Por Cambio16
07/09/2017
Cuando un paciente no se presenta a una cita médica, perjudica al equipo médico. Y también tiene consecuencias económicas para el sistema sanitario. En España ya existen cifras que lo contabilizan. Por ejemplo, en el País Vasco, el 10% de los pacientes no acuden a las citas concertadas. Además, en algunas especialidades el porcentaje se duplica, alcanzando el 20%.
En España, la Organización Médica Colegial situó hace unos años en el 25% el porcentaje de citas que los especialistas no atienden porque los pacientes no se presentan en la consulta. Aunque por los datos ofrecidos, en la actualidad podría situarse entre el 10% y el 15%.
Lo explica Miguel Gonçalves, director general de E-goi, plataforma multicanal especializada en campañas de e-mail y mobile. «Los datos que hay, aunque parezcan pocos, son suficientes para confirmar que se trata de un problema grave con costes muy altos, tanto para el sector público como privado», señala. «Los gestores de pequeñas clínicas privadas hace tiempo que nos han alertado de este problema”.
Otros países realizan cálculos sobre las pérdidas millonarias que ocasionan las faltas de los pacientes a las citas médicas. En Estados Unidos el 10,5% no acude a su consulta concertada, y eso supone unas pérdidas de 150 millones de dólares al año. En Reino Unido, el porcentaje de citas a las que no asisten los pacientes llega hasta el 6,5%.
El SMS como solución
¿Qué está detrás de estas faltas o ausencias de los pacientes? El olvido es una de las principales causas, especialmente cuando son citas que se dan con una antelación superior a los tres meses. Con la tecnología como aliada, está claro que esto es algo que podría atajarse sin problemas. Para ayudar a promover la sostenibilidad de los negocios y minimizar las pérdidas en el sector de la salud.
Según detalla Marcelo Caruana, Marketing Manager de E-goi, en los últimos años se han hecho estudios que revelan que los recordatorios de citas por SMS pueden reducir las faltas de pacientes del 10,5% al 4,4 %.
“Esta solución para automatizar el envío de recordatorios puede ser muy lucrativa. A un precio medio por consulta de 50 euros, solo 2 faltas de pacientes de los 20 diarios que puede tener una consulta o una pequeña clínica, pueden ocasionar unas pérdidas anuales de 24.000€. Este dato es revelador, ya que, si la clínica o el hospital invierte, por ejemplo, un 0,05 € en cada recordatorio de consulta enviado, el beneficio puede llegar a los 3.600€. ¡Solo hay que hacer cuentas!”.