Por Cambio16
23/07/2018
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, no siente como una amenaza electoral que el PP haya elegido a Pablo Casado para dirigir el partido y ha señalado que lo que tiene que hacer el nuevo líder popular es «no obsesionarse» con Ciudadanos.
Rivera, según ha dicho en una rueda de prensa en la sede de Alcalá al término de la reunión de la Ejecutiva permanente, cree que el relevo en el PP no trastocará los planes de crecimiento de su formación. Y recordó que Cs nació con tres escaños en el Parlamento de Cataluña. «Y hoy tenemos una media del 23 por ciento en las encuestas.
«Siempre que hemos pensado en nuestro proyecto nos ha ido bien» ha asegurado el líder del partido naranja. Por ende, enfatizó que, diferencia de Casado, no piensa «que el enemigo sea el PP sino los populismos y los nacionalismos».
Por consiguiente, afirmó, «seguramente Cs está creciendo. Porque le está plantando cara a todo eso».
Cree que «más allá del maquillaje» y del cambio de líderes, los conservadores y socialistas se han quedado sin respuestas para el siglo XXI. «Mientras que (Pedro) Sánchez tiene de socio a populistas y nacionalistas, el PP decía que el PNV era un socio preferente. Un partido serio. Y que Cs era el enemigo».
No ve ningún problema, según ha dicho, en volver a entenderse con el PP en Cataluña «si cambian de posición y vuelve donde está Ciudadanos».
Rivera opinó sobre algunas propuestas concretas de Casado. Entre ellas la de ilegalizar los partidos independentistas. «El nuevo líder del PP ya ha dicho al respecto varias cosas distintas. Pero sí se ha posicionado en contra de la reforma electoral que ha planteado. Lo cual prevé una prima a la fuerza más votada».