Space Invaders no es un videojuego muy popular, pero ha resultado de mucha utilidad en los niños y adolescentes con dislexia
Los videojuegos han sido ferozmente criticados por ser adictivos. Pero recientes investigaciones están encontrando aspectos positivos en su práctica. El más reciente, que usó Space Invaders, demostró que puede ayudar a los niños con dislexia.
Pedagogos, pediatras, docentes y padres se preocupan por las horas que sus hijos pasan frente a las pantallas jugando. Pero en ese tiempo, imágenes y sonidos, para bien o para mal, estimulan el cerebro. Los científicos han descubierto, que en especial con los juegos de video, bien manejados, pueden ser beneficiosos.
En especial los videojuegos de acción. Con sus frenéticos desafíos y estímulos visuales, son como gimnasios para el cerebro. Al exigir una alta concentración y una rápida toma de decisiones, fortalecen conexiones neuronales clave involucradas en la atención, la memoria y el procesamiento de información.
Estudios recientes sugieren que pueden mejorar significativamente la capacidad de los niños para leer y comprender textos. Lo que representa una esperanza para millones de niños que luchan contra la dislexia. Afección neurológica genética que dificulta el procesamiento de las palabras. Es considerado un trastorno del aprendizaje que afecta la lectura y la escritura.
La dislexia se caracteriza por dificultades en el procesamiento fonológico y la atención visual. Los videojuegos de acción, al entrenar precisamente esas habilidades, podrían ayudar a las personas con dislexia a mejorar su capacidad lectora. Como los juegos de video de acción exigen una constante atención a los detalles visuales, mejoran la capacidad de rastrear palabras y letras en una página.
Además, la rapidez con la que se suceden los eventos obliga al cerebro a procesar información de manera eficiente. Fundamental para la comprensión lectora. Los videojuegos de acción también son altamente motivadores y ayudan a mantener los niños y adolescentes con dislexia comprometidos con el proceso de aprendizaje.
Prueba con Space Invaders Extreme 2
Space Invaders Extreme 2 es un videojuego en el que el jugador debe utilizar armas para destruir alienígenas que atacan la Tierra. Según un estudio, publicado en Nature, demostró ser eficaz en la mejora de la capacidad de percepción de palabras y sonidos hablados en niños con riesgo de dislexia evolutiva. Aunque puede parecer improbable, estudios previos demostraron que los videojuegos que requieren rápidas habilidades cognitivas y motoras, como los de acción, activan las áreas del cerebro responsables de la atención y el procesamiento de la memoria.
Para el estudio, 79 niños prelectores con antecedentes familiares de dislexia fueron sometidos a varias pruebas lingüísticas. Incluida la identificación de diferencias en palabras inventadas. Algo complejo para quienes padecen esta condición. Los niños fueron divididos en cuatro grupos. Uno jugó a Space Invaders Extreme 2. El segundo a un videojuego sin acción. Un tercero recibió logopedia (el tratamiento habitual para trastornos del lenguaje en Italia, donde se llevó a cabo el estudio). El cuarto grupo no recibió ninguna intervención.
Los niños, por mes y medio, jugaron cuatro veces por semana durante 45 minutos cada uno. Los que recibieron logopedia asistieron a sesiones de 45 minutos dos veces por semana durante cuatro meses.
Los resultados fueron sorprendentes. Más del 80% de los jugadores de Space Invaders Extreme 2 mostraron mejoras significativas en la tarea de identificación de palabras. Superaron a los otros tres grupos.
Mejora el procesamiento fonológico
El hallazgo sugiere que los videojuegos de acción pueden ser una herramienta eficaz en el tratamiento de la dislexia evolutiva. Los resultados del estudio revelaron el significativo efecto del entrenamiento con videojuegos de acción en la mejora de las habilidades de procesamiento fonológico en niños con riesgo de dislexia.
Los participantes que jugaron a Space Invaders Extreme 2 mostraron un incremento sustancial en su capacidad para discriminar entre fonemas. Superaron de manera solvente a los grupos control y a los que recibieron terapia del habla tradicional.
