En una jornada titulada Low Carbon Day, dirigida fundamentalmente a analistas e inversores, Repsol presentó sus nuevos objetivos para convertirse en una compañía cero emisiones netas en el 2050. Sin embargo, causó sorpresa en el sector energético el apoyo mostrado por Repsol a la utilización del carbón para generar electricidad. Así como también del fuel en determinadas plantas térmicas de gas.
En la presentación de inicios de octubre, la multinacional anunció un incremento de los objetivos de generación renovable y de reducción de emisiones de la compañía. Asimismo, un aumento de la inversión en soluciones bajas en carbono para acelerar la transformación hasta 2030.
En un encuentro reciente, convocado por el PP, el director de estudios de la petrolera y gasista, Antonio Merino, se mostró partidario de utilizar carbón para generar electricidad. A la cita asistieron representantes de todas las empresas del sector, como Iberdrola, Endesa, EDP, Natury, Enagás, Repsol y la patronal eléctrica Aelec. Faltó REE, cuya presidenta es la exministra socialista Beatriz Corredor, reseña ABC.
La reunión tenía por objetivo analizar la crisis energética que atraviesa España por las fuertes subidas de los precios de la electricidad y del gas. Y las repercusiones que tendrá el cierre del gasoducto del Magreb en la seguridad de suministro de gas al país.
Antonio Merino culpó del encarecimiento de la electricidad a las subidas del mercado de CO2 y apuntó que si hubiera problemas con el gas, en muchas instalaciones se podría sustituir por fuel o diésel. Además, apostilló que se había hecho mal al cerrar las centrales de carbón.
Entretanto, los representantes de las eléctricas coincidieron en otra posición. Que el alza de la electricidad respondía básicamente a la subida de los precios internacionales del gas y que la solución es descarbonizar.
Repsol y su vínculo con el carbón y el fuel
Llamó la atención del sector energético las declaraciones del vocero de Repsol por varios motivos. El primero de ellos, que la petrolera presidida por Antonio Brufau presume desde hace meses de estar llevando un proceso de descarbonización que culminará en 2050 al alcanzar las cero emisiones.
Además, hace tiempo que en España no se genera electricidad de forma significativa con fuel, y muy poco con carbón. “Sería dar un paso adelante y dos hacia atrás”, afirmaron a ABC representantes del sector. E iría en contra de la hoja de ruta diseñada por el Gobierno y la Unión Europea hacia la transición energética.
En este sentido, el consejero delegado ejecutivo de la petrolera, Josu Jon Imaz, afirmó recientemente que la transición energética es “indispensable”. Pero “no una transición de cualquier manera”, debe ser “justa”. Así como “competitiva, eficiente y basada en las capacidades tecnológicas e industriales existentes” y “no una transición haciendo el canelo”. De igual forma, subrayó que, dados los altos precios del gas, muchas plantas de carbón de China y EE UU que podrían alimentarse con carbón y gas, están pasando del gas al carbón.
Recuerda la publicación que cuando Repsol adquirió a Viesgo, distintos activos en el verano de 2018, rechazó que se incluyera en el paquete las centrales térmicas de carbón de Puente Nuevo, en Córdoba (385 MW). Y la de Los Barrios, en Cádiz (590 MW). Y eso que esta planta cumple con la directiva europea de emisiones industriales y ha reducido sus emisiones de óxido de nitrógeno tras unas inversiones de casi 100 millones de euros.
La petrolera solo compró centrales hidroeléctricas, ciclos combinados de gas y una cartera de 750.000 clientes de electricidad por unos 735 millones de euros.
Impacto en el cambio climático
Dada las implicaciones del carbón en las metas globales por frenar el cambio climático, el tema fue abordado en la cumbre de Glasgow.
Previo al parecer expresado por Repsol y el uso del carbón, casi 200 naciones llegaron a un acuerdo en la COP26. Incluye por primera vez una referencia al papel de los combustibles fósiles en la crisis climática. Incluso después de una objeción de última hora de India que diluyó el lenguaje en torno a la reducción del uso de carbón.
El proceso de la COP ha intentado y fracasado durante años para incluir un reconocimiento de que la crisis climática ha sido causada por la quema de combustibles fósiles. El carbón es la principal fuente de gases de efecto invernadero y su eliminación fue una de las prioridades clave del presidente de la COP26, Alok Sharma.
Pero a pesar de ese progreso, el texto no refleja la urgencia expresada por científicos internacionales en su reporte climático «código rojo para la humanidad» publicado en agosto. Más bien, pospone más acciones para reducir las emisiones de combustibles fósiles hasta el próximo año. El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU dijo que el mundo necesita reducir a la mitad las emisiones durante la próxima década.
El gobierno del Reino Unido anunció mucho antes de la cumbre, que retirará el carbón de su «mix» para generar electricidad a partir del 1 de octubre de 2024. Un año antes de lo que había previsto hasta ahora.
Meses después, enfrentado al aumento de los precios del gas, el gobierno de Boris Jonhson, volvió a poner en marcha sus centrales eléctricas de carbón. Esto, para garantizar el suministro de electricidad en el país, lo que podría retardar sus esfuerzos para la transición energética.