Los cálculos actualizadas de la ONU indican que alrededor de 2,3 millones de ucranianos han huido de su país despavoridos por la guerra. Contrariamente otros ucranianos dispersos en el mundo y extranjeros se están movilizando para ir en defensa de Ucrania.
Armados de voluntad, entereza, una buena dosis de valentía y amor patrio, miles de personas llegan a ese territorio hostil, en el que han convertido a Ucrania. ¿El propósito? Luchar contra la invasión rusa. Numerosos ucranianos, muchos de los cuales nunca han disparado un arma, han puesto sus vidas en espera para defender su patria.
Yuriy Blazhkevych, un taxista que vive en Brighton Beach, se encuentra entre el número creciente de ucranianos en Nueva York y el resto del mundo dispuestos a unirse al frente a combatir contra Rusia. Atienden el llamado del presidente Volodymyr Zelensky para constituir una Legión de Defensa Internacional de Ucrania.
La semana pasada, Blazhkevych estaba parado en su garaje mirando imágenes de Ucrania en su teléfono que mostraban edificios con ventanas reventadas. Tanques volteando sobre autos y personas huyendo para salvar la vida. Luego estaban las fotos de los niños muertos. “Lloré”, dijo 24 horas antes de abordar un vuelo a Varsovia. Le declaró aThe New York Times. “Cada cinco minutos, había algo nuevo. Entonces me dije: Veo la guerra en Facebook, escribo comentarios y lloro, o voy y ayudo'».
Arrojo y valentía en defensa de Ucrania
A la generosa y arrojada decisión de ir en defensa de Ucrania también se han unido, entre otros muchos, Ana Bogdanova, de 37 años. Una científica de datos que cambia las cafeterías de Manhattan por entrenamiento con armas en su ciudad natal, Ternopil. Igualmente suma su coraje, Ivan Danyliuk, de 18 años, de Ridgewood, Queens. Mesero en Veselka, el popular restaurante ucraniano en East Village, que se ha convertido en un centro en el que los neoyorquinos muestran solidaridad.
Yuriy Nikolaevich, de 55 años, un ingeniero forestal que vive en Somerset, Nueva Jersey, desde hace 20 años, viajó a ofrecer ayuda humanitaria a lo largo de la frontera polaca. Y Andrey Liscovich, de 37 años, un empresario tecnológico educado en Harvard, dejó su trabajo en Silicon Valley para luchar en Zaporizhzhia. El sitio donde está ubicada la planta nuclear más grande de Europa y que recientemente fue atacada e incendiada por las tropas rusas.
Aunque es difícil obtener cifras fiables, se cree que miles de extranjeros se han unido a la causa ucraniana: «Se calcula que hay unos 20.000 aproximadamente. La mayoría son europeos y estadounidenses. Hay 500 de Bielorrusia y también algunos voluntarios japoneses», dijo Ed Arnold, investigador de Seguridad Europea en el Royal United Services Institute de Londres, a la agencia alemana DW.
Medios alemanes informan que hasta 1.000 ciudadanos de este país han viajado a Ucrania. Las autoridades oficiales desconocen el número exacto. «La gente viaja libremente por el espacio Schengen. Suponemos que son ucranianos o, al menos, personas de origen germano-ucraniano», indicó Maximillian Kall, el portavoz del Ministerio del Interior.
Atentos a los antecedentes de voluntarios extranjeros
Más allá de exaltar la actitud ciudadana de solidaridad y desprendimiento de ucranianos y extranjeros en defensa de Ucrania, surgen algunas preocupaciones. La participación de ultraderechistas alemanes. Al respecto, Maximillian Kall precisó que las autoridades de seguridad los tienen en su radar. «Sabemos de un número muy pequeño, de un solo dígito, de extremistas de derecha alemanes que salieron del país», agregó.
En el trabajo de investigación de DW se indica que son muy diversos los antecedentes de quienes se alistan. Algunos tienen poca o nula experiencia militar, quienes probablemente les asignen tareas logísticas, como transportar suministros o personal al frente. A aquellos que no tienen experiencia militar se les exigirá que aprendan lo básico, como el manejo de las armas, en cuestión de pocos días. Pero incluso para los veteranos que han estado antes en situaciones de combate, este es un asunto diferente.
«Tengo informes de veteranos sobre el terreno que dicen que han disparado más munición en cuatro días que en cuatro viajes completos a Irak y Afganistán. Este no es el mismo tipo de conflicto al que están acostumbrados», afirmó Ed Arnold, que fue oficial de infantería en el Ejército británico y sirvió en Afganistán.
Esta preocupación se deriva de la historia y las experiencias recientes de Ucrania. La presencia de combatientes extranjeros en Ucrania no es nada nuevo. Desde 2014, se cree que más de 17.000 combatientes de más de 50 países han luchado tanto en el bando ruso como en el ucraniano en la guerra del Donbás.
Condiciones para combatir
El Gobierno ucraniano creó una página web en la que se dan todas las instrucciones pertinentes a quienes quieran sumarse a Ucrania en su «lucha por la paz y la democracia en Europa». Se calcula que alrededor de 20.000 extranjeros se han ofrecido..
Como una manera de organizar ese “nuevo ejército” el gobierno estableció normas para hacer la selección y adelantar un proceso que beneficie y no traiga complicaciones. La principal recomendación es que se pongan en contacto con la Embajada de Ucrania en sus respectivos países, la cual se encargará de tramitar la documentación y la solicitud. Será también la embajada la que brinde las instrucciones sobre cómo viajar hasta Ucrania y el punto en el que serán recogidos. Además, se aconseja a los elegidos que lleven su propio material, como cascos y chalecos antibala, si disponen de ello.
Movilización y entrega, ¿cuánto durará la guerra? es la gran pregunta.