Por Cambio16
05/06/2017
Tras el atentado terrorista del pasado sábado en Londres, el presidente de EEUU, Donald Trump, ha reconocido este lunes en su cuenta de Twitter que su polémica orden ejecutiva de enero constituye «una prohibición de viaje» para los ciudadanos de seis países de mayoría musulmana.
«Los abogados y los tribunales pueden llamarla como quieran, pero yo la voy a llamar como lo que necesitamos y como lo que es, una PROHIBICIÓN DE VIAJE«, ha publicado el mandatario estadounidense.
People, the lawyers and the courts can call it whatever they want, but I am calling it what we need and what it is, a TRAVEL BAN!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 5, 2017
Aunque esta orden ha provocado fuertes protestas y críticas -tanto dentro como fuera de EEUU- Trump insiste en «el Departamento de Justicia debería de haberse mantenido con la prohibición de viaje original» en lugar de «la versión suavizada y políticamente correcta que presentó al Tribunal Supremo».
«El Departamento de Justicia debería pedir una vista acelerada de la prohibición de viaje suavizada ante el Tribunal Supremo y buscar una versión mucho más dura«, reza el siguiente mensaje.
Trump destaca que, en cualquier caso, se está realizando una «investigación extrema» a aquellas personas que viajan a EEUU «para mantener nuestro país a salvo». ¡Los tribunales son lentos y políticos!», escribió a continuación.
El 27 de enero, Trump firmó una orden ejecutiva con el objetivo de «mantener fuera de EEUU a los terroristas islámicos radicales», una iniciativa que prohibía el ingreso en territorio estadounidense de personas de siete países de mayoría musulmana (Irán, Irak, Libia, Siria, Sudán, Somalia y Yemen), además de la prohibición de entrada de refugiados sirios. El 3 de febrero, la orden ejecutiva de Trump fue dejada sin efecto temporalmente.
El 6 de febrero, el Departamento de Justicia de EEUU presentó un escrito ante el Tribunal de Apelaciones de San Francisco en apoyo al veto migratorio de Trump alegando que es un «ejercicio legal» de la autoridad presidencial. Y recientemente, el 25 de mayo, una corte de apelaciones negó su rehabilitación alegando que contiene «intolerancia religiosa, animosidad y discriminación».
Tras ello, el procurador general de EEUU, Jeff Sessions, anunció que el Departamento de Justicia de su país recurrirá a la Corte Suprema para que revise el bloqueo vigente al decreto migratorio.