El presidente Donald Trump se postuló como el gran defensor del “American way of life”, de la democracia y del sueño americano frente al socialismo. Al aceptar la candidatura del Partido Republicano a la reelección, dijo que los próximos comicios presidenciales serán los más importantes en la historia del país. “Estas elecciones decidirán si salvamos el sueño americano o permitimos que un programa socialista demuela nuestro querido destino», advirtió.
«Con un corazón henchido de gratitud y un optimismo sin límites, acepto esta nominación para presidente de Estados Unidos». Fueron las palabras de Trump al cerrar el jueves en la noche la Convención Republicana que lo postuló a la reelección para el periodo 2021-2025.
Para convertirse en el cuadragésimo sexto presidente de Estados Unidos, Trump, de 74 años, deberá remontar las encuestas que por ahora favorecen al candidato demócrata, Joe Biden. El final de su actual mandato transcurre en medio de una severa crisis sanitaria, económica y social. Casi 180.000 muertos por coronavirus, 10,2% de desempleo y masivas manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial que no cesaron ni siquiera el jueves en la noche.
“Soy el único que se interpone entre el sueño americano y la anarquía, la locura y el caos totales que representa Biden», dijo Trump. “En ninguna época previa los votantes han enfrentado una opción más clara entre dos partidos, dos visiones, dos filosofías o dos agendas”, prosiguió. En otro momento dijo que el ex vicepresidente de Barack Obama no es el salvador del alma de Estados Unidos. «Al contrario, si se le da la oportunidad será el destructor de la grandeza estadounidense», enfatizó.
Las promesas de Trump
Aunque dedicó gran parte de su discurso en atacar a su contrincante, Trump también esbozó algunos de los planes que emprenderá. «En un nuevo mandato como presidente, volveremos a construir la mayor economía de la historia; volviendo rápidamente al pleno empleo, aumentando los ingresos y registrando prosperidad», prometió.
“El 3 de noviembre haremos que Estados Unidos sea más seguro y más fuerte. Haremos que Estados Unidos esté más orgulloso y que sea más grande que nunca”, aseguró.
También insistió en que este mismo año Estados Unidos tendrá una vacuna contra el coronavirus, un tema por el cual ha sido duramente cuestionado por la opinión pública. “Vamos a tener una vacuna segura y efectiva este año y juntos vamos a aplastar este virus. Tenemos tres vacunas diferentes en la última etapa de prueba; las estamos produciendo ahora, así cientos de millones de dosis estarán disponibles rápido”, afirmó.
Añadió que, gracias a la ayuda financiera ofrecida por el gobierno, los estadounidenses tuvieron «la menor contracción económica de cualquier nación occidental grande y se está recuperando mucho más rápido».
Trump no perdió la ocasión para acusar a China de ser el responsable de la propagación del SARS-CoV-2, el virus causante de la COVID-19. “China permitió la propagación (del virus) por todo el mundo. Ellos hubieran podido pararlo, pero dejaron que saliera”, señaló.
Asimismo, vinculó a Biden con China, un país con el cual Trump ha mantenido muy tensas relaciones. “China apoya a Biden y quiere desesperadamente que gane. China sería dueño de este país si Biden es elegido”, apuntó.
Protestas frente a la Casa Blanca
Mientras Trump hablaba, cientos de personas sonaban silbatos y gritaban consignas frente a la Casa Blanca en rechazo a la postura de “mano dura” del mandatario. Las manifestaciones antirraciales recrudecieron esta semana por un nuevo caso de «violencia racial», esta vez en Kenosha, Wisconsin. El afroamericano Jacob Blake, de 29 años y padre de seis hijos, quedó paralítico tras ser abaleado por un policía blanco porque no quiso soltar el cuchillo que llevaba. Posteriormente, un joven de 17 años de edad disparó y mató a dos manifestantes que participaban en una protesta por la supuesta muerte de Blake.
Desde la muerte de George Floyd, a manos de un policía, en mayo pasado, Trump ha defendido la actuación de los cuerpos policiales para “mantener la ley y el orden”. Trump se presenta también como el presidente que «más ha hecho por los afroamericanos», como lo señaló el senador Tim Scott al intervenir esta semana en la la Convención Republicana.
Al reiterar su posición en el discurso de anoche, Trump acusó a los demócratas de «financiar y apoyar a vándalos y delincuentes» en las protestas contra el racismo. Asimismo, alertó a los electores de que si llegan a la presidencia, los demócratas “destruirán los suburbios” –las zonas residenciales de clase media– para “sumergirlos en la violencia”.
Lea también: