«Que los que tienen más, paguen más«. El leit motiv de Podemos en sus programas electorales y en sus acuerdos de gobierno volvió a colocarse sobre la mesa. Pedro Sánchez y Pablo Iglesias debaten llevar al Congreso de los Diputados una subida del IRPF para las rentas altas y para el rendimiento de capitales.
La iniciativa de alcanzar una «fiscalidad progresiva» ya estaba en el acuerdo de coalición. Y antes de eso, formaba parte de la oferta del partido morado a sus electores. Ahora, con la necesidad de enfrentar la crisis del coronavirus, el Gobierno tiene una nueva justificación para volver sobre el tema.
Una vieja aspiración
El impuesto a los más ricos es una iniciativa que el partido morado lleva años defendiendo en sus programas electorales. En su oferta las votaciones generales de noviembre, planteaba “crear un impuesto para las grandes fortunas con el fin de recaudar un 1% del PIB de patrimonios superiores a 1 millón de euros y de forma progresiva”.
En la alianza, la propuesta contemplaba elevar el IRPF en 2% para los contribuyentes que tengan rentas superiores a 130.000 euros (afectaría a 80.000 contribuyentes, un 0,4% del total) y 4% para las que excedan de 300.000.
El tipo estatal sobre las rentas de capital se incrementará en 4 puntos porcentuales para rentas superiores a 140.000 euros. También se contempla una tributación mínima del 15% en el Impuesto de Sociedades de las grandes corporaciones, que se ampliaría hasta el 18% para las entidades financieras y empresas de hidrocarburos.
Dentro de sus medidas para el «aumento de la progresividad del sistema fiscal», además se planteaba rebajar del 25% al 23% la tributación de las pymes que facturen menos de un millón de euros. Esta última medida tendría un coste de 260 millones.
“Este impuesto sustituirá el actual impuesto sobre el patrimonio, que es inoperativo, y no podrá bonificarse por parte de las comunidades autónomas”, anotaba Podemos en su propuesta.
En búsqueda de aprobación
En esta oportunidad, la iniciativa parlamentaria para subir el IRPF a las rentas altas la llevaría Unidas Podemos en la Comisión de Reconstrucción tras la crisis de la COVID-19, que se inició este jueves, y tendría el apoyo del PSOE, según afirmó el diario El Confidencial. Para lograr la aprobación, deberán negociar con el resto de grupos, porque no disponen de mayoría absoluta.
Por otra parte, también podrían llevar a la Comisión el impuesto a las grandes fortunas que reclamaba Podemos para gravar los patrimonios superiores a un millón de euros, de forma progresiva.
El presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, aseguró que había margen para el acuerdo.
Lea también:
Iglesias prefiere subir los impuestos y no bajar los gastos