Por Iñigo Aduriz
30/08/2017
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha convertido este miércoles su comparecencia urgente para explicar su responsabilidad en el caso Gürtel y en la supuesta financiación ilegal del PP en un balance de su gestión y en un permanente reproche a las fuerzas de la oposición que habían solicitado su declaración, a las que ha sugerido que presenten otra moción de censura contra él si quieren valorar sus responsabilidades.
En su intervención en el Pleno del Congreso de los Diputados, Rajoy se ha limitado a señalar que ya ha dado explicaciones acerca del citado caso de corrupción en los últimos años. «He informado de lo mismo en 52 ocasiones», ha asegurado ante la sorpresa del hemiciclo.
El jefe del Ejecutivo ha hecho un repaso de las normativas aprobadas por su Gabinete en materia anticorrupción, pero no ha hecho ni una sola mención específica al caso Gürtel, a la caja B de la contabilidad del PP ni al extesorero de su partido, Luis Bárcenas.
«No basta hacer más exigentes las normas, hay que hacer más duras las sanciones. Por eso hemos facilitado la acción de la justicia. El Gobierno ha dotado de más instrumentos a los tribunales para hacer frente a la corrupción y para hacer que se devuelva hasta el último euro robado a los españoles», ha insistido, al señalar que el Ejecutivo ha aprobado «una decena de leyes para combatir la corrupción».
«En España no hay impunidad. De no ser así no habríamos conocido los casos de corrupción que hemos conocido estos años», ha remarcado Rajoy, que ha puesto en valor el papel de la Policía y de la Justicia contra esta lacra. «No hay impunidad para la corrupción», ha insistido una y otra vez. «Contra la corrupción son más efectivas las medidas que los reproches», ha señalado.
Yihadismo y Cataluña
Asimismo, se ha mostrado «dispuesto a seguir trabajando en los mecanismos de control» contra la corrupción y ha asegurado que volverá al Parlamento a hablar sobre este asunto cada vez que lo soliciten los grupos de la oposición.
En todo caso, ha querido dejar claras las «prioridades» de su Gobierno. Así, ha reclamado la «unidad» de todos los partidos «frente a la amenaza yihadista» y, respecto a Cataluña, ha asegurado que los políticos deben ser «firmes ante la voluntad de algunos de liquidar nuestra unidad territorial», con un «proyecto autocrático liderado por radicales que solo traería pérdida de libertad y bienestar» para los catalanes y españoles.
El PSOE pide su dimisión
Al tomar la palabra por primera vez en el hemiciclo, la portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles, ha pedido a Rajoy que dimita porque España «necesita un presidente creíble» para afrontar los «graves problemas» como el terrorismo o el debate territorial en Cataluña.
Robles ha acusado al jefe del Ejecutivo de estar «atrincherado en la Moncloa» ante los casos de corrupción en el PP, y le ha pedido que no haga «como otros presidentes que se envolvieron en la bandera» en situaciones similares.