Por: Pedro Luis Rueda
10/12/2016
Nuevamente Sergio Ramos le dio al Real Madrid una alegría en su “zona de confort” al ataque, después de los 90 minutos de juego.
Una semana después de haber empatado con un gol de cabeza en el Camp Nou un partido que parecía ser del Barcelona, el capitán merengue sacó su fortaleza en el área para culminar la misma jugada de hace siete días y darle la victoria este sábado 3-2 a su equipo contra el Deportivo La Coruña.
El Madrid se fue arriba con gol de Morata a los 50’, pero el «Súper dépor» en dos minutos volteó el partido apegándose a “la ley del ex”. Joselu con dos tantos (63’ y 65’) silenció al Bernabéu que durante minutos empezó a sentir lo que es perder el invicto.
Pero Zidane empezó a mover sus piezas y colocó en una apuesta ambiciosa al dominicano Mariano a los 73’ por Isco. El delantero no le falló y empató el partido 11 minutos después.
Con el invicto salvado por momentos, el Real Madrid quería más. Sabía que el Barcelona ganó con autoridad al Osasuna y se fue al área del «Dépor» a buscar la victoria.
Entró Marcelo a los 81’ por Danilo y envió el mensaje de Zidane a la defensa: “Línea de tres”. Todo para que Sergio Ramos vaya al frente a buscar otro tanto salvador.
Al “Dépor” se le vino toda la maquinaria merengue encima y no sabía qué hacer con su “Fuerza Aérea” dominada por el capitán.
La jugada que le dio el empate al Madrid en El Clásico, fue aplicada esta vez en un córner. Lucas Vásquez hizo la cortina para que Ramos se escabullera, perdiera la marca y quedará sólo para cabecear con potencia un perfecto córner de Toni Kroos, a quien fue el primero en abrazar en la celebración.
El Madrid ahora se irá al Mundial de Clubes en Japón con la ventaja de seis puntos en el liderato y con la tranquilidad de que terminará el año líder.