Por Luis Roberto Martínez
05/02/2017
El referendo en Ecuador del domingo le ha dado una lección magistral a todo el mundo. En unas elecciones donde aparentemente sólo se pretendería frenar las ambiciones continuistas de Rafael Correa, en el fondo buscaban transformar todo el sistema político construido durante su gobierno. Un sistema donde la corrupción, el amiguismo y la complicidad se habían convertido en la forma «normal» de gobernar.
El resultado otorga una incuestionable legitimidad al presidente Lenín Moreno. Por consiguiente, para muchos analistas, la verdadera «era Lenin Moreno» comienza este lunes 5 de febrero de 2018. El propio mandatario lo celebraba este domingo, tras conocerse la abrumadora aprobación a las preguntas del referendo en Ecuador. “La confrontación quedó atrás, es hora de volver a abrazarnos”, fueron sus palabras.
Entretanto Rafael Correa, tres veces presidente de la República y con una duración en el mando de diez años, pierde la opción de regresar al poder en las presidenciales de 2021. Pero este revés no sólo es de Correa. Es un revés al populismo en la región que, en un año electoral en América Latina, debe sentar un ejemplo y precedente en la empresa de una vuelta a la estabilidad democrática en la región.
La importancia de los resultados del referendo en Ecuador
Actualización 06:54 | #Resultados2018
REFERÉNDUM
Pregunta 1|Sí:73.91%-No:26.09%
Pregunta 2|Sí:64.33-No:35.67%
Pregunta 3|Sí:63.16%-No:36.84%
Pregunta 4|Sí:73.73%-No:26.27%
Pregunta 5|Sí:68.79%-No:31.21%
CONSULTA POPULAR
Pregunta 5|Sí:63.2%-No:36.8%
Pregunta 6|Sí:67.45%-No:32.55% pic.twitter.com/jUNWQQZhTs— cnegobec (@cnegobec) February 5, 2018
La consulta popular era considerada como un barómetro del respaldo a la gestión de Moreno. Pero se convirtió en una demostración de la tendencia pendular del hemisferio de alejarse de la izquierda.
Las siete preguntas del referendo en Ecuador eran una consulta a cambiar la senda de un país. La consulta del domingo decidió varios aspectos. Primeramente la relección indefinida. También la inhabilitación de políticos sentenciados por corrupción. El pueblo ecuatoriano se pronunció mayoritariamente en contra de cualquier reelección es un durísimo golpe para los líderes de todo el área, estén ya en el poder o aspiren a estarlo.
Los resultados son un gran retroceso de la política inaugurado por Hugo Chávez en Venezuela y seguida por los populistas gobernantes de Nicaragua y Bolivia. Los tres ordenaron a sus Asambleas Nacionales la modificación de sus respectivas constituciones para que pudieran ser reelectos hasta la eternidad. Correa también lo consiguió: El 3 de diciembre de 2015, su Asamblea Nacional le aprobó el mando indefinido.
Pero Moreno apenas llegó al solio presidencial, Lenin Moreno -quien fue vicepresidente de Correa- comenzó a actuar, no solamente distinto, sino en franca oposición a su predecesor. Estaba convencido que el pueblo ecuatoriano estaba en contra del poder entronizado. Y los resultados están a la vista. La derogación de la reelección indefinida obtuvo un 64,32 % de respaldo.
Lógicamente apenas se han aprobado las bases, concretarlas resultará una dura tarea (Correa ya anunció que desconoce los resultados). Pero de cumplirse el sueño de Lenin Moreno, este país habrá dado un paso gigantesco para distanciarse del populismo.
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