Por LUCÍA MARTÍN
UP: Marvel
Cuando los cómics eran un producto en decadencia, la americana Marvel supo darle la vuelta a su negocio de tal forma que los personajes de papel
se han materializado en exitosos personajes de cine.
DOWN: Mattel
Las ventas de la mítica Barbie cayeron un 21% hasta finales de septiembre de 2014. Su fabricante busca un nuevo modelo de negocio para un icono del siglo XX.
Probablemente la unión de las fuerzas de Spiderman, el más rentable, Capitán América, Ironman, Hulk o Thor hayan tenido algo que ver en el resurgir de la firma, aunque seguramente, la diversificación del negocio sea la principal razón del éxito. La americana ha sabido dar el salto desde el papel no solo al cine, sino a los videojuegos, las figuras de colección y otros artículos de merchandising que enloquecen a los fans.
Marvel Comics fue fundada por Martin Goodman en 1939, con el nombre de Timely Publications. Publicó su primer cómic en octubre de ese mismo año y también de esa época es otro de sus héroes más populares, el Capitán América. En los 60 llegarían Los 4 Fantásticos y otro best seller para la compañía, El Asombroso Hombre Araña. En los 70 el mercado del cómic volvió a entrar en recesión: Marvel intentó comprar a su competidora de entonces, DC, pero el acuerdo no cuajó. A finales de esa década, el equipo creativo crearía otro gran éxito, X-Men y en los 80 adquirió un estudio de animación con el que empezó a producir series para televisión. Tras pasar por diversas manos, la empresa empezaría a cotizar en Bolsa a finales de los 80.
La década de los 90 supuso un resurgir del cómic en EEUU y en Europa, por lo que las cifras de Marvel iban viento en popa. En esta época se concedieron licencias a diferentes estudios de cine para producir películas con héroes como Spiderman o X-Men, lo que también supuso un balón de oxígeno para las cuentas.
En la siguiente década Marvel escapó a la bancarrota y supo adaptar sus historias a nuevos lectores, sin por ello renunciar a los rasgos característicos de sus personajes. Además, en 2007 lanzaron la Marvel Digital Comics Unlimited, un archivo digital de más de 2.000 cómics disponibles para su visualización a través de suscripciones. A mediados de 2009 fue adquirida por Walt Disney, por 4.000 millones de dólares. A lo largo de su historia han creado más de 5.000 personajes, que forman parte del imaginario de distintas generaciones.
Pero, sin duda, la adaptación al cine de sus personajes ha sido uno de sus mayores aciertos. Si atendemos a los datos de taquilla, la sociedad admira más que nunca a los héroes.
En 2014, tres de las películas más taquilleras a nivel mundial son de Marvel: Capitán América es la cinta más taquillera, con casi 710 millones de dólares recaudados. Le sigue Spiderman (cerca de 700 millones) y X-Men (supera los 500 millones). Entre 2015 Y 2019 verán la luz diez nuevos filmes de héroes clásicos como el Capitán América, Thor y Los Vengadores, y también nuevos personajes, como Black Panther.
De pequeñas, estaban las niñas a las que les gustaban las Barbies. Y luego estaba el otro grupo, el de las que no. Fueses seguidora o detractora, lo cierto es que la estilizada rubia llegada de USA no dejaba indiferente.
Su presentación oficial tuvo lugar en 1959 en Nueva York, y solo en el año de lanzamiento se vendieron más de 350.000 unidades. A partir de entonces, la muñeca se convierte en un icono: en 1977, el 90% de las niñas americanas de entre 5 y 10 años tenía, al menos, una Barbie. En 1978 la muñeca llegaría al mercado español. En 1998 se habían vendido más de mil millones de unidades en todo el mundo.
En estos 55 años hemos visto a la Barbie astronauta, cirujana, informática… Siempre muy unida al mundo de la moda: el propio juguete ha sufrido pequeños cambios en su estética, para ir adaptándose al concepto de belleza de cada época. Pero, ¿cómo adaptarse a ese concepto cambiante sin traicionar el modelo original de rubia, estilizada, de medidas perfectas?
Lo cierto es que aunque sigue siendo una de las muñecas más vendidas, el declive empezó hace tiempo y son varias las explicaciones. Por ejemplo, las críticas a la imagen que proyecta: en 2006, un estudio de la Universidad de Sussex ponía de manifiesto que las niñas que jugaban con Barbie tenían una estima hacia su cuerpo menor que las que no jugaban. Según otro informe, de la Universidad de Oregón, la Barbie hacía que las niñas pensasen que podían hacer menos cosas que los niños. Por si fuera poco, en 2001 llegaron las Bratz, cuatro amigas de diferentes etnias, maquilladas como puertas y ligeras de ropa. En 2004, Mattel denunció a MGA argumentado que el creador de las Bratz, quien había trabajado para ellos previamente, les había robado la idea (al final Mattel tuvo que pagarles 225 millones de euros por falsa demanda).
Según medios estadounidenses, se está preparando una película sobre Barbie, escrita por uno de los guionistas de Sex and the City. En la cinta, Barbie se serviría de todo lo aprendido a través de sus múltiples profesiones para hacer que la vida de las personas sea mejor. Habrá que ver si el mensaje happy consigue reactivar las ventas.