Donald Trump reiteró que existen pruebas que vinculan el nuevo coronavirus con un laboratorio en China y apuntaló la posibilidad de imponer más aranceles a Pekín como una sanción preliminar.
Trump afirmó que había visto pruebas de que el Instituto de Virología de Wuhan, donde se detectaron los primeros casos de la COVID-19, era la fuente del SARS-CoV-2.
También los periodistas le preguntaron si planeaba cancelar parte de las obligaciones de deuda de Estados Unidos con Pekín para castigar a China por su gestión de la pandemia, tal como publicó The Washington Post.
China has just announced a doubling in the number of their deaths from the Invisible Enemy. It is far higher than that and far higher than the U.S., not even close!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 17, 2020
“Podemos hacerlo de otras formas, podemos hacerlo con aranceles. Podemos hacerlo de otras formas incluso más allá de eso, sin tener que incursionar en ese juego”, respondió.
De acuerdo con el diario estadounidense estaba prevista una reunión de responsables de varias agencias oficiales. Entre ellos algunos de Inteligencia para trazar una estrategia de represalias a China.
Sobre la mesa de debate está la eventual suspensión de la inmunidad soberana, lo que permitiría al Gobierno estadounidense o a las víctimas, demandar a China por daños y perjuicios. Asimismo la posible cancelación unilateral de las deudas de Estados Unidos con el país asiático. Pero las conversaciones, advierten las fuentes de Post, se encuentran aún en una fase preliminar.
Contradicciones sobre origen del coronavirus
Trump volvió a culpar al gobierno chino del coronavirus. Pero en otras oportunidades ha dicho que ese país podría detener la crisis: “Ellos (China) son una nación muy brillante, científicamente y en otras cosas. Se escapó, digamos eso, y ellos podrían habérselo guardado, podrían haberlo parado, pero no lo hicieron”.
Intelligence Community Statement on Origins of COVID-19 pic.twitter.com/MIPr6LVzU4
— Office of the DNI (@ODNIgov) April 30, 2020
Horas antes de la rueda de prensa, la Oficina del Director Nacional de Inteligencia anunció que había llegado a la conclusión de que el nuevo coronavirus se originó en China,“no fue creado por humanos ni modificado genéticamente”. Agregó que continuará investigando “para determinar si el brote comenzó por el contacto con animales infectados o si fue el resultado de un accidente en un laboratorio en Wuhan”.
Trumpo le dijo a Reuters que “China hará todo lo que pueda para que yo pierda esta carrera a la Casa Blanca”. Resaltó que Pekín quiere que gane su rival Joe Biden, para relajar la presión que el gobierno republicano ejerce sobre China en asuntos comerciales y de otra índole.
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