Aunque la población de Ucrania se ha reducido de manera forzosa por la guerra ordenada por Rusia, el combustible no alcanza. Las colas de vehículos durante horas son algo común en los alrededores de todas las estaciones de servicio
Este componente adicional que obstaculiza la marcha de esa nación en conflicto, surge por los impactos de los ataques rusos a la infraestructura de combustible y los depósitos de petróleo. Además, se suma el bloqueo de los puertos ucranianos del Mar Negro. Las tensiones se acentúan cuando el combustible se convierte en un objetivo principal y un producto crucial, para ambos lados a medida que continúa la presencia militar rusa
“El objetivo del país agresor es detener la economía de Ucrania creando una escasez de combustible”, dijo la ministra de Economía de Ucrania, Yulia Svyrydenko, en referencia a los ataques actuales contra la infraestructura de hidrocarburos y sus derivados.
El combustible ha sido un producto estrictamente controlado en Ucrania desde el comienzo de la guerra con raciones planificadas para evitar la escasez. Pero los ataques y destrozos a los depósitos llevó a las autoridades a pedir a la ciudadanía que tomen el transporte público y ahorren combustible para el ejército.
Un devastador ataque con misiles, en abril, al principal productor de combustible de Ucrania, la refinería Kremenchuk, y arremetidas posteriores a los depósitos de petróleo han reducido el suministro. Las instalaciones de almacenamiento han movido sus reseras para disminuir el riesgo de bombardeos. Antes, las tropas rusas asestaron duros combates a centrales nucleares, de alto riesgo para el país y la región.
Ucrania reduce suministro de combustible
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, se comprometió a tomar medidas para poner fin a la escasez de combustible. Indicó que los bombardeos han obligado a cerrar casi la mitad de las 7.000 estaciones de servicio. Hay largas filas y suministros limitados. Un funcionario de energía dijo a Global News que 15 depósitos de petróleo en Ucrania habían sido destruidos o dañados por ataques con misiles.
A la escasez de combustible en Kiev se suma un aumento en la demanda. Dmytro Mysko, quien administra tres estaciones de servicio de BRSM Oil explicó que gran número de civiles regresan a la región después de huir del fallido ataque ruso a la capital.
«Debido al regreso de la gente, la demanda ha aumentado varias veces», agregó Mysko. Una de sus estaciones prestaba servicio a aproximadamente el doble de su volumen diario de alrededor de 400 automóviles antes de quedarse sin gasolina.
Entretanto, Serhiy Kuyun de A95 Consulting Group, una firma de investigación especializada en el sector energético, afirmó que resolver el problema era solo cuestión de tiempo. «Espero que para junio tengamos un suministro estable», comentó a Reuters.
«No me preocupa en absoluto el ejército, la principal molestia recaerá sobre el consumidor privado», agregó tras comentar que también había reservas para los servicios municipales.
Zelenskiy aseguró que los ocupantes están destruyendo deliberadamente la infraestructura para la producción, suministro y almacenamiento de combustible». Otra manera de acentuar la guerra.
Insistió en que las colas y el aumento de los precios son el resultado de los ataques rusos a las instalaciones de gas. Así como del bloqueo del Kremlin a los puertos de Ucrania. Los precios del gas y el petróleo se han disparado durante la guerra.
Bloqueo marítimo y ausencia de importaciones
La armada rusa y las minas marinas han bloqueado los puertos ucranianos del Mar Negro. Impiden que los petroleros repongan las existencias de combustible. La ministra Svyrydenko informó que la escasez se eliminaría en la próxima semana. Los minoristas de Ucrania habían obtenido contratos con proveedores europeos. Pero la distribución de esos suministros podría complicarse. Hay muchos puentes y carreteras destruidos o dañados. El tráfico también se ve frenado por múltiples puntos de control de seguridad.
Las fuerzas rusas atacaron hace unos quince días la refinería de petróleo de Kremenchuk, poniendo fuera de producción la última de las dos principales refinerías de petróleo de Ucrania. Ucrania consumió alrededor de 2,4 millones de toneladas de gasolina y 8 millones de toneladas de diésel en 2021. Importaba el 80% de sus productos derivados del petróleo antes de la guerra. El 62% de la gasolina y el 44% de su diésel lo suministraban Rusia y Bielorrusia.
La pérdida de esas fuentes se puede gestionar con importaciones de fuentes europeas a través del extenso sistema ferroviario del país, dijeron fuentes militares. «Gracias a los acuerdos, a veces al más alto nivel, la situación con el combustible para el ejército es segura. Estamos transportando a casi todas partes y ahora el balance parece optimista», añadió.
Los comerciantes de combustible también han evitado acumular suministros en las estaciones de servicio y han ampliado sus fuentes de importación, incluido un proyecto para traer diésel de Estados Unidos.