Por Cambio16
Se suele decir con frecuencia que a la hora de tener una relación sexual satisfactoria, el tamaño del pene no importa. Pero más allá de cuánto quieran adornar este eterno debate, siempre surgen las dudas sobre la posibilidad de lograr pleno disfrute cuando el miembro genital masculino se va a los extremos, en especial si es muy pequeño.
De hecho, un tamaño diminuto puede provocar preocupación en muchos varones, no solo por la duda de disfrutar, sino también de lucir bien ante la pareja.
En el caso de algunas mujeres, a nivel físico esta situación puede generarles dificultad para gozar a plenitud de la intimidad sexual.
Los sexólogos indican que que en los casos en los que el tamaño se inclina al extremo, ya sea un pene muy pequeño o un pene muy grande, la satisfacción podría afectarse. Ahora bien, los hombres que tienen un pene bajo el promedio necesitan entender que tener un pene pequeño es mejor que tener uno gigante.
Asimismo, sostienen que el tamaño de este miembro masculino se mide típicamente durante la erección. Un pene humano promedio mide entre unas 5 1/2 y 6 pulgadas. Esta medida depende de la genética y la raza del individuo.
¿Satisface o no satisface?
En un hombre con un pene pequeño, suelen ser varias las inquietudes. Desde el punto de vista de satisfacción para el varón, “la preocupación de no ser ‘normal’ es el factor principal que determina cuánto disfrutará la relación coital”, aclara la sexóloga.
Pero en cuanto a la mujer, el hombre con un pene demasiado pequeño tiende a cuestionarse si será capaz de satisfacer a la pareja en una relación sexual. La preocupación puede ser tan recurrente que se convierta en una obsesión. Incluso, si la inquietud se torna muy intensa, puede desarrollar inseguridad en cualquier relación de pareja que establezca. A esto podría añadirse el miedo a perder a la pareja por un hombre con un pene más grande, lo que puede, incluso, llevar a desarrollar celos irracionales.
Pero la inquietud más reportada es la de si será capaz de atraer pareja. Sin embargo, el hombre debe ser consciente de que la capacidad de atracción no depende del tamaño del pene, sino de la seguridad en sí mismo y la compatibilidad que tengan entre ambos. Al respecto, analizan que es interesante que las razas que tienen el promedio de penes más pequeños (como los que tienen rasgos asiáticos) son asociadas con tener los mejores amantes.
Algunos especialistas plantean un factor que puede ser significativo, y del que casi no se habla: el tamaño de la vagina. Si la elasticidad de la vagina se ha perdido, ya sea por múltiples embarazos, cirugías, el tamaño del pene puede llegar a percibirse más pequeño de lo real por la pérdida de elasticidad.
Para disfrutar más
Los sexólogos explican que cuando el hombre tiene un miembro pequeño, la queja principal, de las pocas mujeres se quejan, es que se les hace difícil sentir la penetración en las posiciones tradicionales. Lo que recomiendan, en esos casos, es acercar lo más posible ambas pelvis para lograr los movimientos y las posiciones que puedan ayudar a tener roce clitoral, lo que al fin y al cabo es la fuente de excitación primordial en la genitalia femenina.
En este sentido, explican que la posición del misionero no será la más idónea, pero sí la de “doggy style” (con la mujer boca abajo) o la de “spread eagle”. En esta última, la mujer tiene las piernas abiertas mientras él está arrodillado al frente. Al hombre estar en esta posición, se aumenta un poco más la cercanía que si solo tratara de hacerlo acostado.