Por Cambio 16 | Efe
18/10/2016
El último paso que falta para activar el referendo revocatorio contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sufrió un cambio que la oposición no previó y que podría poner más cuesta arriba el objetivo que se trazó para este año.
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) sentenció que la recolección del 20% de las firmas para solicitar la activación del proceso, no se basará en el total de electores inscritos en todo el país, sino por estado.
Esto significa que si el total de los votantes de uno de los 24 estados no logra alcanzar el 20%, el Consejo Nacional Electoral (CNE) tiene el poder para declarar sin lugar la solicitud de referendo sin importar la cantidad de firmas que se recojan en el resto de la nación.
El secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba, rechazó la sentencia porque el único paso “necesario para convocar al referendo revocatorio es reunir al menos el 20 por ciento del padrón electoral” de todo el país, independientemente de los resultados en cada estado.
De acuerdo con las normas para la solicitud de Referendos Revocatorios de publicada en la Gaceta Oficial del país en 2007, “transcurrida la mitad del periodo para el cual fue elegido popularmente el funcionario podrá solicitar la convocatoria de referendo revocatorio de su mandato, un número no menor del 20% de los electores y electoras inscritos en el Registro Electoral para el momento de la solicitud en la respectiva circunscripción”, se extrae del reglamento.
La oposición sostiene que el 20% de apoyo debe ser recogido en todo el país porque Maduro fue electo por votantes de toda Venezuela, sin distinguir los resultados de los estados.
La decisión del TSJ avala lo dicho por el CNE y responde a un recurso de interpretación que introdujo una semana antes Erick Ramírez, un alcalde del estado central de Aragua que llegó al poder en 2013 apoyado por el Partido de Gobierno (PSUV).
El Tribunal argumenta que “la recolección de las manifestaciones de voluntad (firmas) no constituye en ningún caso, por consiguiente, ni una consulta, ni un referendo, ni un plebiscito”, por lo que, “no puede ni debe confundirse con el referéndum en estricto sentido, en el cual sí participa la totalidad del padrón electoral».
Los próximos 26, 27 y 28 de octubre tendrá lugar en los centros electorales designados por el CNE el proceso de recolección y la oposición advirtió que desobedecerá el dictamen hecho por el TSJ “porque está en contra de la Constitución”.