POR CAMBIO16
06/07/2017
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Richard Duke Buchan, un empresario de Wall Street que fue donante de la campaña de Donald Trump en su carrera a la Casa Blanca, será el nuevo embajador para España y Andorra.
Buchan ocupará el puesto de la Embajada en Madrid que dejó vacante su predecesor, James Costos, a principios de año, tras la salida de Barak Obama de la Casa Blanca.
Buchan, de 54 años, es el fundador y presidente de Hunter Global Investors, un fondo de capital de riesgo con inversiones en el mercado inmobiliario, entre otros.
La firma está ubicada en Palm Beach, en Florida, el mismo lugar donde Trump tiene su club privado y la mansión Mar-a-Lago.
El empresario se graduó en Ciencias Económicas y en Español por la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, donde tuvo la posibilidad de participar en varios cursos en Valencia y Sevilla.
Además, estudió un Máster de negocios en la Universidad de Harvard. Buchan, tal y como explica la página web de su empresa, es un apasionado de «la literatura y cultura españolas», por lo que habla el idioma de este país y también tiene un conocimiento práctico del catalán.
Buchan y su donación
Aunque en las primarias republicanas Buchan apostó por Jeb Bush como aspirante a la Casa Blanca, pronto se convirtió en uno de los primeros donantes de la campaña de Trump.
Según informaciones de The New York Times, el empresario ha contribuido con 898.000 dólares, el máximo permitido por la ley estadounidense.
De ellos, 10.800 dólares fueron directamente a la campaña de Trump.
El resto fue para el Comité Nacional Republicano (NRC, por sus siglas en inglés). Así fue como estableció una buena relación con Reince Priebus, entonces presidente del NRC y posteriormente jefe de gabinete de Trump, aunque fue destituido el pasado viernes.
Sin embargo, según el citado medio, Buchan y Trump ya eran viejos conocidos. Sus hijos fueron juntos al mismo jardín de infancia y su relación era «bastante íntima».
El empresario llegó a decir que Trump es un «rompedor» del sistema político estadounidense y que estaba cansado de la corrección política.
Su nombramiento se produce después de varios meses de especulaciones en la prensa estadounidense sobre quién iba a ocupar este puesto.
No obstante, para que el nombramiento se haga efectivo, todavía debe ser aprobado por el Senado de EEUU, aunque no se espera que vaya a tener problemas.