Por Efe
ACTUALIZADO 20/05/2016
El Ayuntamiento de Tordesillas (Valladolid) recurrirá ante los tribunales el decreto ley aprobado por la Junta de Castilla y León que prohíbe la muerte de reses de lidia en espectáculos taurinos populares y tradicionales, como es el caso del Toro de la Vega.
En una rueda de prensa, el alcalde de Tordesillas, el socialista José Antonio González Poncela, acompañado del portavoz municipal del PP, Miguel Ángel Oliveira, ha anunciado que basarán su recurso en que el decreto de la Junta contraviene el espíritu de la Ley para la Regulación de la Tauromaquia como Patrimonio Cultural.
Preguntados por los preparativos de la próxima edición del Toro de la Vega, el alcalde ha contestado que van a «trabajar para que se siga celebrando como se ha celebrado durante 500 años», lo que ha arrancado los primeros aplausos y vítores de cerca de un centenar de vecinos que han llenado el salón de actos en el que se ha convocado la rueda de prensa. «No estás solo», se ha escuchado.
González Poncela ha defendido el Toro de la Vega como «la raíz de la tauromaquia» y ha considerado que la Junta de Castilla y León no ha tenido en cuenta que la lidia del toro está «protegida en España», por lo que ha confiado en que su recurso prospere, apoyado también en un «defecto formal», ya que tiene fecha de mañana, según el regidor.
Un documento consensuado entre el PSOE y el PP de Tordesillas y leído por el alcalde lamenta que el Ejecutivo autonómico «no sepa valorar la diversidad de rito y manifestaciones culturales de gran importancia antropológica, donde hunde las raíces la tauromaquia actual».
Añade el texto que la Junta «debería proteger como parte de los pilares que han construido la historia de esta Comunidad», ya que consideran al Toro de la Vega como «una de las señas de identidad cultural más importantes».
González Poncela ha apelado a la Constitución para defender «la libertad cultural» de su pueblo, que representado por el centenar de vecinos presentes en la rueda de prensa ha contestado a coro con un sonoro «no» cuando los periodistas han preguntado al alcalde si el torneo tenía sentido sin dar muerte al toro.
Preguntado por la prohibición de matar al toro que estuvo vigente en algunas ediciones de los años sesenta, el alcalde ha constatado que «fue Franco» quien lo hizo, por lo que ha ensalzado el «soplo de libertad» que supuso la Transición democrática, a la que ahora se alude para conseguir consensos.
El representante del PP ha dicho que ni comparte ni respeta el decreto, aunque lo acatará si finalmente no prospera el recurso, si bien ha abierto la posibilidad a darse de baja en su partido si no rectifica lo aprobado hoy por la Junta de Castilla y León.
«Trasladaré mi más sincero malestar, no compartimos ni los términos, ni las formas, ni el momento porque no se ha consultado a los ciudadanos», ha argumentado el concejal popular.
Ambos dirigentes han negado tener conocimiento de que esta prohibición iba a ser aprobada este jueves y han proclamado sus intenciones de mantener dos vías de actuación: una enmarcada en el ámbito judicial para recurrir el decreto ley y otra para preparar el festejo de septiembre próximo como si fuera a celebrarse.
De hecho, a ambos les ha pillado por «sorpresa» la noticia, ya que se encontraban en el funeral por un guardia civil, vecino del municipio, que murió ayer en acto de servicio, arrollado por un vehículo, cuando ayudaba a un camión averiado en la A-62 a su paso por Tordesillas.
También han coincidido al anunciar que buscarán el apoyo de las direcciones de sus partidos en el ámbito autonómico, ya que este decreto ley tendrá que ser convalidado en las Cortes de Castilla y León.