Por Efe
07/07/2016
La audiencia de apelación del dirigente opositor venezolano Leopoldo López, condenado a casi 14 años de prisión por la violencia en una manifestación, ha sido suspendida este jueves por segunda vez, según informó la defensa del fundador del partido Voluntad Popular.
La audiencia ha sido suspendida en esta ocasión por la ausencia de uno de los abogado defensores de los estudiantes juzgados junto a López, informó a Efe el letrado que encabeza el equipo defensor de López, Juan Carlos Gutiérrez, desde el Palacio de Justicia en Caracas.
Para participar en esta audiencia viajaron a Caracas el exministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón y el abogado español Javier Cremades, que se sumaron en calidad de asesores a la defensa del dirigente opositor. Esta es la segunda vez que los letrados españoles intentan sin éxito participar en la vista de apelación de López.
López había sido trasladado hasta el tribunal desde el penal de Ramo Verde esta mañana para participar en esta sesión.
Es la segunda vez que la apelación se suspende, en esta oportunidad por la indisposición del defensor de Christian Holdack -uno de los jóvenes que fue juzgado junto a López-, que, según Gutiérrez, manifestó tener problemas de salud para asistir a la audiencia.
El pasado 20 de junio, día de la convocatoria anterior para esta audiencia, el Tribunal de Apelaciones que lleva el caso suspendió la sesión a causa también de la indisposición de uno de los magistrados de la corte.
El político, que cumple su condena desde hace más de dos años en una prisión militar de los alrededores de Caracas, recurrió su sentencia junto a los estudiantes Ángel González, Damian Martín y Holdack, con quienes fue enjuiciado y a quienes también se les condenó por delitos similares.
La condena de López es la máxima para los delitos de los que estaba acusado, instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio con relación a los hechos violentos al final de una manifestación contra el Gobierno convocada, entre otros, por él, el 12 de febrero de 2014 y que dejaron tres muertos.
Holdack, Martín y González fueron condenados a 10 años que cumplen en libertad condicional.
La condena del dirigente despertó la atención de la comunidad internacional y de los críticos del Gobierno de Venezuela que sostienen que López, al igual que los jóvenes, es «un preso político» del chavismo lo que ha sido rechazado por las autoridades del país caribeño.
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