Por Andrés Tovar
18/04/2018
La selva de Colombia ahora tiene los mismos derechos legales que un ser humano. El más alto tribunal de Colombia ordenó al gobierno proteger el Amazonas y lo reconoce como una «entidad sujeta a derecho«. Por consiguiente, se trata de un precedente en la conservación del medio ambiente. No sólo por el otorgamiento de derechos a la selva de Colombia. Sino porque además es primer caso de una demanda por el cambio climático en América Latina. Y especialmente relevante, el caso fue presentado por 25 jóvenes de edades comprendidas entre 7 y 26 años.
Parecía una posibilidad remota cuando los 25 jóvenes demandaron al gobierno por la protección de la selva de Colombia. Los cargos parecían demasiado ambiciosos y la degradación ambiental se ha acelerado en el país en los últimos años. Sin embargo, después de escuchar el caso, la Corte Suprema del país falló a favor de los niños y ahora el gobierno debe elaborar un plan de acción para detener la deforestación en la Amazonía y escalar su lucha contra el cambio climático, según el grupo de derechos humanos colombiano Dejusticia, que apoyó la moción. Tras la decisión, los jueces dijeron que el bosque es una «entidad sujeta a derechos», que esencialmente confiere derechos humanos al vasto y variado ecosistema.
«Esta es una decisión histórica tanto a nivel nacional como internacional», dijo en un comunicado César Rodríguez Garavito, director de Dejusticia y el abogado que representa a los demandantes. «A nivel nacional, reconoce categóricamente que las generaciones futuras están sujetas a derechos. Y ordena al gobierno tomar medidas concretas para proteger el país y el planeta en el que vive».
El precedente histórico de la selva de Colombia
La decisión de la Corte Suprema sobre los derechos humanos de la selva de Colombia emplaza a los ministerios ambientales y agrícolas de los gobiernos nacionales y locales a que participen en este proyecto, informa Reuters. El resultado del caso podría repercutir en todo el mundo. Una serie de casos, en su mayoría dirigidos por jóvenes, están despegando en muchos otros países. Casos que pueden verse reforzados por los acuerdos internacionales. Las actividades de protección de la selva de Colombia cuentan con el apoyo del gobierno de Noruega como respaldo financiero.
Ambos países están en proceso de extender un acuerdo con Colombia por cinco años hasta el año 2025, según el cual Colombia recibe pagos por cumplir los objetivos verificados para reducir las emisiones al frenar la deforestación. Colombia recibirá hasta $ 50 millones por año hasta el 2025 en virtud del acuerdo. Los pagos generalmente se distribuyen a los agricultores. Asimismo, entre los grupos comunitarios e indígenas y a las autoridades ambientales locales que trabajan en la protección forestal.
Cabe destacar que Colombia agregó el pasado 11 de abril unas 8 millones de hectáreas a sus áreas protegidas en un esfuerzo por frenar la pérdida de bosques. Las nuevas medidas anunciadas el martes por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, apuntan a crear una zona de amortiguamiento para la región amazónica del sur del país. Esto eleva el área total de bosques protegidos en Colombia a casi 40 millones de hectáreas.