Hong Kong se encuentra revolucionada desde el fin de semana con protestas que han culminado en hechos violentos, luego de que el gobierno regional anunció su intención de llevar a cabo un proyecto de ley de extradición a China.
Esta ley no deja de ser polémica, ya que algunas personas consideran que es un acercamiento con China. Los principales críticos temen que desde Pekín se aprovechen de la ley para extraditar a personas por razones políticas o religiosas, según reseñó el portal de noticias Euronews.
Protestas sin precedentes en Hong Kong#China busca ampliar su poder sobre la antigua colonia británica. Los detalles con @FoncillasAdrian #leydeextradición @JennyPerezTV [cs] pic.twitter.com/T6rEttNOeJ
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El descontento de los ciudadanos ha sido masivo. Las calles de la ciudad estuvieron arropadas por millones de personas, quienes protestaban en contra de la ley. Incluso, algunos manifestantes más radicales llegaron a pedir la renuncia de la jefa de gobierno, Carrie Lam.
No obstante, Lam aseguró que no tiene intención de retirar el proyecto de ley ni de dimitir de su cargo.
Los propulsores de la ley defienden el proyecto al afirmar que tendrá las garantías necesarias para evitar que desde Pekín se extradite a sus opositores de manera deliberada y por motivos políticos.
Aunque la protesta del domingo fue una de las más grandes en la historia de Hong Kong, los ciudadanos tienen pocas esperanzas de que el gobierno se retracte, ya que cuentan con mayoría en el Congreso.
Un millón de personas en las calles
La manifestación del domingo fue una de las más grandes en la historia de Hong Kong. Según cifras de los organizadores, más de un millón de personas acudieron al llamado.
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La protesta del domingo se mostró más contundente que las movilizaciones de 2014, cuando cientos de activistas ocuparon el centro de la ciudad por 79 días, en la manifestación denominada «Movimiento de los Paraguas».
Los medios de comunicación locales han catalogado a esta marcha como la segunda más importante en la historia de Hong Kong, después de la realizada en 1997, cuando los ingleses le entregaron el territorio a China.
Un país, dos Estados
Hong Kong dejó de ser colonia inglesa en el año 1997. Sin embargo, el Reino Unido acordó con China que ese territorio debía ser respetado como una región administrativa especial, con la preservación del sistema económico y político.
La prensa china y el ministerio de Exteriores acusaron a "manos extranjeras" de estar tras las masivas protestas contra polémica ley #HongKong #China https://t.co/3jpqzSBpTg [dz]
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Desde entonces, Hong Kong alberga su propio sistema legal, diversos partidos políticos hacen vida y hay garantías de la libertad de expresión y financiera.
La región prosperó con un sistema económico capitalista y logró un desarrollo notable.
Desde 1997, China aceptó a Hong Kong bajo esa figura y en el panorama global se percibía como un solo país con dos Estados.
El interés de China en Hong Kong
Algunos grupos civiles de Hong Kong habían denunciado en los últimos años que desde Pekín intentan socavar su democracia y estilo de vida. Varios consideran que el proyecto de ley es otra arremetida desde China.
Para China es de suma importancia tener cierto control sobre Hong Kong, ya que cualquier concesión podría dar pie para que los movimientos independentistas del territorio tomen auge.
Hong Kong no cede con la ley de extradición pese a las multitudinarias protestas https://t.co/WtDhsdPsho
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Sin embargo, el interés va más allá de un asunto interno. Desde Pekín siempre han visto con preocupación las buenas relaciones que ha tenido Hong Kong con occidente.
China teme que Hong Kong sea la puerta por donde entren las potencias occidentales a Asia, su área de influencia política y comercial.
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