El regreso a clases sería de valor terapéutico y emocional para los estudiantes, dice la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá. Destacó durante una entrevista en Catalunya Ràdio que la educación presencial es insustituible y pretende recuperarla en la medida de lo posible.
Considera que la interacción estudiantes-profesores es importante, pero el impacto del coronavirus ha alterado los ritmos de vida y sueño de ambas partes. Sin embargo eso no debe ser causa para no alargar el curso durante el verano con el fin de alcanzar la “nueva normalidad» y dar, de nuevo, un descanso al alumnado y al profesorado.
Aunque el regreso se reanude en junio y sea terapéutico y emocional, Celaá alerta de la posibilidad de rebrote de coronavirus en septiembre, por lo que están trabajando un plan de contingencia.
🔊 La ministra d'Educació, Isabel Celaá, assegura a @elsuplement que treballen perquè els alumnes puguin tornar a rebre educació presencialhttps://t.co/gkavGdDJVv
— Catalunya Ràdio (@CatalunyaRadio) May 30, 2020
“Salones marcianos” o extremas contra el coronavirus
Algunos países de Europa han dado el primer paso en el regreso a clases. Aún en medio de la pandemia, y con el temor de caer en una segunda ola de contagios crítica, Francia, Alemania y Bélgica han autorizado el retorno a las actividades escolares.
El gran protagonista del regreso a clases ha sido el protocolo de seguridad. Carteles, mamparas, señales, pupitres vacíos, mascarillas y geles alcoholizados son algunas de las medidas consideradas para finalizar los cursos y tomar el verano para descansar.
En Francia, el regreso a los salones inició el 11 de mayo, mientras que los estudiantes de los últimos cursos de secundaria lo hicieron a finales del mes.
Los niños se reencontraron con sus amigos y maestros de manera gradual: guarderías y escuela elemental de manera progresiva y según la situación sanitaria local. Otra de las medidas ha sido la capacidad de los salones que no debe exceder de los 15 alumnos.
Alemania: precaución al máximo con los estudiantes
En Alemania también apostaron por el regreso con distancia social. Bajo extremas medidas de seguridad, los estudiantes desempolvaron sus libros desde el 4 de mayo y hasta la llegada de las vacaciones de verano.
Una de las medidas de seguridad adoptadas, además de las clásicas, fue el uso obligatorio de máscaras sanitarias en el transporte público. No así para los chicos dentro del salón de clases.
Debido a lo complejo del sistema, no hay una cifra exacta de la cantidad de alumnos que regresaron a las aulas. La Oficina Federal de Estadística (Destatis) estima que hay 1,1 millones de alumnos de instituto, pero el lunes no regresaron todos los cursos de secundaria, y sí lo hicieron algunos de primaria.
Extremas medidas para estudiantes en Portugal
Para que no utilicen el transporte en las horas punta, las autoridades educativas de Portugal han dado permiso para que los alumnos de 16 a 18 años regresen a las aulas. El horario es distinto, solo van a clases desde las 10 hasta las 17 horas.
Entre las medidas para esta vuelta a clases antes de verano, las asignaturas están más concentradas en evitar horas libres con el fin de permanecer dentro del aula, excepto para ir al baño. No hay salas comunes, las bibliotecas y salas de ordenadores fueron reducidas a un tercio de la capacidad, y los comedores cerrados.
Los centros educativos han diseñado circuitos para promover la distancia física de dos metros entre los estudiantes. Hay señales de la ruta hacia la puerta de entrada al aula, el acceso a la cafetería, los vestíbulos y los baños.
Hay que lavarse o desinfectarse las manos antes y después del consumo de cualquier comida. Además, las ventanas tienen que estar abiertas siempre que sea posible para ventilar.
Bélgica ahora con menos contagios
El ministerio de Educación en Bélgica anunció que el regreso a clases será de manera gradual: el martes 2 de junio comienzan educación infantil y, una semana más tarde, el 8 de junio, las del ciclo de primaria. Las autoridades han tomado la decisión ante la baja de contagios y las necesidades emocionales y pedagógicas de los menores.
El Centro de Seguridad Nacional que forman las autoridades federales, regionales y locales había abierto ya las aulas hace una semana a dos cursos de primaria y uno de secundaria, con el objetivo de iniciar una desescalada gradual en la educación obligatoria que, en principio, dejaba para septiembre la vuelta de los más pequeños.
Entre las indicaciones para el reinicio de clases, las autoridades indican que los centros educativos ofrezcan las clases y actividades al aire libre en la medida de lo posible, para que mantengan las aulas, pasillos y otras instalaciones permanentemente con ventilación.
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