El canciller de Rusia, Sergey Lavrov, pidió al Secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que se cumpla con el compromiso de separar en Alepo (Siria) a los combatientes armados (orientados hacia Washington) de los grupos terroristas.
Durante una llamada telefónica, Lavrov informó que los grupos armados ilegales, que mantienen el control de la parte oriental de Alepo, “realizaron nuevos ataques y dispararon contra los habitantes que intentaban abandonar la ciudad“, en medio de la pausa humanitaria propuesta por las autoridades sirias.
El 18 de octubre Rusia y Siria suspendieron los bombardeos y establecieron una pausa humanitaria de dos días para que civiles abandonaran esta parte de la ciudad.
Sin embargo, Lavrov denunció que los llamados grupos terroristas no dejaron que salieran los civiles, amenazándoles de muerte.
Washington ha manifestado su apoyo a la oposición que busca acabar con el régimen de Bashar al-Assad, pero ese Gobierno y Rusia denuncian que hay otros grupos aliados con Al Qaeda y el Estado Islámico que se han apoderado de varias zonas.
Por su parte, Kerry expresó su preocupación por la reanudación de los bombardeos y ataques terrestres del régimen (sirio) y Rusia al expirar la pausa contra posiciones de terroristas en el sur de Alepo.
De acuerdo con la ONU, 275.000 civiles permanecen atrapados en esa ciudad.
El vicecanciller ruso, Gennady Gatilov criticó al organismo por el trabajo de sus agencias durante la pausa humanitaria.
«Lamentablemente, hay que reconocer que durante los tres días del alto el fuego declarado, las agencias humanitarias de la ONU no aprovecharon la oportunidad de ayudar a los que estaban en necesidad de ser evacuados de Alepo,» según la agencia de noticias Interfax.