Por Juan E. Ballesteros
13/3/2017
Un juzgado de Madrid ha admitido a trámite una demanda contra la multinacional Apple interpuesta por LBO Abogados con el objetivo de que clarifique el proceso de venta de música a través de iTunes. La acción judicial pretende que se elimine de esta operación mercantil el término compra, puesto que no se adquiere ningún producto sino una licencia de uso sobre el contenido digital.
Tanto el demandante como el representante legal de Apple ha sido citados el próximo 30 de marzo a un acto de conciliación que tendrá lugar en el juzgado de primera instancia número 3 de Madrid, que entiende el caso. El auto de admisión a trámite, al que ha tenido acceso el diario ABC, argumenta que este órgano judicial se declara competente territorialmente para instruir las diligencias pertinentes.
Según ha explicado el abogado sevillano Víctor López, miembro del citado bufete, la demanda surgió a raíz de la presentación de su tesis doctoral en la Universidad Pablo de Olavide, un trabajo académico titulado El contrato de iTunes: problemática en la adquisición de productos digitales.
En realidad, la idea tuvo su origen cuando el letrado leyó una información sobre las quejas del actor Bruce Willis, que amagó asimismo con una demanda contra Apple ante el hecho de que podía descargarse canciones de iTunes, pero no tenía autorización para regalárselas a sus hijos.
Al parecer, el célebre actor llevaba años comprando canciones en la tienda de Apple –donde llegó a gastar una cantidad cercana a los 60.000 dólares–y cuando se planteó la posibilidad de legársela a su familia se dio cuenta de que solo había adquirido el derecho de uso, no la propiedad de la música. Las protestas del protagonista de La jungla de cristal encendieron las redes y avivaron la polémica.
Según la información facilitada por iTunes en cada transacción, quien descarga una canción solo adquiere el derecho de reproducirla, pero no la puede pasar a un tercero, como figura claramente en los términos y condiciones que se aceptan en la operación de venta.
“Esta licencia no le permite utilizar la Aplicación Cedida Bajo Licencia en ningún dispositivo de Apple que no sea de su propiedad o no esté bajo su control y, salvo por lo dispuesto en las Normas de Utilización, usted no podrá distribuir o facilitar el acceso a través de una red desde la que pueda ser utilizada simultáneamente por varios dispositivos”, indican los términos de la compañía.
En caso de que los usuarios vulneren esta condición del servicio de música de Apple, bien sea compartiendo sus descargas a otros usuarios o a dispositivos que no sean de su propiedad, la compañía tomará medidas, empezando por la suspensión de su cuenta.
Con la demanda, el abogado sevillano pretende que la multinacional aclare los términos de adquisición cambiado el concepto «compra» por adquisición de licencia de uso para evitar cualquier confusión a los usuarios.