Por Juan E. Ballesteros
12/3/2017
La secretaria general del PSOE de Andalucía y actual presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha despejado por fin todas las incógnitas al conocerse que oficializará su candidatura a liderar el partido el próximo 26 de marzo en Madrid, en un acto multitudinario en el que pretende demostrar toda su fuerza aglutinando el respaldo de la militancia de toda España y, con toda probabilidad, de los barones del partido.
Díaz se ha decidido a dar el paso después de que presentarán oficialmente su candidatura a la Secretaría General del PSOE el ex secretario general de los socialistas Pedro Sánchez y el ex lehendakari vasco Patxi López, que llevan semanas haciendo campaña por todas las agrupaciones socialistas del país, con actos de partido y mítines en los que han ido desgranando su programa político y sus propuestas para salir de la crisis interna y cicatrizar las heridas del partido.
Nunca antes habían concurrido tantos candidatos y de tanto peso político a la Secretaría General del PSOE, la centenaria formación política que aspira a superar sus divisiones y seguir liderando la oposición como alternativa de gobierno, pese al empujó del populismo de Podemos.
La secretaria general de los socialistas andaluces siempre ha querido desvincular su papel institucional como presidente de la Junta de Andalucía de sus aspiraciones a liderar el PSOE. No en vano sus partidarios alaban su estrategia y el uso que hace de los tiempos políticos. De ahí que la fecha elegida para presentar oficialmente su candidatura se haya fijado justo después de que la gestora del partido haya presentado la ponencia marco que se discutirá en el congreso federal. El pasado 25 de febrero ya se registró la parte económica de este documento congresual y el próximo 25 de marzo, en un acto que tendrá lugar en el pabellón de la ONCE de Madrid, se hará lo propio con las propuestas políticas.
Del respaldo que obtenga Díaz el próximo día 26 y de la fuerza que evidencie su proyecto en el resto de España dependerá la continuidad de la candidatura de López, quien se ha mostrado partidario de seguir adelante en cualquier circunstancia. No obstante, quien fuera secretario general de los socialistas vascos y presidente del Congreso de los Diputados con Pedro Sánchez, podría reconsiderar su postura a tenor de las voces que alertan sobre la escisión del PSOE si el ex secretario general de los socialistas y último candidato a la Presidencia del Gobierno perdiese el congreso.
Frente a Susana Díaz, que se ha mostrado partidaria de alcanzar acuerdos de Gobierno con el PP y gobierna en Andalucía con el apoyo de Ciudadanos –el partido de Albert Rivera ya ha anunciado que sin Susana Díaz renegociará el pacto autonómico–, López ha planteado en su programa la posibilidad de consultar a las bases, primarias a doble vuelta y rechazo total a pactar con el PP. En relación a la cuestión catalana, López propugna un Estado federal y un nuevo estatuto de autonomía para Cataluña, matizando que «la voluntad de la ciudadanía catalana se expresaría así mediante dos votaciones: con el resto de los españoles en la reforma constitucional, y en el referéndum propio para la aprobación del nuevo estatuto».
La candidatura de Díaz ha sido acogida con entusiasmo en el PP de Andalucía, donde interpretan que tienen mayores posibilidades de desbancar en la comunidad a los socialistas con un candidato con menos carisma que la actual presidenta de la Junta. La comunidad ha sido considerada el bastión del PSOE en España y el granero de votos socialistas después de casi cuatro décadas de hegemonía en la región.