POR NARKYS BLANCO
22/10/2017
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Las fuerzas rebeldes respaldadas por Estados Unidos entregaron el control del campo de gas más grande de Siria a las fuerzas rusas ayer, tras las conversaciones entre funcionarios rusos y kurdos en el noreste de Siria.
Los altos funcionarios se reunieron recientemente en Qamishli, posiblemente aterrizando en un acuerdo comercial para el control del principal activo de combustible fósil sirio. El campo de gas Conoco, ubicado cerca de la conflictiva zona de Deir Ezzor, fue liberado de las fuerzas del Estado Islámico a fines del mes pasado. Las fuerzas rusas ayudaron a los rebeldes sirios a capturar la región, que era uno de los principales bastiones de la organización terrorista en Siria.
La provincia de Deir Ezzor y sus recursos naturales proporcionaron al Estado Islámico la mayor parte del efectivo que necesitaba para financiar sus operaciones iniciales y campañas de reclutamiento. Antes del comienzo de la guerra civil posterior a la Primavera Árabe en 2011, la producción del campo Conoco era más alta que cualquier otra en el país. El nombre de ConocoPhillips, la compañía que descubrió el campo, produjo 450 millones de pies cúbicos de gas natural por día.
Rebeldes tenían el control
En 2005, después de construir una instalación en el campo, ConocoPhillips entregó el sitio a Syrian Gas Company. El periódico libanés Al-Masdar dio la noticia de la entrega del campo a las fuerzas rusas. Citando informes militares sirios, dijo que SDF y Rusia llegaron a un acuerdo que permite al régimen del presidente Bashar Al Assad retomar el control del campo Conoco.
La entrada de Rusia en la política siria coincide con su participación en la independencia post-kurda de Irak. Desde que se realizó la votación a fines del mes pasado, Moscú ha estado tomando medidas audaces para consolidar un vacío de poder en ausencia de una fuerte presencia política o militar estadounidense en la región.
El gigante petrolero estatal ruso Rosneft dijo el jueves que había acordado con el Gobierno Regional del Kurdistán tomar el control de la mayoría en la operación del oleoducto en la región kurda. La participación de Rosneft en el proyecto puede llegar hasta el 60 por ciento, mientras que el otro participante del proyecto con una participación del 40 por ciento será KAR Group, el operador actual del oleoducto, dijo la compañía rusa.