Por Ores Lario
27/11/2016
Baobab, cúrcuma, camu camu, té matcha, bayas de goji, galgas de Lago, maca… Para muchos estas palabras serán completamente nuevas. Para otros, en cambio, parte de su día a día. Engrosan la lista de los denominados superalimentos, un término de moda que lleva tiempo acaparando la atención de los medios y las redes sociales y que se refiere a aquellos alimentos cuyo valor nutricional los hace interesantes para nuestro organismo por su alta concentración de antioxidantes, grasas saludables o vitaminas. También eliminan tóxicos, contribuyen a reducir enfermedades y combaten el envejecimiento.
No son mágicos, pero ayudan a nuestra dieta ya que hoy, más que nunca, somos lo que comemos. “Cada vez más gente se une a la corriente de salud natural. El movimiento de comida sana y ecológica está tomando paso a paso los supermercados y restaurantes en muchas ciudades de occidente. A pesar de los grandes problemas de esta civilización, se puede ver un claro progreso en el ámbito de la salud. Estamos descubriendo la manera de añadir una nueva clase de alimentos que nos benefician al máximo, que tienen más valor nutricional que otros en el planeta: los superalimentos”, explica la mexicana Beatriz Larrea. Es nutricionista profesional y experta en este campo, con certificado de estudios en nutrición basada en plantas en la Universidad de Cornell. “Incorporar los superalimentos en nuestra dieta es ahora más importante que nunca, ya que nuestro cuerpo está siendo constantemente invadido por radicales libres y comida que contribuye a los altos índices de obesidad, diabetes, enfermedades vasculares, cáncer y Alzéhimer”, asegura Larrea. Esta experta en nutrición holística utiliza las redes sociales para enseñar a comer mejor.
Carla Zaplana, nutricionista y coach de salud los zumos detox (como los que pusieron de moda Megan Fox, Oprah Winfrey o Gwyneth Paltrow) también usa su blog y las redes sociales para compartir sus conocimientos sobre nutrición y difundir su filosofía Come Limpio. La dietista recomienda “incluir los superalimentos a diario, en cada uno de nuestros platos. Especialmente los vegetales de hoja verde, como lechugas, espinacas, acelgas, coles, que se pueden tomar crudos, en zumos, batidos o liofilizados”, apunta la también autora del libro Superfoods (Ed. Planeta). En el mundo editorial, el interés por este tipo de nutrición engrosa los catálogos con otros títulos como Superalimentos (Ed. Lunwerg) o Super alimentos para vivir más y mejor (Ed. RBA).
¿Estamos hablando de un término de moda o realmente son medicinas capaces de curar dolencias? Según Cristina Morillo Barco, nutricionista del seguro digital Blua de Sanitas “los numerosos estudios en los que se ha intentado explorar las propiedades beneficiosas para la salud de diversos alimentos, parecen avalar la existencia de determinados superalimentos y se ha demostrado que los nutrientes que contienen poseen diversas propiedades beneficiosas para la salud. No obstante, desde una perspectiva más objetiva, existen dificultades a la hora de aplicar los resultados de esos estudios a dietas reales. Esto se debe a que las condiciones en las que se estudian los alimentos en los laboratorios suelen diferir de la manera en la que son consumidos en la vida cotidiana”, explica la especialista que prefiere disfrutarlos en forma de alimentos y no como complementos alimenticios. Como ella, los expertos recomiendan consumirlos crudos o con la menor cocción posible, para que mantengan sus propiedades intactas y se absorban mejor.
Dentro de esta tendencia, hay alimentos exóticos que se usan ahora en las dietas, como el baobab de África, que contiene seis veces más vitamina C que la naranja y es muy rico en fibra soluble, potasio y magnesio; el camu camu del Amazonas, otro de los alimentos más ricos en vitamina C; las setas shiitake, fortalecedoras del sistema inmunológico, o las setas reishi, regeneradoras de tejidos, que ayudan a combatir el estrés y previenen infecciones. Es el superalimento de moda entre las famosas, como Kim Kardashian, que confía en sus beneficios antioxidantes para mantener una piel luminosa y tersa.
Pero más allá de estas propuestas, los expertos apuestan por consumir alimentos de proximidad, como frutos secos, legumbres en todas sus variantes, setas locales o cítricos. Zaplana considera vital “promocionar los alimentos autóctonos, los que encontramos cerca, como la jalea real, el propóleo, el polen de abeja, las moras, los arándanos o las frambuesas, por ejemplo”.
Para Larrea, su superalimento preferido es el cacao, “ya que proporciona muchos antioxidantes, magnesio, calcio y además ayuda en la producción de serotonina. Sabe delicioso y es el alimento con más antioxidantes del mundo. Recomiendo el polvo de cacao para añadirlo a los batidos o hacer avena de chocolate”.
Incorporar estos alimentos dentro de una dieta equilibrada es beneficioso tanto a nivel físico como emocional. Para elaborar una lista con los mejores hay que tener en cuenta las necesidades de cada persona. Según la empresa americana UnitedHealth Group, la más importante del sector de seguros y atención administrada según Fortune, si se busca mejorar la salud y combatir las enfermedades, conviene tomar de forma regular aguacates, manzanas, bayas, brócoli, salmón, legumbres, champiñones, nueces, almendras, linaza y granadas.