Por Cambio16
Se acabaron los coches de la Guardia Civil escondidos tras una curva. Todos los radares, tanto los fijos como los móviles, estarán visibles para el conductor, según anunció el miércoles la directora general de Tráfico, María Seguí, cuyo departamento publicará periódicamente en su página web los 1.200 tramos de vías en los que se intensificará la vigilancia de la velocidad.
María Seguí ha ofrecido una sesión informativa en la que ha ofrecido más detalles sobre las novedades anunciadas. Así ha matizado que desde el jueves todos los radares, tanto fijos como móviles, aplican el mismo margen de tolerancia en los excesos de velocidad en las carreteras, del 7%, y también los radares incorporados en los coches de la Guardia Civil ya son totalmente visibles.
Hasta ahora, los conductores hacían el cálculo con el famoso margen del 10%, es decir, si el límite está en 120 km/h sabían que podían circular a 130km/h y no habría multa.
Seguí ha informado además de que a partir del 1 de marzo todos los radares podrán diferenciar el tipo de vehículo al que se multa, es decir, si se trata de un turismo, una furgoneta, un camión o una motocicleta, de tal manera que se activará en función del límite de velocidad establecido para cada uno.
Antes del verano, probablemente en dos meses, la página web de la Dirección General de Tráfico publicará los 1.200 tramos de las carreteras secundarias en los que se intensificarán los controles de velocidad y en los que podrán situarse los más de cuatrocientos radares móviles de los que dispone, una lista que se renovará mensualmente.
Preguntas y respuestas que resumen las nuevas medidas anunciadas por la DGT:
¿Todos los radares estarán a la vista del conductor?
Sí. Tráfico dispone de 850 radares, la mitad de ellos móviles. Los fijos, que en su caso podrían utilizarse como móviles, están en su mayoría en las autovías y autopistas y su ubicación suele avisarse antes en los paneles informativos.
Los móviles, por su parte, están incorporados en los 250 coches de la Guardia Civil, tanto en los vehículos «uniformados», es decir, los de color corporativo, como en los de colores comerciales, que son los que se conocen como «camuflados».
Tanto unos como otros, que pueden actuar de forma estática o móvil, tendrán que ser visibles. Según la instrucción que se ha dado a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, los coches con el radar incorporado deberán colocarse a la vista del conductor, siempre que la integridad de los agentes no se ponga en peligro.
Aunque no es tan habitual, esos radares pueden colocarse sobre trípodes. De hacerlo, también deben estar bien visibles.
De todos modos, aquellos conductores que suelen exceder con creces los límites seguirán siendo objetivo de los coches camuflados de la Guardia Civil. Y ojo, también del sistema Pegasus, los siete radares incorporados a helicópteros.
¿Dónde se colocarán los radares móviles?
Fundamentalmente en las carreteras secundarias competencia de la DGT y en tramos que, tras el análisis efectuado por Tráfico, cuentan con una mayor siniestralidad y gravedad.
¿Avisará Tráfico de su ubicación?
Sí y no. No habrá panel alguno que informe previamente de la existencia de un radar, pero la DGT publicará en su página web (comenzará a hacerlo antes del verano) los 1.200 tramos en los que podría estar colocado uno de los más de 400 radares móviles de los que dispone.
La lista se renovará cada mes y podrán descargarla si quieren los operadores de navegadores para incorporarla en este aparato.
¿Cómo serán esos controles móviles?
De corta duración y rotativos. Así que si algún conductor quiere avisar a través de las redes sociales o por teléfono a alguien de dónde se encuentra el radar, es probable que cuando el destinatario del mensaje llegue a ese punto, el control ya se ha trasladado a otro tramo (rotativo).
¿Cómo medirán?
Todos los radares medirán de forma uniforme y aplicarán un margen de tolerancia del 7%. Hasta ahora, existían diferencias en ese margen.
Así, el radar se activará cuando se sobrepasan en 8 kilómetros por hora el límite de velocidad establecido, desde 30 a 90 kilómetros por hora, en tanto que se disparará cuando detecte una velocidad de 109 kilómetros por hora en un límite de 100, y cuando se percate de que se circula a 120 cuando el límite es 110.
Mientras, en los tramos limitados a un máximo de 120 km/h, saltará a 131, y también lo hará a 131 si finalmente se aprueba la propuesta de elevar el límite máximo de velocidad a 130 en determinados tramos de autovías y autopistas.
¿Diferenciarán los radares el tipo de vehículo?
Sí. Tráfico los ha adaptado para que a partir del 1 de marzo distingan entre una furgoneta, un camión, un turismo o una motocicleta. De este modo, se aplicará la sanción en función del límite de velocidad establecido para cada tipo de vehículo.
¿Qué pasa si la Guardia Civil para al conductor por exceso de velocidad?
No solo le multará por ello, sino que le someterá a un control de drogas y alcohol y le revisará la documentación para comprobar si el vehículo ha pasado la ITV y si cuenta con el seguro obligatorio.
Estos dos últimos datos se comprobarán también en el centro de tratamiento de denuncias, Estrada, en el caso de que el conductor no haya sido parado pero sí sancionado por el radar.