Por Cambio16
09/06/2018
La reunión Sánchez Torra cerró su primer capítulo este lunes con la convocatoria a la Comisión bilateral Estado-Cataluña que llevaba sin convocarse desde el año 2011. En el encuentro, Torra planteó a Sánchez el «derecho de autodeterminación». Mientras que el presidente le ha respondido con la Constitución y el derecho de Cataluña.
«El president de la Generalitat ha hablado con Sánchez de la autodeterminación», precisó Carmen Calvo. La vicepresidenta añadió que el jefe del Ejecutivo le ha respondido recordándole el «altísimo autogobierno», que tiene Cataluña. Asimismo, con el «cumplimiento del artículo 2 Constitución y del Estatuto de Cataluña».
«(En la reunión Sánchez Torra) han podido dialogar en posiciones que todos conocemos. Todas obligadas para el Gobierno de España», ha remachado Calvo. Insistiendo en que la reunión ha sido institucional, pero «llena de cortesía y fluidez».
Pocos minutos luego de estas declaraciones, el propio Sánchez emitió un mensaje en su cuenta en la red social Twitter. «Una crisis política requiere de una solución política. Esta reunión es un punto de arranque constructivo para la normalización de las relaciones» escribió, en un mensaje tanto en castellano como en catalán.
Una crisi política requereix una solució política. Aquesta reunió és un punt d'arrencada constructiu per a la normalització de les relacions. pic.twitter.com/l60yTYPjVr
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) July 9, 2018
«No renunciaremos a ninguna fórmula»
Trascendió además que Quim Torra transmitió a Sánchez «que no renuncia a ninguna de las fórmulas» para conseguir la independencia de Cataluña.
Tras precisar que el que debería haber acudido a la reunión es Carles Puigdemont por haber ganado las elecciones, el jefe del Ejecutivo catalán ha insistido ante Pedro Sánchez en el derecho de autodeterminación y ha recalcado que cualquier solución para el conflicto, que ha calificado de político, pasa por ejercer ese derecho. Ha añadido que el 80 por ciento de la población catalana reclama un referéndum en este sentido.
Joaquín Torra ha precisado que valora especialmente la «relación bilateral» entre el Gobierno español y catalán y se ha lamentado de la diferente situación en que se encuentran los políticos independentistas presos en España, a los que ha llamado presos políticos y los huidos que hay en Europa, a los se ha referido como «exhiliados».
Una previa agitada
La reunión Sánchez Torra que tendrá lugar este lunes en Moncloa mantiene en expectativa a todas las fuerzas políticas. Por consiguiente, representantes de los partidos constitucionalistas lanzaron este domingo alertas y mensajes al presidente del Gobierno. Principalmente para exhortarlo a no acceder a lo que consideran el marcado propósito del secesionismo de reeditar el procés. Una intención confirmada por declaraciones de representantes clave de ese sector en las últimas horas.
El viernes (06 de junio), la portavoz del Gobierno, Isabel Celáa, aseguró que el Ejecutivo llevará a la reunión Sánchez Torra una agenda «social y económica. Pensada para el conjunto de los ciudadanos catalanes. Pero rechazará rotundamente negociar o permitir iniciativas encaminadas a que Cataluña se desgaje de España». Al mismo tiempo, anunciaba la decisión de impugnar ante el Tribunal Constitucional (TC) la última moción del Parlament que insiste en la vía unilateral de creación de una República independiente.
El entorno de Torra lamentó esa decisión. Pero confirmó la intención de celebrar la reunión Sánchez Torra. Cabe destacar que el propio Torra avanzó que quiere que a este encuentro le siga otro en septiembre.
Según el entorno del Govern, el president quiere llevar a la reunión Sánchez Torra una discusión sobre la «existencia de presos políticos» y de la «presencia del franquismo en el espacio político y civil del Estado». Asimismo, como la permanencia de nombres franquistas en el nomenclátor o la situación del Valle de los Caídos.
Pero declaraciones como las que concedió este domingo el portavoz de ERC, Joan Tardá, hacen pensar en una una agenda velada. Tardà aseguró en una entrevista con RAC1 que el independentismo tendrá que «desobedecer cuando sea necesario» para alcanzar la independencia de Cataluña. Por ende, pidió al gobierno que «reconozca la realidad» en la región.
Ojos puestos en la reunión Sánchez Torra
En consecuencia, varias voces del espectro político enviaron este domingo mensajes a Sánchez. Una de ellas fue Soraya Sáenz de Santamaría. La candidata a la presidencia del PP pidió al presidente del Gobierno que no ceda «un ápice» a las pretensiones de las nacionalistas «en pago de los votos de la moción de censura».
«Lo que yo le pido a Pedro Sánchez es que ese acuerdo en el que trabajamos lealmente todo el Gobierno, todo el PP y todo el Partido Socialista lo tenga muy presente antes de reunirse con Torra», ha incidido Sáenz de Santamaría. La dirigente lamentó que Sánchez no se hubiera reunido con los partidos constitucionalistas antes de la reunión con el presidente catalán.
En el mismo tenor, Albert Rivera tuvo palabras para la reunión Sánchez Torra. El líder de Ciudadanos acusó a los dirigentes independentistas de querer «liquidar España». Por consiguiente ha propuesto «acabar con el apaciguamiento y las negociaciones». Asimismo, «dejar de mirar hacia otro lado» para empezar a «actuar y defender las libertades de todos los ciudadanos españoles».
.@Albert_Rivera Rivera defiende "una España de ciudadanos libres e iguales" frente a la "ingenua nación de naciones" de @Sanchezcastejon pic.twitter.com/b7OAgqqwOx
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) July 8, 2018
«Pedro Sánchez hablaba de normalizar la situación. Lo que no es normal es que un presidente autonómico llame bestias taradas a todo el pueblo español», ha denunciado en relación a las palabras del presidente de la Generalitat, Quim Torra, en las que describe así a los españoles.