Por Cambio16
05/12/2016
El presidente electo de EEUU, Donald Trump, ha advertido a las empresas nacionales de las consecuencias de cometer «el costoso error» de marcharse a otros países con el fin de abaratar costos.
Trump ha propuesto adoptar en ese caso una política tributaria punitiva, cumpliendo de esta manera con una de sus promesas electorales. «Cualquier negocio que abandone nuestro país para marcharse a otro, despidiendo a sus empleados, construyendo nuevas fábricas y plantas en un país extranjero y que luego quiera vender sus artículos en EEUU sin esperar consecuencias, ¡se equivoca!», ha anunciado Trump en una serie de tuits en su cuenta oficial.
The U.S. is going to substantialy reduce taxes and regulations on businesses, but any business that leaves our country for another country,
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de diciembre de 2016
Asimismo, el presidente electo ha declarado que de trasladar la producción de EEUU a México, China, o cualquier otro país para abaratar costos, se decantaría por una política punitiva, informa Bloomberg Politics. «Se impondrá un impuesto de hasta 35% sobre las empresas que quieran vender sus artículos, autos (…) en EEUU», ha precisado Trump. «Por favor, quedan advertidos de cometer un error tan costoso».
fires its employees, builds a new factory or plant in the other country, and then thinks it will sell its product back into the U.S. ……
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de diciembre de 2016
without retribution or consequence, is WRONG! There will be a tax on our soon to be strong border of 35% for these companies ……
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de diciembre de 2016
Hace una semana, Donald Trump logró un compromiso con la empresa United Technologies Corp. para que se mantuviera en el estado de Indiana en vez de marcharse a México.
El acuerdo, sin embargo, fue pactado no mediante amenazas de aumentarle los impuestos, sino a través de un compromiso, según el cual, la compañía recibirá seis millones de dólares por mantener 1.100 empleos —1.300 se mudan a México— en el país norteamericano.
Este nuevo acuerdo marca el inicio de la agenda política de Trump en materia económica que pretende implementar para evitar la instalación de compañías estadounidenses en otros países con la ayuda de incentivos y recortes en los impuestos.
Y suenan las críticas
Las críticas de la iniciativa ya se oyen, tanto por parte de los demócratas como los republicanos.
«Yo personalmente prefiero la zanahoria al palo», ha comentado el tema Jeb Hensarling, miembro de la Cámara de Representantes por Texas.
«Al mismo tiempo, la mano invisible del mercado que mejor orquesta un sistema de personas libres y de libre empresa se ve amputada», ha sostenido la republicana Sarah Palin, exgobernadora de Alaska.