Por Cambio16 | Efe
El 15 y el 16 se celebra la cumbre anual de jefes de Estado y Gobierno del G20 en la localidad turística turca de Antalya, a la que asistirán los mandatarios más poderosos del mundo. Aquí algunos datos sobre el encuentro:
¿Qué es el G20?
El Grupo de los 20 o G20 está compuesto por 19 de las mayores economías desarrolladas y emergentes del mundo, así como la Unión Europea, lo que representa el 85% de la economía mundial y más del 75% del comercio mundial. Sus encuentros se celebran desde 1999 y promueven la cooperación económica y acuerdos para regularizar y estabilizar el sistema financiero internacional.
Entre los países miembros destacan las mayores economías del mundo, como EEUU, China, Japón, Alemania, el Reino Unido y Francia, así como importantes países emergentes como India, Brasil, México y Sudáfrica. También asisten algunos países invitados, como España.
Turquía asumió la presidencia de turno en 2015 y preside la cumbre de líderes.
¿Cuáles serán los contenidos de la cumbre?
– La lucha contra el terrorismo yihadista del EI es uno de los asuntos principales que se debatirá este fin de semana, después de los atentados de París del viernes, los más graves perpetrados en suelo europeo desde el 11 de marzo de 2004, y en un momento en el que tanto EEUU como Rusia bombardean posiciones de grupos armados en el interior de Siria.
-Siria. Los líderes mundiales reunidos en Antalya aprovecharán el encuentro para tratar también sobre asuntos candentes en la escena internacional. La guerra civil en Siria y el caldo de cultivo que supone para organizaciones terroristas como el Estado Islámico (EI) es uno de los asuntos que más preocupa en la comunidad internacional.
A finales de octubre los principales actores externos en el conflicto sirio -EEUU, Arabia Saudí, Irán y Rusia- se reunieron en Viena para tratar de impulsar un proceso de transición que permita acabar con cuatro años de sangrienta guerra civil.
Mientras Rusia e Irán apoyan al régimen del presidente sirio Bachar al Asad, EEUU, la UE y numerosos países árabes demandan que abandone el poder para permitir una transición. Ambos bloques han dado muestras de flexibilidad: Rusia e Irán han matizado que su apoyo a Asad no es indefinido y EEUU y la UE han asegurado que el presidente sirio podría permanecer unos meses en el poder durante esa hipotética transición para facilitar un final al conflicto.
Antalya está a poco más de 700 kilómetros de la frontera con Siria y en Turquía han buscado refugio casi dos millones de sirios que huyen de la guerra en su país.
-Crisis de refugiados: La crisis de los refugiados en Europa, con la llegada de más de medio millón de personas al continente en lo que va de 2015, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) será otro asunto de la cumbre.
Al encuentro asistirán los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, con el objetivo de dar una respuesta internacional a la situación.
La UE considera que los veinte países más industrializados y emergentes del mundo deben «estar a la altura de este reto y liderar una respuesta coordinada e innovadora» a este problema que tiene una «naturaleza y consecuencias económicas globales».
La UE trabaja en concretar un plan de acción con Turquía para que ese país contenga el flujo de refugiados hacia la UE a cambio de un apoyo financiero de los Veintiocho, por lo que los dos líderes comunitarios aprovecharán la cumbre del G20 para avanzar en este aspecto con las autoridades turcas.
-Prioridades económicas. El contenido económico y financiero es fundamental en las reuniones del G20 y este año la presidencia turca ha establecido tres: inclusión, implementación e inversión para el crecimiento. La «inclusión» supone un mejor reparto de los beneficios del crecimiento económico, por medio de potenciar a las pequeñas y medianas empresas y luchar contra el desempleo juvenil.
Con el acento puesto en la «implementación», se pretende impulsar que las reformas financieras acordadas en los últimos años se apliquen de forma efectiva. Y la «inversión» como un motor de crecimiento en un momento económico todavía débil después de la recesión mundial de 2008 y 2009.
-Reformas en el sistema bancario. Más de seis años después de la crisis de 2008, el G20 quiere concluir los últimos capítulos de una regulación diseñada para evitar que se repitan los colapsos bancarios que llevaron a los rescates multimillonarios de entidades financieras en los Estados Unidos y Europa.
Estas reformas prevén que los bancos mantengan importantes reservas de activos que puedan convertir en liquidez en caso de que haya problemas con algún prestamista.
El objetivo es que el dinero de los contribuyentes no vuelva a emplearse para rescatar a entidades financieras y que el concepto «demasiado grandes para caer» sea cosa del pasado en el sector bancario, según el presidente del Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) del G20, Mark Carney.
-Situación económica mundial. En la reunión está previsto que se debata también la situación económica, en la que la desaceleración de China, el crecimiento anémico en la Eurozona y la posible subida de los tipos de interés en EEUU puede afectar aún más a las economías en desarrollo.
El G20 también seguirá trabajando en la transparencia fiscal y la UE espera que en Turquía se logre un «acuerdo ambicioso» sobre evasión fiscal.
-Tensiones en el Mar de China Meridional: La presencia del presidente de EEUU, Barack Obama, y del primer ministro Chino, Xi Jinping, puede ofrecer una oportunidad para que ambos países hablen sobre las recientes tensiones por el Mar de China Meridional, que Pekín reclama casi en su totalidad y sobre el que Filipinas, Vietnam, Taiwán, Malasia, y Brunei también tienen aspiraciones.
-Cambio climático: La UE ha anunciado que defenderá en la cumbre el objetivo europeo de contener el calentamiento global por debajo de 2 grados Celsius en 2100 y una eliminación gradual de los subsidios a combustibles fósiles, además de que buscará una mayor cooperación dentro del G20 sobre las energías renovables y la eficiencia energética.
La reunión se produce antes de una importante cumbre sobre cambio climático que comienza en París el 30 de noviembre. La posición de China en la reunión de París será importante para llegar a cualquier acuerdo.
La política de Pekín sobre el cambio climático se ha vuelto más receptiva en los últimos meses y el pasado junio el país se comprometió a que para 2030 reduciría sus emisiones de CO2 por unidad de PIB en un 60 a 65% en comparación con los niveles de 2005.