Gran parte de los bosques de Australia quedaron calcinados a principios de 2020. Ahora, para restaurar los hábitat de los koalas y salvarlos de la extinción, WWF ha puesto en marcha un plan piloto con el uso de drones que tienen la capacidad de lanzar hasta 40.000 semillas diarias en los bosques.
El proyecto del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF Australia), pretende plantar 100.000 árboles en tres años. Para el mes de abril comenzarán lanzando un dron con capacidad de lanzar hasta un máximo de 40.000 semillas por día. De tener éxito, WWF Australia buscará ampliar el proyecto y así poder plantar y conservar 2.000 millones de árboles para el año 2030.
“Queremos ver si los drones son buenos para la restauración de los hábitat de los koalas. En el futuro, si es que llegan a funcionar, podrán diseminar millones de semillas en el este de Australia para ayudar en la recuperación de los incendios y las sequías, pero primero tenemos que demostrar que funcionan“, explica el gerente de Restauración de la ONG, Stuart Blanch. Por ahora, WWF aún evalúa si la reforestación se hace mediante cápsulas que contienen varias semillas mezcladas con tierra artificial y abono, o las lanza en granel sobre diversas superficies, incluso inclinadas y de difícil acceso, sopesando tanto el coste como las probabilidades de germinación.
Proyecto de reforestación
Los incendios forestales del año pasado causaron graves daños en Australia. El llamado “Verano Negro” de 2019-20 mató a 34 personas y calcinaron más de 5.000 edificaciones y 186.000 kilómetros cuadrados de terrenos, de los cuales un 70% eran bosques. Además, los fuegos en Australia también causaron que unos 7.000 millones de árboles se quemaran y que 3.000 millones de animales, entre ellos 60.000 koalas, acabaran perdiendo la vida o, tras huir del fuego, quedaran heridos o sin hogar.
Ahora, WWF debe velar por la planta de árboles y posteriormente verificar que éstos crezcan lo suficiente como para mantener a los marsupiales con vida. Los árboles deben tener normalmente 37 centímetros de diámetro para que los koalas puedan vivir bien ahí. Una meta que tardaría unos 20 o 30 años.
Algo más que le preocupa a la organización es la tala de árboles en los estados Nueva Gales del Sur y Queensland. Aunque WWF ejecute su plan de reforestación, lo ideal sería que en Australia se permita a los bosques regenerarse naturalmente, así como que se detenga la destrucción de los hábitats de los koalas mediante leyes y poniendo fin a la tala de árboles.
Bosques calcinados
La temporada de incendios 2019-20 en Australia calcinó un 20% de la superficie forestal del país. Un fenómeno sin precedentes, según un artículo publicado en la revista Nature Climate Change. El porcentaje se traduce en 268.000 kilómetros cuadrados, más de la mitad de la extensión total de España, es decir, como si se hubiese quemado la superficie total de Aragón.
La investigación analiza el área de bosque quemado en cada continente durante los últimos 20 años. Los expertos destacan que, mientras que en el resto del mundo ardió una media del 4% o 5% de la superficie forestal en cualquier continente cada año, en Australia durante el 2019 ardió el 21%. Los únicos porcentajes que se le acercan a Australia, fueron en los bosques tropicales y subtropicales en Asia y África, para los cuales el análisis encontró que se habían registrado medias del 8 al 9% en ese mismo período.
En otro artículo, los científicos Benjamin Sanderson y Rosie Fisher examinaron algunos de los factores que pudieron influir para originar esta temporada de incendios en Australia. Para ellos, la temperatura fue uno de los principales impulsores de los grandes incendios. Pero lo más grave es que los autores aseguran que con el escenario actual de emisiones de efecto invernadero producido por ser humano, el fuego seguirá amenazando los bosques del país. Otros factores relevantes serían la sequía y la variabilidad climática.
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