La Cámara de Representantes de los Estados Unidos comenzó formalmente el «impeachment» contra Donald Trump. Por primera vez en dos décadas, el Capitolio norteamericano ha comenzado el proceso de destitución al jefe del Estado.
El juicio político en contra de Trump ha tomado temperatura, luego de que dos de los máximos responsables de las relaciones internacionales entre Estados Unidos y Ucrania ofrecieran sus testimonios.
Rep. Demings: “What interests do you believe he [Mr. Giuliani] was promoting, Mr. Kent?”
Mr. Kent: “I believe he was looking to dig up political dirt against a potential rival in the next election cycle.” […]
Ambassador Taylor: «I agree.» pic.twitter.com/eb6qYZaAeC
— House Foreign Affairs Committee (@HouseForeign) November 13, 2019
Estos funcionarios confesaron que el presidente de Estados Unidos creó una especie de «diplomacia paralela» constituida por miembros de su gabinete para presionar al Gobierno de Kiev a que investigara al exvicepresidente de EEUU, Joe Biden y a su hijo Hunter, quien laboraba en una industria de gas en el país del este de Europa.
La controversia comienza cuando un primer testigo develó que Trump amenazó al mandatario de Ucrania, Volodímir Zelenski, con retirar la ayuda militar a su nación si se negaba a investigar a los Biden.
Ante este hecho, la Cámara de Representantes liderada por la demócrata Nancy Pelosi, reunió evidencias y comenzó el «impeachment», acusando a Trump de sedición y traición a la patria.
Trump será el cuarto presidente de los Estados Unidos que es sometido a un juicio político, después de Andrew Johnson, Richard Nixon y Bill Clinton.
Nueva revelación en el «impeachment»
William Taylor, actualmente encargado de negocios en Ucrania, reveló por primera vez que los miembros de su personal escucharon al presidente Donald Trump hablando por teléfono con Gordon Sondland, embajador de EEUU ante la Unión Europea.
Según el testimonio, en esa conversación el presidente estadounidense parecía indicar que estaba más interesado en que los Biden fueran investigados que en la política general con Ucrania.
WATCH LIVE: @HouseIntel public hearing with Ambassador Bill Taylor and George Kent.
They will testify about Trump’s efforts to pressure Ukraine to investigate the Bidens, and the effect it had on our national security: https://t.co/GwGcBZMZGC
— Adam Schiff (@RepAdamSchiff) November 13, 2019
Esa llamada se realizó el pasado 26 de julio y llegó a manos de Tylor gracias a un colaborador. Esta es una nueva evidencia que no había salido de la luz pública y que refuerza los argumentos del «impeachment».
Taylor también afirmó que el abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, era el líder de un canal «altamente irregular» de comunicación con Ucrania.
Let’s set the record straight:
Trump wasn’t working to help Ukraine root out corruption.
On the July 25 call, he didn’t ask Zelensky about any issue related to Ukraine’s oligarchs.
He did ask about the Bidens. Trump’s only focus was his own personal, political gain. pic.twitter.com/Nr1xMHq5te
— Adam Schiff (@RepAdamSchiff) November 13, 2019
Otro testigo de esta primera audiencia pública fue George Kent, un subsecretario de Estado adjunto responsable de la política hacia Ucrania, quien resaltó la irregularidades de la conversación telefónica entre Trump y Zelenski.
«No creo que EEUU deba pedir a otros países que hagan investigaciones y enjuiciamientos selectivos de carácter político contra sus rivales en el poder, porque tales acciones selectivas socavan el Estado de derecho independientemente del país», dijo Kent.
Demócratas contra republicanos
Aunque Donald Trump expresó hace días que estaría muy ocupado para seguir la primera audiencia del «impeachment», el presidente de los Estados Unidos hizo referencia en su cuenta Twitter de lo que estaba ocurriendo.
«They’re trying to stop me, because I’m fighting for you. And I’ll never let that happen.» — President @realDonaldTrump pic.twitter.com/ch0N1SWShe
— The White House (@WhiteHouse) November 13, 2019
«Están tratando de detenerme, porque estoy luchando por ti. Y nunca dejaré que eso suceda», expresó Trump.
Por su parte, los representantes republicanos en el panel de inteligencia intentaron desprestigiar a los testigos con preguntas rápidas, utilizando rumores y suposiciones, y señalando que ninguno había interactuado directamente con Trump.
Schiff isn’t even trying to hide it. He is the prosecutor, judge, jury, witness coach & lead story teller of this kangaroo court. He’ll burn the whole house down to take POTUS out. Charges don’t actually matter. Facts don’t actually matter. Evidence doesn’t actually matter.
— Lee Zeldin (@RepLeeZeldin) November 13, 2019
Como respuesta, los demócratas hicieron acusaciones de posibles «sobornos» y «extorsiones».
The facts are not seriously contested:
This January, Trump’s personal lawyer pressed Ukraine for investigations that would help Trump politically.
$400 mil in assistance was withheld. A White House meeting was conditioned.
As summer to turned to fall, it kept getting worse. pic.twitter.com/bLLaT0X39F
— Adam Schiff (@RepAdamSchiff) November 13, 2019
“Si la investigación determina que Trump trató de condicionar, coaccionar, extorsionar o sobornar a un aliado para llevar a cabo investigaciones para ayudar a su campaña de reelección y lo hizo reteniendo actos oficiales, una reunión de la Casa Blanca o cientos de millones de dólares de ayuda militar necesaria ¿debemos simplemente superarlo?», preguntó el representante demócrata, Adam Schiff.
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