Por Ana Bedia
18/12/2015
- Las propuestas energéticas
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- A favor de la Memoria Histórica
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Todos los partidos políticos dedican una parte importante de sus programas económicos a explicar la forma en la que van a aumentar la recaudación sin subir los impuestos a las clases trabajadoras.
El PP asegura que bajará los impuestos y el PSOE que no los subirá a las rentas medias, es decir los dejará como están. El Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas (IRPF) es la estrella programática del 20D y todas las formaciones tienen algo que decir al respecto.
Para aumentar la recaudación, los partidos prometen luchar contra el fraude fiscal con distintas medidas. Sobre el IVA, hay de todo, desde los que hacen propuestas de última hora que no están registradas en sus programas hasta los que incorporan nuevos tipos.
El PP se compromete a bajar los impuestos. Como medida estrella -que no viene incluida en el pdf de su programa– el líder popular, Mariano Rajoy, ha anunciado una rebaja de dos puntos del IRPF para la próxima legislatura que dejaría el tipo marginal en el 17% y el tipo máximo en el 43%.
La formación asegura que favorecerá fiscalmente el ahorro y la inversión. Para ello propone aumentar la cantidad que da derecho a deducción en el IRPF por las aportaciones a sistemas de previsión social, en los casos en que las aportaciones se realicen conjuntamente por el empleador y el trabajador, y revisar la forma de cálculo del IRPF cuando se rescaten planes de pensiones. «Ahora que las aportaciones de los planes de pensiones pueden rescatarse transcurridos diez años desde su constitución, queremos que la tributación de estos casos sea equilibrada. Por ello, promoveremos que la parte de los fondos recuperados que corresponde al rendimiento de las inversiones sea tratada como ahorro y tribute a un tipo menor».
Además, afirma que introducirá modificaciones en el régimen de las sicav para garantizar que estas sociedades se utilicen como instrumentos de inversión colectiva, finalidad para la que originalmente se crearon. «Para lograr este fin, sólo se computarán a efectos del número mínimo de 100 accionistas, los que tengan una participación superior al 0,55%».
Sobre la lucha contra el fraude aseguran que reducirán los plazos entre la declaración de los hechos imponibles y su comprobación.
En cuanto al IVA, los populares anunciaron este jueves que «casi con total seguridad» bajará el IVA cultural al 10%, aunque no figura por escrito en su programa.
Los socialistas se comprometen a no subir los impuestos a las rentas medias ni a los trabajadores, pero sí a una reforma impositiva que afecte a las rentas más altas. Argumentan que «la actual descoordinación entre el IRPF, el IS y el Impuesto de Patrimonio impide gravar adecuadamente la riqueza, dando lugar a una doble no tributación que permite que determinadas grandes fortunas y patrimonios no contribuyan de forma adecuada al sostenimiento de los gastos públicos», para hacer frente a esta situación el partido se compromete a crear una comisión de expertos que en seis meses realizará un informe sobre cómo mejorar la incorporación de la riqueza al sistema general de tributación y cuyas conclusiones entrarán en vigor con los Presupuestos para 2017.
Mientras, establecerá un mínimo común en toda España tanto en el Impuesto de Sucesiones y en el de Patrimonio, se establecerá una tributación mínima del 15% en el Impuesto de Sociedades sobre el resultado contable de las grandes empresas que no haya generado bases imponibles que hayan tributado de forma efectiva en otro país, rebajará el tipo del IVA a las actividades culturales y pondrá en marcha un Impuesto en las Transacciones Financieras.
Además, prohibirá por ley las amnistías fiscales y publicará las infracciones tributarias «de cuantía superior a 30.000 euros y la identidad de sus autores».
También impulsará la fiscalidad ambiental y, entre otros, habrá un impuesto sobre las emisiones de CO2 a empresas, otro sobre emisiones de vehículos de motor y que resultará de la fusión de los actuales impuestos de matriculación y circulación y un impuesto sobre residuos de envases, embalajes y bolsas.
Aumentará el número de tramos del IRPF a partir de 60.000 euros y elevará progresivamente el tipo marginal de cada tramo desde el 45% actual hasta alcanzar un tipo marginal del 55% para rentas superiores a 300.000 euros anuales. Además, eliminará las deducciones de carácter más regresivo.
La formación recuperará el impuestos sobre el patrimonio y sobre las sucesiones y donaciones. «El segundo de estos impuestos, el de sucesiones y donaciones, recaerá en grupos con alto nivel de renta». Y reformará el Impuesto de Sociedades.
Sobre el IVA: aumentá los alimentos y bebidas no alcohólicas a los que se aplica el tipo superreducido del 4%, aplicará el tipo reducido del 10% a todos los suministros básicos (calefacción, gas, electricidad), reducirá el tipo aplicable a los productos culturales y escolares y aplicará un nuevo tipo del 25% a los artículos de lujo.
El partido establecerá una «fiscalidad verde» con una reforma de los impuestos sobre los hidrocarburos
En su lucha contra el fraude Podemos se compromete a la tipificación del delito fiscal a partir de los 50.000 euros defraudados y a la ampliación a 10 años del plazo de prescripción de los delitos fiscales.
La formación se compromete a acometer una rebaja fiscal a favor de la clase media. Para ello propone: un IRPF progresivo que baje a todos los contribuyentes al menos un 3%, un Impuesto de Sociedades con menos beneficios fiscales con un tipo único del 20% y simplificar el IVA a dos tipos: uno general que se reduce de 21% a 18%, y otro reducido de 7%. Sanidad, educación y otros exentos lo seguirían estando.
La reforma fiscal que plantea la formación liderada por Alberto Garzón pasa, con poca concreción, por: profundizar en la progresividad fiscal haciendo hincapié en los impuestos directos, aumentar el IVA para «bienes suntuarios» y reducirlo para bienes de necesidad o culturales, regular la implantación de los impuestos a las grandes fortunas, así como el de patrimonio y de sucesiones con mínimos exentos, y establecer un Impuesto único sobre incremento de patrimonio en el periódo de crisis (2010-2015).
También habla de suprimir las sicav, crear un Impuesto sobre las Transacciones Financieras y actuar sobre las deducciones del impuesto de Sociedades, reduciéndolas al máximo.
La reforma fiscal de UPyD, como el resto de los partidos, pasa por la lucha contra el fraude fiscal. Se compromete a prohibir por ley las amnistías fiscales.
Asegura que bajará los impuestos porque el incremento de la recaudación se logrará «ampliando la base del sistema fiscal». Otra de las medidas que contempla el programa de la formación liderada por Andrés Herzog pasa por desincentivar los patrimonios» mantenidos en el exterior con medidas de discriminación negativa excluyéndolos, por ejemplo, de cualquier bonificación en el Impuesto sobre Sucesiones».
Sobre el IVA, aunque no concreta porcentajes, habla de ordenar adecuadamente los bienes y servicios gravados con los tipos contemplados (superreducido, reducido y general), con una especial consideración a los bienes y servicios culturales; «revirtiendo la subida arbitraria que se llevó a cabo en la última reforma».