Los fabricantes de Roundup, uno de los herbicidas más utilizados en el mundo, deberán pagar 6,9 millones de dólares por violar un acuerdo con el estado de Nueva York, en el que se comprometía dejar de hacer afirmaciones falsas sobre la seguridad de su producto más vendido.
La suma se adiciona a los miles de millones de dólares que Bayer ha pagado para resolver demandas que afirman que Roundup, afecta a la salud y causa cáncer, entre otras enfermedades.
Bayer y Monsanto, que fue adquirida por el gigante agroquímico alemán por $ 63.000 millones en 2018, violó un acuerdo de 1996 con el estado de Nueva York. El convenimiento consistía en «cesar y desistir de inmediato» de hacer afirmaciones falsas y engañosas sobre los productos Roundup a base de glifosato.
Los estudios han relacionado el glifosato, el ingrediente activo de muchos productos Roundup con una amplia gama de efectos nocivos en polinizadores, animales de laboratorio y personas. En marzo, un primer estudio de este tipo relacionó Roundup con enfermedades hepáticas y metabólicas en niños.
Los fabricantes afirmaron reiteradamente que los productos Roundup -a base de glifosato- son seguros y no tóxicos sin la justificación adecuada, según determinó la fiscal general Letitia James en una investigación que comenzó hace tres años. James sostuvo que esas afirmaciones violaron un acuerdo previo alcanzado por el estado de Nueva York con Monsanto hace dos décadas. Allí, la empresa acordó dejar de hacer afirmaciones sin fundamento sobre la seguridad de los productos Roundup que contienen glifosato.
Fiscal de Nueva York denuncia a Roundup
“Los pesticidas pueden causar un daño grave a la salud de nuestro medio ambiente y representar una amenaza mortal para la vida silvestre. Incluidos los polinizadores y otras especies vitales para la agricultura”, señaló James. “Es esencial que las empresas de pesticidas, incluso las más poderosas, sean honestas con los consumidores. Sobre los peligros que representan sus productos para que puedan usarse de manera responsable”.
Bayer, que insiste en que Roundup es seguro de usar, dijo que estaba «complacido» de resolver el litigio con las autoridades de Nueva York. La compañía señaló que el reclamo legal del estado se centró en las prácticas publicitarias, no en los riesgos para la salud de los humanos. Además, “no hizo ningún hallazgo con respecto a la seguridad de los productos Roundup ni ninguna conclusión científica de que hayan causado daño al medio ambiente, a polinizadores o especies acuáticas”. La compañía indicó que la fiscal general se basó en estudios científicos obsoletos para presentar la demanda.
El glifosato ha sido objeto de escrutinio y debate científico durante años. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, con sede en Francia, lo clasificó como un «carcinógeno humano probable» en 2015. La agencia forma parte de la Organización Mundial de la Salud.
Mientras, la Agencia de Protección Ambiental de EE UU afirmó en 2020 que el herbicida no representaba un riesgo para la salud de las personas. Pero un tribunal federal de apelaciones en California ordenó el año pasado a la agencia que reexaminara ese fallo. Considera no esta respaldado por suficiente evidencia.
Los millones de dólares que Bayer y Monsanto pagarán a la oficina de la fiscal de Nueva York por las afirmaciones engañosas sobre Roundup se destinarán a remediar los impactos de las toxinas ambientales y de la contaminación sobre los insectos polinizadores y especies acuáticas.
Afirmaciones falsas y engañosas
La investigación descubrió enunciados de seguridad falsos o engañosos en múltiples plataformas y por parte de empleados de Bayer. Incluidas afirmaciones de que los ingredientes de los productos Roundup son menos tóxicos que el detergente para platos y el jabón.
“Una vez más, Monsanto y el actual propietario de la empresa, Bayer, hicieron afirmaciones falsas y engañosas sobre la seguridad de sus productos. Pero no permitiremos que se salgan con la suya poniendo en peligro nuestro medio ambiente”, insistió James. “Mi oficina garantizará que se respeten y cumplan nuestras leyes”.
El convenio cita al menos cinco ejemplos de videos en línea que afirman que los productos y herbicidas Roundup «no dañarán nada más que las malas hierbas». Los anuncios fueron retirados por los términos del acuerdo.
En un caso, el sitio web de Bayer afirmó que los productos Roundup a base de glifosato no tienen efectos adversos para las abejas melíferas ni representan una amenaza para la salud de la vida silvestre animal. “De hecho, el glifosato es una herramienta importante que puede ayudar a preservar el medio ambiente y la biodiversidad”, dijo el gigante químico. Bayer eliminó la página web, pero existe captura de Internet Archive, reseñó Inside Climate News.
La compañía también eliminó una página web que afirmaba que el glifosato permite a los agricultores reducir las prácticas de labranza. Y que protege el medioambiente para los insectos, las aves y la vida silvestre.
La fiscal señaló que Bayer tiene la intención de dejar de vender productos a base de glifosato en 2023. Como resultado de la resolución de demandas por valor de miles de millones de dólares que alegan que los productos causan cáncer en humanos.