Cambio16
16/04/2018
Es la nueva nave espacial de la NASA. Se llama Transiting Exoplanet Survey Satellite. O, mejor dicho, Tess. ¿Su misión? Ir más allá de las estrellas y descubrir nuevos mundos cercanos a la Tierra. Y se estima que podrá encontrar más de 20 mil planetas. Su despegue está listo para el martes a las 6.32 pm (hora local) desde el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral, Florida.
Según explica The Guardian, Tess soporta una inversión de 273 millones de euros. Tiene el tamaño de una nevera con paneles solares. Y pesa 362 kilos. Además, es pionero en un ámbito específico. Es la primera misión de la NASA en engancharse con el Falcon 9. Este cohete es propiedad de SpaceX de Elon Musk. En este sentido, Tess se posicionará en una órbita elíptica alrededor de la Tierra. Una hazaña que nunca se ha intentado. El telescopio se moverá muy lejos de la Luna mientras escanea el Universo. Luego, regresará a casa para transmitir sus datos. Cada órbita toma 14 días.
Tess pasará dos años observando 200 mil estrellas. Según la NASA la mayoría de estos cuerpos celestes están a más de 300 años luz de distancia. En este sentido, Tess es un proyecto que nace luego del éxito del telescopio Kepler, que se lanzó en 2009. Hasta el mes pasado, Kepler encontró 2.300 exoplanetas. De hecho, a raíz de sus registros, los científicos y astrónomos saben que en la Vía Láctea hay más de 2 mil millones de planetas potencialmente habitables.
Según La Vanguardia, Tess buscará estrellas similares al tamaño del Sol. Finalmente, podrá detectar 50 planetas parecidos a la Tierra y 500 mundos más grandes. «Tess es una máquina para buscar los mejores planetas que merecen ser estudiados más a fondo». Comentó Ignasi Ribas, director del Institut d’Estudis Espacials de Catalunya (IEEC). Por su parte, Enric Pallé, del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), confía: «Tess nos enviará una avalancha de datos cada dos semanas. Será un reto digerirlos para decidir en qué astros debemos concentrar los esfuerzos».