El Consejo de Ministros prevé aprobar este martes la “tasa Google” y la “tasa Tobin”, dirigidas a pechar los servicios digitales y las transacciones financieras, respectivamente. El gobierno de Pedro Sánchez viene afinando los detalles de estos dos nuevos impuestos.
Luego del respaldo ejecutivo a este proyecto normativo, que incluye a los dos nuevos tributos, se hará la tramitación parlamentaria en las Cortes Generales, para ser sancionados a la brevedad.
La entrada en vigor de estos impuestos será en el segundo semestre del año. Y su recaudación estará contenida en los presupuestos que el Gobierno está perfilando.
La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, señaló la semana pasada que estas nuevas tasas impositivas no tendrán efectos retroactivos. Y afirmó que ambas leyes ya han completado su fase de audiencia pública.
«Tasa Google» y «tasa Tobin»
La «tasa Google» afectará a las grandes compañías tecnológicas de los Estados Unidos que operan en España. Aunque Francia suspendió el curso de esa tasa impositiva, España agiliza su aprobación. Estiman que estos recursos puedan contribuir a sanear las cuentas y reducir el déficit fiscal público.
Las previsiones del Gobierno sitúan en 800 millones y 1.200 millones de euros al año la recaudación por la ‘tasa Google’ y la ‘tasa Tobin’, respectivamente.
Sin embargo, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estimó hace un año que la recaudación de ambos impuestos será inferior a lo calculado por el Gobierno.
Entonces especificó ingresos por la «tasa Google» de entre 546 y 968 millones de euros. Mientras que por la «tasa Tobin» espera entre 420 y 850 millones.
Mecanismo impositivo
La «tasa Google» consiste en gravar con un tipo del 3% los servicios digitales de publicidad online. Además, a los de intermediación que permitan localizar a otros usuarios e interactuar con ellos. Asimismo a los de transmisión de datos recopilados de usuarios de empresas con ingresos anuales de al menos, 750 millones de euros y con ingresos en España superiores a los 3 millones de euros.
En lo que respecta a la «tasa Tobin» se gravará con un 0,2% las operaciones de compraventa de acciones de empresas españolas con una capitalización bursátil superior a 1.000 millones de euros.
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— PSOE (@PSOE) February 15, 2020
El Gobierno defiende la creación de este gravamen porque hay ingresos obtenidos en España por grandes empresas internacionales a partir de ciertas actividades digitales. Muchas veces estas actividades escapan al actual marco fiscal, por lo que están haciendo competencia desleal especialmente al pequeño comercio.
Al margen de los nuevos tributos
En el proyecto normativo quedan fuera de la “tasa Google” la venta de bienes o servicios entre los usuarios en el marco de un servicio de intermediación en línea. También las ventas de bienes o servicios contratados en línea a través de la web del proveedor de esos bienes o servicios en la que el proveedor no actúa como intermediario.
Las prestaciones digitales que sean realizadas entre entidades que formen parte de un grupo con una participación, directa o indirecta, del 100% quedarán también fuera del impuesto.
Por su parte, quedan fuera del ámbito de la “tasa Tobin” la deuda, tanto la pública como la privada, y los derivados.
Entre las adquisiciones que estarán exentas de dicho gravamen se encuentran las operaciones del mercado primario (salida a Bolsa de una compañía). Aquellas necesarias para el funcionamiento de infraestructuras del mercado, las de reestructuración empresarial. Y las que se realicen entre sociedades del mismo grupo y las cesiones de carácter temporal.
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