Por Carolina Nieto
08/02/2017
La cifra de mujeres dedicadas al campo de la investigación apenas ha variado unas décimas en los últimos diez años. Y es que desde 2009, el porcentaje no ha superado el 39%, un dato que, sin embargo, supera la media de la Unión Europea en seis puntos.
Según el informe Científicas en Cifras 2015, presentado ayer por la secretaria de Estado de I+D+i, Carmen Vela, y por la directora de Unidad de Mujeres y Ciencia, Ana Puy, a medida que aumenta el rango laboral, la representación femenina es menor.
El estudio analiza los datos desde varios enfoques. Por sectores, el porcentaje de investigadoras en la Administración Pública llega al 46% mientras que desciende en la Enseñanza Superior, donde se ubica un 42% y en el sector empresarial, que alcanza al 31%. Por comunidades autónomas, la representación de las mujeres científicas se sitúa, de media, en torno al 40%. Bien es cierto que en Baleares y La Rioja este porcentaje alcanza el 45%. Sin embargo, según ha remarcado la secretaria de Estado, “estamos hablando de pocas mujeres” en dos autonomías muy pequeñas.
Asimismo, si se analiza el número de mujeres y hombres matriculados en grados en universidades públicas, se observa que el porcentaje femenino es superior al masculino, con un 54% frente a un 46% en el caso de los hombres. Lo mismo ocurre en el ámbito del máster universitario, en el cual el porcentaje es todavía mayor, con un 58% de mujeres que supera el 42% masculino.
Según estos datos, también es destacable que la brecha existente entre centros públicos y privados en cuanto a cargos de dirección y cátedras. El 79% de los cargos de alta responsabilidad están ocupados por hombres y solo un 21% de las mujeres tienen acceso. En el caso de las universidades privadas esta distancia no es tan grande, aunque siguen superando en cifras el género masculino con un 57% frente a un 43% femenino.
Además, dentro de los órganos de gobierno esta separación es definitiva. Y es que en 2015 solo existía una rectora en todo el país y se encontraba en la Universidad de Granada. A ella se le han sumado la Universidad Autónoma de Barcelona y la del País Vasco.
Para atajar este problema es necesario un cambio en la sociedad que, como señaló Vela en una comparecencia pública, “hay que abordar desde muchos puntos de vista”. La secretaria de Estado destacó que “mientras las mujeres sigan dedicando tres o cuatro veces más al cuidado de la casa que los hombres», esto implicará que ese sea un tiempo «que no puedan dedicar a su cuidado personal o profesional”. Después de presentar este informe, Carmen Vela reconoció que se debe trabajar para “llegar al equilibrio” porque “es cierto que los avances se están dando a una velocidad muy lenta y algo hay que hacer”.