«En salud, ustedes mandan, pero no saben». Este es el título de un documento que 55 sociedades científicas de España, que representan a más de 170.000 profesionales sanitarios, avalaron y que va dirigido a los políticos. Con el texto dejan clara su exigencia: no basarse en enfrentamientos partidistas para hacerle frente a la pandemia de la COVID-19.
En el documento predomina una premisa: se requiere una respuesta coordinada, equilibrada y con base únicamente en criterios científicos claros, comunes y transparentes.
La publicación ha despertado el debate. Pedro Gullón, vocal de la Sociedad Española de Epidemiología y quien no suscribe el documento, apunta que hay una lucha de evidencias. “El campo de la economía busca resultados que son distintos a los del campo de la salud y ahí puede haber una contradicción. Los políticos tienen que encargarse de encontrar el equilibrio que mejor encaja”.
La salud y el manejo de los políticos
Los gobernantes son quienes tienen la última palabra sobre cómo debe llevarse el equilibrio entre proteger la salud de la población y mantener estable la economía; todo mientras el virus sigue circulando por el mundo. Son ellos quienes dictan las directrices y deberían hacerlo con base en los criterios técnicos adecuados, señala el documento.
Cuestionan que se hayan impuesto medidas dictadas por tácticas partidistas en lugar de tomar en cuenta la evidencia médica disponible.
Hasta el viernes 2 de octubre, España alcanzó los 32.086 fallecidos y los 789.932 contagiados desde que empezó la pandemia, de acuerdo con el Ministerio de Sanidad. Este fin de semana Madrid se despertó en su primer día de confinamiento parcial, con las autoridades policías controlando las entradas y salidas de la capital española.
Este cuarentena de dos semanas que impuso el gobierno nacional afecta aproximadamente a 4,8 millones de personas. Cualquier desplazamiento no esencial está prohibido tanto dentro como fuera de la ciudad y en nueve de sus suburbios.
Pedro Sánchez, presidente del gobierno, aseguró que estas medidas eran «críticas» para poder frenar el repunte de casos. Indicó que se quiere evitar el mismo escenario de marzo y abril, cuando los hospitales estuvieron desbordados de pacientes.
Sin embargo, estas nuevas medidas han desatado un enfrentamiento político importante, justamente el que señalan los firmantes de «En salud, ustedes mandan, pero no saben«.
Isabel Díaz Ayuso, quien preside el gobierno de Madrid y es miembro del Partido Popular, aceptó la aplicación de las restricciones, pero presentó un recurso para anularlas ante la Audiencia Nacional. Ayuso y consejeros regionales afirman que estas nuevas restricciones provocarían un caos y atentarían contra una ya debilitada economía; además de implicar la violación de su jurisdicción como autoridad local.
Este enfrentamiento de posiciones ha puesto sobre la mesa justamente el debate de que más que la salud pública, prela más una visión de intereses políticos.
La importancia de las autoridades sanitarias en la gestión
«Solo las autoridades sanitarias, sin ninguna injerencia política» son las que deben establecer prioridades respecto a la actuación ante enfermedades, señalan las 55 sociedades que avalan el documento.
Apuntan también hacia el correcto manejo de los recursos sanitarios . Aseguran que esto solo se consigue a través del conocimiento «profundo» de las ciencias de la salud, unido a un verdadero compromiso de aumentar los recursos de investigación. Los nuestros son muy inferiores a los países del entorno».
Los profesionales sanitarios piden un encuentro con las autoridades para establecer el papel que ellos pueden tener en la gestión de la pandemia de la COVID-19.
La toma de decisiones
Desde que empezó la crisis por la pandemia se tomaron decisiones que fueron cambiando con su evolución. Muchas de ellas atadas al surgimiento de variados descubrimientos, por tratarse de un virus nuevo y totalmente desconocido.
Tras una primera ola de contagios, algunos expertos cuestionan que no se ha aprendido de los resultados que han dejado estas medidas. José Miguel Cisneros, expresidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, reflexionó sal respecto en una entrevista para la revista The Lancet.
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«España ha sido la primera en la primera ola y la primera en la segunda. No hemos parendido por falta de evaluación, no se ha hecho autocrítica ni se ha usado la evidencia disponible y esto es lo que reclamamos» en el manifiesto.
«En nombre de más de 47 millones de españoles, ustedes y sus familias incluidos, tenemos que cambiar ya tanta inconsistencia política, profesional y humana». Así lo piden los firmantes, quienes concluyen ofreciendo sus conocimientos para integrarlos en «todos los ámbitos de la salud». Esperan su colaboración en la gestión de la pandemia.
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