Uno de los centros de buceo mas importantes del mundo ha inaugurado un servicio de restaurante bajo el agua donde una pareja puede disfrutar de una experiencia distinta.
En el NEMO 33 de Bruselas, Bélgica, los comensales bajan a una cápsula presurizada cuyo interior está equipada con una mesa, música, temperatura ideal y oxígeno, que es lo más importante.
Para llegar hay que sumergirse cinco metros con equipos de buceo, pero una vez adentro los clientes se los retiran y un grupo de mesoneros buzos se encargarán de servir la comida y la bebida en cajas especiales.
«La perla» es el nombre de la capsula de dos metros de diámetro que está atada en el fondo de una de las piscinas del complejo. Los platos van desde Foie hasta ensalada de langosta, y champán para los que lo deseen.
«Estamos lanzando una nueva era de los restaurantes», dijo John Beernaerts, que fundó la piscina NEMO 33 en la capital belga hace una década.
El restaurante, donde una comida bajo el agua cuesta 99 euros ($ 106) por persona, tomó más de un año para construir y fueron necesarios varios intentos para perfeccionar el sistema de diseño, la mecánica y la entrega de alimentos.
«Fue una experiencia maravillosa», dijo Nicolas Mouchart de 41 años a Reuters, quien con su esposa Florencia, disfrutaron de una cena diferente.
«Fue la primera vez en nuestra vida que nos tomamos algo bajo el agua, fue muy divertido. Es una cena única y vamos a recordar esto toda nuestra vida.», dijo el cliente de 41 años.