Por Cambio16 | Efe
13/02/2016
El jefe del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha reivindicado el derecho del PP a presidir el próximo ejecutivo y a «dar la batalla para ello» y ha advertido de que la única alternativa a uno encabezado por él es «un gobierno de Podemos presidido por Sánchez y con el apoyo de los independentistas».
Un día después de su reunión con el líder del PSOE en la que certificó la ausencia total de acuerdo entre ambos, Rajoy se ha reunido en Murcia con la dirección regional del PP y ha ratificado su aspiración a un gobierno presidido por él y que cuente con el apoyo de los socialistas y de Ciudadanos. «El Partido Popular reivindica su victoria y su derecho a presidir el nuevo gobierno porque es lo que han dicho los españoles», ha proclamado entre aplausos de los asistentes a la reunión.
Ha reconocido que hay otra opción distinta a su propuesta pero sugiriendo que la iniciativa de ese otro gobierno sería de Podemos. «Sólo hay una alternativa. Un gobierno de Podemos presidido por Sánchez y con el apoyo de los independentistas», ha explicado antes de alertar de que eso supondría «un torpedo en la línea de flotación de la economía española, de la creación de empleo y de la Constitución».
Sería un ejecutivo que ha confiado que nunca llegue a ser realidad pero que ha garantizado que sería «combatido democráticamente por todo el Partido Popular».
Rajoy ha reconocido que Sánchez podría ser investido pero no podría gobernar «con nueve o diez partidos que piensan absolutamente diferente sobre temas tan importantes como la nación española». Al respecto, ha precisado que sin el apoyo tácito o expreso de los independentistas catalanes, Sánchez no sería presidente y que, «si gobierna con ellos, mal, muy mal para España».
El presidente en funciones ha avisado de que España necesita ya un nuevo gobierno y ha acusado a Sánchez de retrasar de forma indefinida su intento de investidura para hacer «propaganda política». «Que hable con Podemos y todos los demás y nos digan si se van a poner de acuerdo o no, porque no se puede estar indefinidamente así y por razones partidistas» cuando, ha recordado, hay riesgos económicos y partidos que amenazan la unidad de España.
Rajoy ha vuelto a justificar su decisión de no someterse a una sesión de investidura por el hecho de que, al no contar con el PSOE, no tenía los apoyos suficientes para superarla con éxito y no estaba dispuesto a «engañar a los españoles».
Pero ha insistido en su disposición a intentarlo en el futuro. «Si el señor Sánchez no consigue su pretensión -ha señalado-, el Partido Popular está dispuesto, si tiene los apoyos suficientes, a ir al Congreso a defender su programa y someterse a la votación de las Cortes»
Mientras muchos se dedican a «marear la perdiz» ha lamentado que no hablen de la economía cuando es primordial mantener la senda de la recuperación y la creación de empleo porque, si se pretende «liquidar», se volverá «a las andadas».
Rajoy ha recordado los cinco grandes objetivos que planteó esta semana para la legislatura, entre los que se encuentra la lucha contra la corrupción, y se ha referido a este asunto para volver a reconocer: «Nos ha hecho mucho daño».