Los investigadores creen que la estimulación cognitiva proporcionada por los videojuegos de acción puede potenciar la plasticidad cerebral. Facilitando la adquisición de habilidades lingüísticas en niños con dificultades en este ámbito.
Aunque los resultados del estudio son prometedores, es importante destacar que las mejoras observadas se limitaron a una tarea específica de procesamiento fonológico. Por lo cual se infiere que los mecanismos subyacentes a estos beneficios podrían ser más específicos de lo que inicialmente se pensaba.
Una posible explicación es que la tarea de identificación de palabras en Space Invaders Extreme 2 requiera una atención focalizada y una discriminación auditiva muy precisas.
Habilidades que podrían verse particularmente beneficiadas por la práctica intensiva en videojuegos de acción. Sin embargo, se necesitan estudios adicionales para confirmar esta hipótesis y explorar los límites de esta intervención.
El entorno social de los videojuegos también puede desempeñar un papel en el aprendizaje. Jugar en grupo o interactuar en línea puede fomentar habilidades interpersonales y de comunicación. Fundamentales en el desarrollo integral de un niño. La combinación de desafíos visuales y auditivos con una experiencia social crean un entorno que sumerge al jugador en un proceso de aprendizaje dinámico.
Estímulo de procesos cognitivos
Los investigadores aún no comprenden completamente por qué los videojuegos de acción, como Space Invaders Extreme 2, mejoran específicamente la capacidad de percepción de palabras y sonidos hablados en niños con riesgo de dislexia evolutiva. Ya que no se observaron mejoras significativas en otras pruebas lingüísticas.
El neurocientífico Simone Gori de la Universidad de Bérgamo (Italia) piensa que el enfoque en pequeñas funciones cognitivas podría ser una estrategia efectiva para abordar aspectos de la dislexia. Antes de que los niños pierdan plasticidad cerebral y se desarrollen por completo.
Si bien el estudio se centra en un videojuego específico, la idea es que la mecánica de juego activa y acelerada puede estimular procesos cognitivos esenciales. Los investigadores están explorando cómo los elementos de diseño de los videojuegos pueden aprovecharse para abordar desafíos cognitivos. Especialmente en niños con dislexia.
El interés en la relación entre los videojuegos y las mejoras en las habilidades lingüísticas ha aumentado en los ámbitos educativo y clínico. El impacto de los videojuegos de acción en la atención y la percepción no es un fenómeno nuevo.
Investigaciones anteriores demostraron que los jugadores tienden a desarrollar una atención selectiva más refinada y una mejor capacidad para procesar información visual. Para los investigadores si los videojuegos, se utilizan de manera estructurada y con objetivos educativos claros, pueden ser herramientas útiles para el aprendizaje.
Estudios incipientes
Un estudio publicado en JAMA Network Open en 2022 analizó los datos del estudio en curso de desarrollo cognitivo y cerebral del adolescente que incluyó a alrededor de 2.000 niños. Descubrió que quienes usaban los videojuegos por tres horas diarias o más obtuvieron mejores resultados en pruebas de habilidades cognitivas relacionadas con el control de impulsos y la memoria funcional.
Si bien Space Invaders Extreme 2 demostró ser útil, la clave está en adaptar y personalizar los enfoques basándose en los intereses y necesidades específicas de cada niño. Resulta prematuro extender los resultados obtenidos en estos estudios a otros tipos de videojuegos y poblaciones. Hay que investigar los mecanismos neurocognitivos subyacentes a los beneficios
Futuras investigaciones deben explorar cómo otros géneros de videojuegos (como los de rol o de estrategia) pueden influir en potenciar habilidades cognitivas relacionadas con la dislexia y diseñar intervenciones más precisas y personalizadas.
La integración de la tecnología en la educación representa una oportunidad única para transformar desafíos en habilidades. Al ofrecer otras vías para que los niños con dislexia superen barreras. Los resultados preliminares son alentadores. Se trata de un primer paso en una línea de investigación emergente. Se necesitan más estudios para confirmar los hallazgos y comprender mejor los mecanismos implicados.