La planeada tasa digital en España podría no generar los ingresos previstos por Madrid, advirtió el martes la Comisión Europea, provocando dudas sobre la capacidad del Gobierno para cumplir con sus propios objetivos de déficit para este año.
La autoridad fiscal independiente (AIReF) ha revisado a la baja el impacto para el erario de las nuevas medidas fiscales, entre las que está la tasa digital, y considera «improbable» que el déficit público se reduzca al 1,3 del Producto Interior Bruto (PIB) este año frente al 2,7 estimado para 2018.
El Ejecutivo español aprobó unos presupuestos generales de 2019 en los que se recoge una tasa digital a grandes tecnológicas del 3 por ciento de los ingresos de algunos servicios online, con la que prevé obtener 1.200 millones de euros anuales. El impuesto grava la prestación de servicios de publicidad en línea, los servicios de intermediación en línea y la venta de datos generados a partir de información proporcionada por el usuario en interfaces digitales.
Isabel Celaá, dijo que el impuesto, dirigido a empresas con ingresos superiores a los 750 millones de euros a nivel mundial y al menos tres millones de euros en España. El Gobierno español sacó adelante la propuesta tras el fracaso de su implantación a nivel europeo contra empresas como Google o Facebook, cuyos detractores dicen que pagan demasiado poco redirigiendo sus beneficios a países con bajos impuestos en el bloque.
Pero la Comisión Europea, responsable de controlar los presupuestos de los países de la UE, también dijo que la tasa podría no ser tan lucrativa como se espera.
Dudas sobre la capacidad de recaudación
El vicepresidente de la Comisión, Valdis Dombrovskis, y el comisario europeo de Economía, Pierre Moscovici, escribieron en una carta al Gobierno español que tenían «dudas sobre la capacidad estimada» de generación de ingresos de la tasa digital planeada.
En la carta, fechada el 28 de enero, los responsables europeos repitieron que había riesgos de que España no cumpla su objetivo de déficit.
El Banco de España dijo el lunes que, teniendo en cuenta los planes de presupuestos de 2019, el déficit se situaría en torno al 2 por ciento del PIB este año, por encima del objetivo del Gobierno. Los ministerios españoles de Economía y Hacienda no hicieron comentarios el martes, según Reuters.
Asimismo, es probable que las conversaciones sobre el asunto se retomen a nivel europeo en las próximas semanas, aunque sobre una tasa con un alcance menor. Otros países de la UE, como Italia y Francia, que lideraron el impulso al impuesto en la UE durante meses, han introducido gravámenes nacionales que se pondrían en marcha si no se alcanza un acuerdo en Bruselas antes de verano.
Con información de Reuters.
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